Empiezan a descartarse líneas de investigación. Se especulaba sobre la posibilidad de que a Diego Fernández de Cevallos se lo llevara un grupo armado. Ya no es una tesis firme porque las autoridades no encuentran marcas del crimen organizado en la zona, y luego de que el EPR, uno de los grupos guerrilleros más articulados (que se sepa) en el país ya dijo que no lo tiene. Se reafirma, entonces, lo del secuestro. Ayer, el ex procurador de la República y socio del abogado, Antonio Lozano Gracia, inclinó la balanza hacia allá. En un comunicado llamó “a las personas que retienen al licenciado a que entablen comunicación, en aras de negociar su liberación”. Pero otros elementos confirman el posible plagio: nos dicen que las tijeras encontradas en el auto, con sangre del tipo de la de Diego, son evidencia clave. Y hay huellas dactilares. Y hay más. El accesorio, que el abogado pudo llevar consigo para arreglarse la barba (o pudo tener dentro de la casa), fue usado como arma punzocortante. Entonces podría explicar el tipo de secuestradores involucrados. Unos con no mucha pericia, porque confrontaron a la víctima con unas tijeras y las dejaron en la escena del crimen. Unos que conocían el rancho, porque allí lo esperaron. Unos que pudieron acercarse a él, hasta arriesgarse a una lucha cuerpo a cuerpo. Unos que no sacaron armas de fuego y le dispararon cuando se resistió, sino que lo “picaron”. Unos que permitieron que el abogado pensara que era posible oponerse a la agresión. Unos muy peligrosos, desgraciadamente: de los perfiles de secuestradores, los que más daño pueden hacer a sus víctimas son los inexpertos. Temen ser reconocidos y cometen errores y barbaridades. Eso nos dicen de buenas fuentes.
“No aceptaremos la derrota. Históricamente hemos aceptado las derrotas, pero no aceptaremos los resultados en Mérida porque no se ha decidido nada”, dijo ayer César Nava antes del mediodía. Y a la hora de la comida, salieron los datos del PREP en Yucatán: con 95.2 % de los votos computados, el PRI-PVEM se queda con Mérida. Ganan por casi 13 mil votos. Y en el Congreso, según los datos oficiales, el PRI se queda con 13 escaños de mayoría y el PAN con 2. Antes el PRI tenía 10 y el PAN 5. Nava es muy joven, pero no lo suficiente como para no saber que esta elección se considera una “probadita” de lo que puede venir el verano en otros estados. Yucatán es la primera prueba electoral del presidente del PAN. Una prueba dura, pero no del tamaño de la que está por venir…
Apunte final: Que el viernes detuvieron a Ignacio El Nacho Coronel, jefe dentro del cártel del Joaquín El Chapo Guzmán. Que el sábado se llevaron a Diego y que negocian uno por otro.
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