domingo, 6 de junio de 2010

TRASCENDIO

Que tremendo papelón hizo ayer la Suprema Corte de Justicia en el día de luto nacional por los niños fallecidos por el incendio de la guardería ABC de Hermosillo.

Al menos durante la ceremonia luctuosa en honor a la memoria de los 49 menores, nadie en la Corte ordenó izar la bandera a media asta, como sí ocurrió en Palacio Nacional y la Plaza de la Constitución.

Y eso que tienen el caso en sus manos.

Que durante el foro sobre las perspectivas de desarrollo económico y social de entidades petroleras, que organizó el gobierno de Veracruz, Fidel Herrera despotricó por la nueva alza de precios de los combustibles que, según él, registraban su sexto aumento en el año.

Tuvo que acercarse la presidenta nacional del PRI, Beatriz Paredes, para aclararle sotto voce que el aumento de junio se había diferido gracias a la gestión del partido.

Como si no hubiera dicho nada antes, Fidel cambió el tono y se puso a presumir la “defensa del PRI a la economía nacional”. ¿Pues que no le pasan tarjetas?

Que, por cierto, en Hacienda estudian aguantar los gasolinazos mensuales hasta después de las elecciones del 4 de julio en una docena de entidades.

La decisión no es fácil, porque el aumento entonces tendría que ser de 12 centavos por litro para resarcir lo no hecho en los meses anteriores.

Que después de escuchar los planteamientos de Enrique Peña Nieto el domingo pasado, será interesante compararlos con los de Marcelo Ebrard, en el quinto de los seis programas de la serie Un futuro para México.

Conducen Héctor Aguilar Camín y Jorge Castañeda. En MILENIO Televisión, hoy a las 21:30 y 23:30 horas.

Que para quienes se preguntan por qué el Gobierno del DF tenía tanta urgencia de que los huelguistas de hambre del SME desalojaran la mayor parte del Zócalo, deberían saber que la administración de Ebrard firmó un acuerdo con la FIFA para que durante los 30 días que dure ahí el Fan Fest se transmitan a todo el mundo imágenes de lo que esté ocurriendo en la plaza central de la capital.

No era difícil sacar conclusiones: ¿qué prefieren, imágenes de electricistas en huelga de hambre, o de una ciudad en pacífico reventón futbolero?

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