martes, 2 de agosto de 2016

Mandan de gira a Ochoa para abrir camino a Videgaray

lun 01 ago 2016 12:44
 
  
 
Enrique Ochoa Reza
Enrique Ochoa Reza
Foto propiedad de: Internet
Mientras Peña Nieto da vuelo a la hilacha al exuberante jet presidencial que le hizo favor de adquirir su compinche Calderón Hinojosa, ladrón de la silla presidencial 2006, para que lo gozaran él y su séquito en grande, corre por las redes sociales el “descubrimiento” de que el PRI y el PAN son lo mismo. El post se refiere a la relación familiar cercanísima entre Virginia, la esposa del secretario de hacienda Luis Videgaray y la posible candidata del PAN a la presidencia 2018, Margarita Zavala, mujer del mequetrefe ex presidente espurio mencionado arriba.
Ay señores, qué rápido se olvidan las abundantes comparsas tertulias y mezcolanzas que se avientan los políticos de ambos bandos como el reciente caso de los primitos simulando contienda a la gubernatura de Veracruz. Las innumerables situaciones que han evidenciado la amalgama de profundas amistades tratos y contubernios de hombres y mujeres pertenecientes a estos dos partidos políticos. Cómo olvidar que Fernández de Ceballos de siempre ha compartido animadas veladas y complicidades políticas con su íntimo amigo Salinas de Gortari.
El PRI el PAN el PRD y demás partidos menores son exactamente lo mismo. Pertenecen todos al sistema corrupto establecido por los cotos de poder en el país. Por la mafia del poder, como la bautizó Andrés Manuel, que se niega a irse. A quien advierto más vale no recurra al juego de arrejuntarse con ningún partidillo que se dice de “izquierda” si pretende tener algún chance de llegar esta vez. Pues son como el muérdago, la plaga que se va enredando en los troncos sanos con su aparente fresca fronda brillante presumiendo sus exuberantes flores color naranja antes de matar al roble o al encino dejándolos secos e inertes.
Y sí, Videgaray, será el alfil salinista 2018, por ello mandaron al cuerno al estorboso de Beltrones colocando en su lugar al pupilo de Pedro Aspe, el grisáceo Enrique Ochoa, para mandarlo de gira nacional como presidente electo del PRIAN --- de la partidocracia establecida— para comenzar la simulación masiva de que “ahora sí son todos impolutos, honestos y harán pagar a los corruptos”. Todo, para abrirle el camino al seriecito, al “erudito” secretario de hacienda, que nos aseguró no subiría más la gasolina, y que como condición le montaron al incapaz Peña Nieto.
Los salinistas al acecho, porque no piensan permitir que nadie les arranque el caramelo que es nuestro México y que han chupado con harta ansia desde las cúpulas tanto el PRI como el PAN a punto de acabar con él.
Ninguna “alternancia” se pretende en el 2018. A la Margarita la usarán de pantalla. Y Andrés Manuel, que se cuide muy bien, porque la consigna es no dejarlo ser.
Ante esta problemática repetitiva que ya cansa, lo único que faltará por ver es, qué hará ahora la pobre gente a ras de suelo, qué opinarán los olvidados, los engañados, los vejados de sus derechos básicos, los agredidos, los abusados por estas mafias de embusteros, de ladrones, de matones, que se niegan a ceder el poder.

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