La cuestión Héctor es que me parece, obvio que como todos me puedo equivocar, que la lectura que debemos darle a la columna de “The Economist”, es como “un jaloncito de orejas a Peña”; es como si le estuvieran diciendo: “No cometas más estupideces porque pones en riesgo las reformas con las cuales nos apropiaremos de los recursos de México, y el partido de López Obrador puede llegar al poder y echarnos para atrás nuestros (malévolos) planes”.

Y como bien das a entender, los enemigos no sólo de López Obrador, sino los enemigos de México están dentro de nuestro país, no sólo fuera. Ahí tenemos a Krauze, que queriendo aparentar una intelectualidad imparcial, muestra que él está a favor de que los grandes capitales sigan dominando a México. O tenemos también a @FedericoArreola que aprovecha cualquier cosa para denostar a López Obrador y a MORENA, y favorecer al gobierno peñista (e.g. en su última columna que es, en parte, una respuesta a esta columna).

Y tienes razón, se le ha hecho mucho daño a México, y uno de los principales daños, creo, es por manipular a su gente para que vote con ignorancia y miedo, no con el razonamiento y el conocimiento de la realidad.