domingo, 28 de marzo de 2010

Trascendió

Que corrió fuerte la versión de que el gobierno de Nuevo León anunciaría ayer un golpe espectacular contra el hampa.

Pero concluyó el día y nada.

Que tal vez por eso, los funcionarios de ese gobierno, encabezados por Rodrigo Medina, saldrán a manifestarse hoy en el Parque Fundidora sin grandes esperanzas.

Eso sí, la manifestación tuvo ya la dudosa virtud de unir al PAN, la izquierda y los empresarios en una misma demanda: el priista gobernador Medina tiene que hacer una limpia a fondo de su equipo de seguridad.

¿Cambiará el gobernador esa percepción y recuperará la tranquilidad de los ciudadanos con una demostración de músculo esta mañana?

Que el gobierno de Nuevo León parece tener tantas dudas sobre esta manifestación contra la violencia que anoche ni siquiera la promovía en el portal oficial de internet.

En cambio, el del PRI neoleonés destacó toda la tarde y noche la arenga del presidente estatal, Miguel Ángel Lozano, quien no tiene ninguna duda: “Aquellos que no vayan el domingo a la marcha están apoyando a los narcotraficantes, a los grupos criminales”.

¡Sopas!

Que el PAN no piensa dejar un solo asunto pendiente en su misión de ganar el gobierno de Oaxaca. Otra demostración de ello es que, en reemplazo del flamante subsecretario de Gobernación, Roberto Gil, quien hacía las veces de delegado especial en la entidad para los comicios de julio, llega el diputado Javier Corral.

El polémico Corral conoce bien la maquinaria electoral priista, a la que enfrentó en 2004, cuando fue candidato al gobierno de Chihuahua. Pese a mil problemas y el poco apoyo del comité nacional, levantó 41% de los votos.

En Oaxaca será rudos contra rudos.

Que apenas termine la Semana Santa, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación dará otra estocada a la Secretaría de Educación Pública.

El secretario general del sindicato, Rafael Ochoa, está por concluir un diagnóstico de los avances e incumplimientos de la Alianza por la Calidad de la Educación, a dos años de haberse firmado.

Y todo indica que el documento marcará muchas más promesas que hechos.

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