Juan Pablo Mendoza Una pregunta don Pedro Miguel, ¿y fueron los sefaradís los que le exigieron la disculpa a los españoles? Si no lo hicieron, esa es la pequeña diferencia...
Pedro Miguel Supongo que lo hicieron exactamente en la misma forma en que lo hizo AMLO: por medio de una carta privada, con la diferencia de que la del segundo fue filtrada por un medio español y uno mexicano. En todo caso eso es irrelevante. Lo sustancial es que la admisión de responsabilidades históricas por parte de los estados permite redimensionar vínculos bilaterales, resolver viejos rencores y poner el pasado en una perspectiva correcta.
Los españoles de hoy necesitan de esa petición de perdón para comprenderse a sí mismos, sus orígenes, su tremendo conflicto con la modernidad democrática y hasta su enmarañada relación con el País Vasco y Cataluña; los mexicanos, para disipar esas fobias que llevan a muchos a decir que los españoles "nos" conquistaron o cuán chingones "éramos" antes de que llegaran al actual territorio de México.
Los españoles de hoy necesitan de esa petición de perdón para comprenderse a sí mismos, sus orígenes, su tremendo conflicto con la modernidad democrática y hasta su enmarañada relación con el País Vasco y Cataluña; los mexicanos, para disipar esas fobias que llevan a muchos a decir que los españoles "nos" conquistaron o cuán chingones "éramos" antes de que llegaran al actual territorio de México.
Juan Pablo Mendoza De acuerdo en la mayor parte de su planteamiento, sólo que a mí me parece que la comprensión del ser español como del ser criollo mexicano no requieren de una petición de perdón, sino e un proceso de introyección y una revisión de acontecimientos históricos autocrítica. Siendo mexicano como el pulque, me parece desmedida la petición por los siguientes factores: 1. el tiempo -México y España han forjado una profunda amistad en los 70 últimos años); 2. la adjudicación de responsabilidades (hoy España tiene una monarquía borbona y el reino de Castlla y Aragón ha desaparecido), y 3. el reconocimiento del papel de otras naciones originarias en el proceso de conquista, imposible sin la participación de tlaxcaltecas, puhrépechas y otros pueblos mesoamericanos. No puedo admitir que 600 soldados hayan logrado someter a una ciudad de más de 150 mil habitantes que, además, era el imperio más poderoso de esta parte del mundo en aquellos años. A mí parecer, los tenochcas sucumbieron ante la rebelión de las naciones tributarias, partícipes también del genocidio que se achaca únicamente a la fuerza de la corona de Castilla y Aragón. Agradezco su gentil respuesta y espero que algo le aporten mis percepciones sobre el asunto. Le mando un respetuoso saludo
Pedro Miguel La Conquista no se limitó a la toma y devastación de Tenochtitlan; abarcó varias décadas,, terminó revirtiéndose en contra de los que en un principio se aliaron al ejército invasor y se desarrolló en todo el territorio de lo que hoy es México, e incluso más allá. No fueron los tlaxcaltecas ni los purépechas los que destruyeron cultural, idomática, religiosa, nutricional, económica y hasta físicamente a las sociedades mesoamericanas. Esa tarea de destrucción fue una labor sistemática ejecutada desde y por la corona española, encabezada por un señor que se nombraba a sí mismo "rey de España" y cuyo escudo heráldico tenía ya los mismos elementos que el del Estado español actual (sólo faltaba Navarra). El actual soberano se llama "VI" porque le antecedieron otros Felipes, tanto Austrias como Borbones, en el trono de España y la segunda de esas familias estuvo en el poder el último siglo de la Colonia, en el cual se cometieron no pocas atrocidades en la Nueva España. Durante las dos primeras décadas de la república independiente el Estado español porfió en sus intentos de reconquista. En suma: las canalladas fueron cometidas por los poderes políticos y religiosos de algo que se llamaba y se sigue llamando España y su continuidad histórica contrasta con la tremenda ruptura causada por ese país entre Mesoamérica (o el Anáhuac, si quieres) y México. Hasta la fecha muchos en España se enorgullecen de la empresa genocida y la demanda de perdón (a los pueblos llamados "originarios", no al Estado mexicano) les habría servido enormemente para superar su frustración imperial y reconciliarse con su propio pasado. Pero pues allá cada quien: perdieron la oportunidad.
Juan Pablo Mendoza Pedro Miguel Mil gracias por atender mis inquietudes, excelente respuesta que suscribo en todos sus términos. Pase un muy buen día y reitero mi agradecimiento por su fina atención
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