Diálogo con el asesino
Platicaba con mi amiga Fernanda Campa recomendándole la lectura de un libro de esos que te cambia la vida.: "Negro como yo" de John H. Griffin. Pasamos a comentar la situación del país y me planteaba que la CNTE se sentó a negociar con Osorio Chong sin siquiera cuestionar la masacre de los 11 asesinados en Oaxaca.
Me explico, Fernanda me recordó que la Policía Federal responsable de haber asesinado a 11 mexicanos en Oaxaca depende de la Secretaría de Gobernación cuyo titular es Osorio Chong, justamente.
Fernanda tiene razón, el responsable directo de la masacre es ahora el negociador del gobierno y ni siquiera se le cuestiona su papel de represor. Apenas unos días antes de la masacre el propio Osorio Chong declaraba que no había diálogo posible con la CNTE.
Aurelio Nuño ha quedado como lo que es: un fascista, represor, cobarde e inútil. Como he insistido, Nuño salió de la nada y a la nada volverá. Carga justamente con la responsabilidad de la masacre pero políticamente la responsabilidad directa es de Osorio Chong pues como ya lo mencioné, de él depende la Policía Federal.
Antes de la nueva reunión de diálogo del próximo lunes, Osorio Chong está obligado a dar a conocer quien dio la instrucción de disparar contra un pueblo desarmado. ¿Fue él quien dio la instrucción? ¿Fue otro funcionario quien tomó la decisión? ¿Consultó al titular de la Secretaría de Gobernación el funcionario la decisión asesina, si es que Osorio Chong no la tomó? ¿Cómo ha procedido administrativa y penalmente contra el responsable de la decisión asesina, Osorio Chong?
Esas y otras preguntas deben ser respondidas de manera pública por quién es responsable político de la Policía Federal y por lo tanto, responsable de la masacre perpetrada en Oaxaca hace unos días. Además es el responsable de la política interna del país.
Sostengo que el responsable principal de la masacre se llama Enrique Peña Nieto, pero no hay ninguna duda que el responsable inmediato es Miguel Angel Osorio Chong. Se da por sentada la salida de Aurelio Nuño, pero quien debería irse es todo el gobierno de esa pandilla de canallas que encabeza Peña Nieto. Y lo mínimo que debería pasar es que Nuño y Osorio Chong fueran removidos de su cargo. Nuño no es el malo y Osorio Chong no es el bueno, los dos son la misma cara de la misma moneda de represión, racismo, clasicismo, miseria y brutalidad que se impulsa desde el gobierno contra el pueblo de México.
Por ello insisto en una salida no violenta convocando a la jornada: " 6 de julio: un día de acción para cambiar a la nación". La acción consiste en no ir a trabajar, no ir a la escuela, no ir de compras, no ver de televisión un día. Eso abriría el camino para lograr en muy corto plazo la renuncia de Enrique Peña Nieto y de la pandilla de canallas que desgobiernan con él al país.
"El pueblo tiene derecho a vivir y ser feliz"
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