Con los mismos datos, “no se lo digan a AMLO”, hubo crecimiento y no recesión
Después de un arranque de administración muy difícil, la economía terminó creciendo. En materia de seguridad las cosas también mejoraron.
En El Financiero, en su columna Fuera de la Caja, Macario Schettino dice:
Se publicó la estimación oportuna del PIB, y arrojó una contracción durante el último trimestre del año pasado de -0.3%, que resulta en un decrecimiento de la economía durante todo 2019 de -0.1%. Ya todos los que nos dedicamos a estos números pensábamos que sería negativo, pero me parece que la mayoría esperaba una caída ligeramente mayor, digamos de -0.2%.
Parecería que no hay gran diferencia en esa décima, pero como el único dato que faltaba para estimar el año completo es el mes de diciembre, lo que ocurrió en ese mes sí se modifica mucho. Si al final la caída en el Índice Global de Actividad Económica durante 2019 fuese de -0.1%, como ocurrió con el PIB oportuno, esto implicaría un crecimiento en diciembre de 1% en la economía.
Parecería que no hay gran diferencia en esa décima, pero como el único dato que faltaba para estimar el año completo es el mes de diciembre, lo que ocurrió en ese mes sí se modifica mucho. Si al final la caída en el Índice Global de Actividad Económica durante 2019 fuese de -0.1%, como ocurrió con el PIB oportuno, esto implicaría un crecimiento en diciembre de 1% en la economía.
En El Economista, en su columna Caja Fuerte, Luis Miguel González dice:
Para los que necesitan encontrar la forma de ver el vaso medio lleno, esta Caja Fuerte les tiene un premio por llegar al final: existe la posibilidad de hablar del PIB en dólares. Una caída de 0.1% se convierte en un alza de 3.8%, porque el tipo de cambio del peso frente al dólar se apreció 3.9% en el 2019. Aunque usted no lo crea, el PIB de México creció en el 2019, si se mide en dólares. Por favor, no se lo digan a AMLO.
En El Financiero, en su columna Coordenadas, Enrique Quintana dice:
Desde hace algunos días, diversos expertos e instituciones financieras habían ajustado sus pronósticos respecto al resultado de la economía en 2019 a una caída de entre 0.2 y 0.3 por ciento. Así que el hecho de que el resultado sea de una caída más leve, implica que las cosas no fueron tan malas como se anticipaba.
lo más importante es que si se observa la dinámica de la economía desde el mes de julio del año pasado, puede notarse que en los últimos meses de 2019 el PIB ya no cayó, como en la primera mitad del año, sino que se mantuvo estable. Eso no es una opinión de quien esto escribe, sino un hecho.
Si esto ocurrió a pesar de que vivimos un periodo de gran incertidumbre y falta de definiciones, derivado del arranque del gobierno, de los cambios profundos en la operación que está haciendo esta administración, y de la incertidumbre que existía respecto al futuro del Tratado México, Estados Unidos, Canadá; si a pesar de todo la economía no cayó, quiere decir que las cosas no resultaron tan mal como parecían.
lo más importante es que si se observa la dinámica de la economía desde el mes de julio del año pasado, puede notarse que en los últimos meses de 2019 el PIB ya no cayó, como en la primera mitad del año, sino que se mantuvo estable. Eso no es una opinión de quien esto escribe, sino un hecho.
Si esto ocurrió a pesar de que vivimos un periodo de gran incertidumbre y falta de definiciones, derivado del arranque del gobierno, de los cambios profundos en la operación que está haciendo esta administración, y de la incertidumbre que existía respecto al futuro del Tratado México, Estados Unidos, Canadá; si a pesar de todo la economía no cayó, quiere decir que las cosas no resultaron tan mal como parecían.
Los “otros datos” resultan ser los mismos datos
Con las estadísticas de crecimiento sucede lo mismo que con los datos de inseguridad y violencia —esto es, que a pesar de que 2019 resulta ser el año en que se han registrado más muertes producto de la criminalidad en México, al mismo tiempo se detuvo la TASA de aceleración de ese fenómeno, por así llamarla.
INEGI publicó apenas que, comparado a 2018, la economía en 2019 se contrajo en un 0.1%, particularmente atribuible al comportamiento correspondiente al primer semestre de la administración actual. Pero lo que en esta ocasión, incluso columnistas en general críticos del régimen, como Macario Schettino o Enrique Quintana, diagnostican que la economía al final de 2019 en realidad creció. El dato negativo para todo el año tiene que ver con lo ocurrido en los primeros meses, pero la situación mejoró notablemente al final.
Resulta, entonces, que mientras que el gobierno anuncia las buenas nuevas, que sí las hay, los detractores de la 4T hablan de que AMLO siempre inventa otras cifras.
En realidad, los datos de Andrés Manuel y los del INEGI son los mismos. Después de un arranque de administración muy difícil, la economía terminó creciendo. En materia de seguridad las cosas también mejoraron.
Es decir, hay elementos para concluir que la lectura general de la economía y del combate a la inseguridad son alentadoras.