COLUMNAS
Importancia de los ingresos petroleros en el tipo de cambio, inflación, reservas internacionales y remanentes de Banxico
Los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, tuvieron la suerte de tener ingresos petroleros más altos de la historia del país el control de la inflación, así como acrecentar las reservas internacionales del Banco de México y son uno de los principales factores para que haya remanentes financieros de la banca central.
Los ingresos que se obtienen por la venta de la mezcla mexicana de petróleo en los mercados internacionales son de gran importancia para la conformación del presupuesto de ingresos y gasto del país, pero las divisas que se tienen por la venta de crudo de exportación también son de vital importancia para mantener la estabilidad cambiaria del peso frente a las monedas de otros países, el control de la inflación, así como acrecentar las reservas internacionales del Banco de México y son uno de los principales factores para que haya remanentes financieros de la banca ce
El tipo de cambio del peso mexicano, frente a las divisas extranjeras está determinado desde 1995 por la oferta y demanda entre la moneda nacional y las divisas de otros países, lo que se conoce como libre flotación.
Los dólares obtenidos por la venta de petróleo mexicano en los mercados internacionales, son una de las fuentes más importantes de oferta de divisas extranjeras para el mercado de cambios mexicano, lo que significa que a mayores ingresos petroleros se tendrá una mayor estabilidad del tipo de cambio de la moneda mexicana.
La estabilidad de precios de las mercancías, así como el control de la inflación son necesarios para el crecimiento de la economía y el bienestar de los habitantes del país.
El Banco de México (Banxico) es la entidad responsable, de combate la inflación, los instrumentos con los que cuenta la banca central para cumplir su cometido se basa en el control de la oferta monetaria, que evite el exceso de dinero en el mercado, además de fijar la tasa de interés de referencia adecuada que ejerza un efecto sobre el resto de las tasas de interés del mercado y la estabilidad del tipo de cambio que es un punto necesario para el control de los precios de las mercancías importadas que se consumen en el país.
En México más del 50 por ciento de los productos que se consumen el país son importados, por lo que la depreciación del peso frente a las monedas extranjeras trae como consecuencia un aumento de los precios en moneda nacional de las mercancías e insumos adquiridos en el exterior.
Las reservas internacionales de Banxico, que las podríamos definir como los activos financieros que el banco central invierte en el exterior y que pueden ser fácilmente convertidos en medios de pago; son de vital importancia para la estabilidad de la moneda nacional ya que muchas veces estas divisas son usadas para disminuir la volatilidad cambiaria, inyectando dólares de estas reservas al mercado.
La fuente de financiamiento de las reservas provienen principalmente los ingresos obtenidos en el exterior por la venta de petróleo mexicano.
La hoy empresa productiva del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex), que es la responsable de la producción y venta de crudo en el país, tiene la obligación de acuerdo con el artículo 34 de la Ley del Banco de México, de vender directamente a Banxico los dólares producto de sus ventas de crudo en el exterior, lo que implica que Pemex es la principal fuente de divisas que conforma la reserva internacional.
Las reservas internacionales se requieren financiar, por lo que no tienen por contrapartida un pasivo, por esto no deben confundirse con un patrimonio que se pueda utilizar discrecionalmente. Además, si se utilizaran las reservas para financiar la actividad productiva se estaría incurriendo en préstamos al Gobierno, algo que prohíbe expresamente la constitución.
La política macroeconómica del país, se respalda en gran medida de las reservas internacionales, teniendo una estrecha relación con la política cambiaria, pues las operaciones de compra –venta de divisas que realiza Banxico puede afectar las condiciones del mercado cambiario.
Mientras más pueda llegar a ser un oferente o demandante la banca central en el mercado cambiario, las intervenciones de esta institución podría llegar a influir en el tipo de cambio y ejemplo de esto lo tenemos en las intervenciones de Banxico en la oferta de dólares en el mercado a través de subasta de la divisa estadounidense durante 2008, 2009, 2014 y 2015, con lo que se redujo la volatilidad y la especulación en el tipo de cambio.
Banxico puede tener ganancias y pérdidas a lo largo de su ejercicio, pero esta banca central no tiene un propósito de lucro, por lo que la institución que ahora preside Agustín Carstens, tras constituir reservas, está obligado a entregar al Gobierno Federal el importe de remanente de operación si es que hay.
Los remanentes que tiene Banxico, los obtiene principalmente de la venta de dólares a mayor precio de cómo los adquirió al comprárselos a Pemex, con lo que obtiene una “ganancia” siendo que hay un mayor beneficio cuando más depreciación hay del peso frente a la divisa estadounidense.
En el 2013, el capital contable del banco central mexicano, fue negativo en 175 mil 200 millones de pesos. Para el 2014, por la depreciación del peso frente al dólar en cuarto trimestre de ese año el capital contable de Banxico pasó a números positivos al quedar en 71 mil 698 millones de pesos y con ello el capital del Banco de México se situó en 8 mil 603 millones de pesos y le permitió hacer una reserva de capital de 31 mil 646 millones de pesos.
El restante del capital por 31 mil millones de pesos se entregó en abril del año pasado a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, como parte del remanente, de operaciones.
Banco de México ganó el año pasado 400 mil millones de pesos debido a la depreciación del peso frente al dólar, y las continuas subastas de la moneda estadounidense que realizó la banca central en un intento por frenar la volatilidad cambiaria.
Los remanentes que entregará Banco de México a la Secretaria de Hacienda el próximo primero de abril, después de descontar las reservas de capital, podrían ser del orden de los 300 mil millones de pesos.
El pasado mes de octubre la Cámara de Diputados aprobó que los remanentes de operación de Banxico se destinen el 70 por ciento al pago de deuda del gobierno federal y el 30 por ciento restante irá a parar al Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios.
Los ingresos petroleros son importantes para la conformación del presupuesto de ingresos y egresos del sector público, son también significativos para la estabilidad del tipo de cambio y los precios, es también un factor principal en la conformación de las reservas internacionales y para los remanentes del Banco de México, pero estos ingresos de la venta de crudo en el exterior, no son casi usados en la modernización de Pemex, ni tampoco se usan mucho para la inversión para el desarrollo de nuevos proyectos de la empresa productiva del Estado, por el contrario se le recortó el presupuesto para este año en 100 mil millones de pesos.
Las grandes empresas privadas del país, también se ven beneficiadas por los ingresos por la venta de crudo en el mercado internacional por parte de Petróleos Mexicanos, ya que estos grandes corporativos, son los que pueden adquirir grandes cantidades de dólares a un tipo de cambio preferencial de las subastas de la moneda estadounidense, realizadas por el Banco de México.
Los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, tuvieron la suerte de tener ingresos petroleros más altos de la historia del país y por eso pudieron tener un mejor control del tipo de cambio y control de la inflación, pero el número de mexicanos con niveles de pobreza aumentó sobre todo en la administración pasada.
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