Si hoy se encuentran Duncan y Loret en Washington, celebrarán la mala noticia del no crecimiento como si fuera un imposible gol de chilena de Messi
Quién pompó
quién pompó
quién pompó vestidito
quién pompó
quién pompó
quién pompó vestidito
quién pompó
Ayer hice un comentario sobre el nuevo medio de comunicación, el de Carlos Loret de Mola, en Estados Unidos, en el que participarán —además del mencionado columnista de El Universal y ex estrella de la TV informativa— periodistas conocidos por haber participado muchos años en la televisión abierta mexicana como Brozo, humorista político; Luis García, especializado en futbol, y Galilea Montijo, experta en chismes de la farándula.
Como todos ellos y ella cobran bastante —lo valen, sin duda: la TV les hizo famosos y por lo mismo garantizan cierto nivel de audiencia en cualquier medio en el que colaboren—, pero sobre todo porque el proyecto se hará con costos estadunidenses, muchas personas me preguntaban quién pompó, es decir, quién financia la empresa que, como todas, tendrá que esperar el paso de mucho tiempo antes de generar ingresos suficientes para pagar la operación, si es que algún día lo consigue.
Periodistas profesionales, que además están lanzando su compañía envueltos en la bandera de la transparencia y la honestidad noticiosa, Loret y amigos (y amiga) deberían informar con toda claridad el origen de los recursos que les patrocinan. No lo han hecho, por lo tanto permiten que se especule al respecto.
Dado que claramente se trata de un proyecto informativo que surge como una especie de oposición a López Obrador, me atreví ayer mismo a especular que no podía descartarse la participación entre los socios de políticos enemigos de Andrés Manuel, como Felipe Calderón.
Alguien me dijo que quizá convendría voltear a ver a analistas que, lo quieran o no, llegan a parecer voceros de empresarios, nacionales y estadounidenses, afectados por decisiones de la 4T. En este sentido se me sugirió prestar atención a un gringo —o británico o canadiense, para el caso da igual— que se siente mexicano, al menos azteca —su cuenta de Twitter, @AztecDuncan, no deja dudas al respecto—, el señor Duncan Wood, director del Instituto México del Wilson Center.
@AztecDuncan, en algunas conferencias recientes, ha sido bastante injusto con México nada más porque la nueva política energética no se ajusta a sus convicciones derechistas o, tal vez, a los intereses de empresas con las que por alguna razón coincide o simpatiza.
No creo que Duncan Wood financie a Loret, Brozo, García y Galilea, pero si logra sembrar terror en inversionistas para que no inviertan en México si no cambia el rumbo del gobierno de López Obrador, algo que sin duda sirve para que le sobren patrocinadores a un nuevo medio diseñado como arma de ataque contra la 4T.
El ITAM, por desgracia, aparece cada vez que se habla de rivales de AMLO. El señor Wood durante más de 15 años fue profesor de esa universidad mexicana, en la que por cierto el líder periodístico de la nueva empresa cursó la carrera de economía.
El ITAM no los hizo, pero ellos, de una u otra manera, ahora se juntan para ir contra el gobierno de México desde Estados Unidos. Es comprensible que lo hagan, detestan a la izquierda, inclusive a una tan moderada como la de Andrés Manuel.
Ellos y otros ya lograron desalentar inversionistas y el crecimiento no se dio en nuestro país. Aunque nada tiene que ver con el bienestar de la mayoría, el crecimiento es importante. No lo hubo en 2019. De hecho, la actividad económica cayo un poco. Si este jueves se encuentran @AztecDuncan y @CarlosLoret en Washington, celebrarán la mala noticia como si fuera un imposible gol de chilena de Messi en el Bernabéu.
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