Caballo de Troya
miércoles, 23 enero 2008
Abogados constitucionalistas consideraron un peligro inminente el hecho de que lleguen empresas extranjeras como Halliburton a realizar labores de exploración y/o perforación de pozos petroleros en el país / Si no existe un control del Poder Legislativo y una supervisión independiente se corre el riesgo de que “ya no sepamos al final quién tiene el control de los energéticos”
El caso de Halliburton puede terminar convirtiéndose en una especie de “caballo de Troya”, pues en adelante quedará abierta la puerta para que ingrese una u otra empresa extranjera a territorio mexicano: Raúl Carrancá y Rivas.
MEXICO, D.F., 22 de enero (LA JORNADA).- Abogados constitucionalistas consideraron un “peligro inminente” el hecho de que lleguen empresas extranjeras como Halliburton a realizar labores de exploración y/o perforación de pozos petroleros en el país, pese a que la Carta Magna, en su Artículo 27, conceda esa posibilidad a particulares, ya que si no existe un control del Poder Legislativo y una supervisión independiente del gobierno, se corre el riesgo de que “ya no sepamos al final quién tiene el control de los energéticos”.
El doctor en Derecho Constitucional y maestro emérito de la UNAM, Raúl Carrancá y Rivas, refirió que el caso de Halliburton puede terminar convirtiéndose en una especie de “caballo de Troya”, pues en adelante quedará abierta la puerta para que ingrese una u otra empresa extranjera a territorio mexicano.
El también constitucionalista y académico de la UAM, Elisur Arteaga Nava, coincidió con Carrancá en lo delicado que representa abrir a firmas extranjeras la exploración en territorio mexicano, aunque reconoció que la perforación de pozos no viola el artículo 27 constitucional.
“La Constitución le concede a la nación el monopolio para llevar a cabo la explotación del carburo de hidrógenos sólidos, líquidos y gaseosos. Esto, interpretado jurídicamente significa que cuando se confiere un monopolio sólo está referido al objeto directo del mismo. En este caso, la nación sólo tiene el monopolio sobre la explotación, pero esto no impide que un particular pueda explorar y perforar. La Ley secundaria puede prever que un particular pueda hacer perforación y una vez que encuentra el petróleo, gas o hidrocarburo, en ese momento tiene que poner las instalaciones, cerrar la válvula y entregársela a la nación”, explicó Arteaga Nava.
A decir de Carrancá y Rivas, si bien el Estado mexicano sí puede permitir, sin violar la Constitución, que una empresa particular realice perforaciones en el país y ayude con ello a Petróleos Mexicanos (PEMEX), eso “es sumamente delicado” porque ponen en riesgo el control de un bien propiedad de la nación.
“Felipe Calderón podrá argumentar que heredó una situación crítica en PEMEX, que implica un vacío en infraestructura técnica, en tecnología de punta y en fuerza humana, y que por eso requiere apoyo de empresas privadas especializadas; de acuerdo, pero hay que cuidar y vigilar con lupa a estas firmas extranjeras, porque me da la impresión de que la entrada de Halliburton es el caballo de Troya que dará pie a que otras empresas lleguen de manera descontrolada”, puntualizó Carrancá.
Agregó que el peligro de permitir a empresas extranjeras coadyuvar con PEMEX es que “primero llega una, luego vendrán otras, y al final de cuentas ¿quién estará manejando la principal riqueza de la nación? Pues los extranjeros”.
El Artículo 27 Constitucional en su párrafo cuarto establece: “Corresponde a la nación el dominio directo de todos los recursos naturales de la plataforma continental y los zócalos submarinos de las islas; de todos (?) los combustibles minerales sólidos; el petróleo y todos los carburos de hidrogeno sólidos, líquidos o gaseosos; y el espacio situado sobre el territorio nacional, en la extensión y términos que fije el derecho internacional”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario