sábado, 6 de mayo de 2017

COLUMNAS

Sobre derechos de homosexuales y mujeres en el Estado de México…

vie 05 may 2017 17:30
 
  
 
Desafortunada declaración fue la de Alfredo del Mazo contra la despenalización del aborto y los matrimonios gays.
Desafortunada declaración fue la de Alfredo del Mazo contra la despenalización del aborto y los matrimonios gays.
Foto propiedad de: Internet


Comparto este breve comentario al observar la foto del candidato priista Alfredo Del Mazo por sus andares de campaña luciendo en evento el clásico colorido collar de flores de papel, su cenizo estilo impecable, brilla su crema hidratante en la cara luego de la rasurada. Ignoro si cumple con los atributos para considerarlo lo que llaman metro sexual, pero creo no, porque le falta atuendo ajustado y también músculo. Pero por ser niño bonito no es figura que desprenda notable testosterona. En el occidente hay muchos señoritos tapatíos del tipo, con esa relamida mochería, con esa frívola pulcritud del hombre religioso y cumplidor, con frecuencia provenido de aulas de colegios fundados por el Padre Maciel, quienes por mandato de su “santísima virgen” se oponen a la despenalización del aborto y se manifiestan en contra de los matrimonios de personas homosexuales. Ignoro si sea el caso del candidato del PRI, pero esta es su mentalidad sin duda.
Y vieran cómo se conoce de ejemplares por acá, catoliquísimos casados y con hartos hijos, aparentemente inmaculados pero que son “gays de closet”, una doblez que sí es una bribonada mayor o dicho en su idioma un gran “pecado mortal”.   
Desafortunada declaración fue la de Alfredo del Mazo contra la despenalización del aborto y los matrimonios gays. Porque debió haber resaltado si así lo fuere—y no lo hizo-- que se trataba de una cuestión de creencia personal, pero que en caso de ser elegido gobernador la gente decidiría para de ahí partir a concebir leyes que se ajusten a los deseos mayoritarios. Solito se echó la soga al cuello al declararse en contra de sus derechos como seres humanos, que por cierto llevan tiempo reclamando en su estado las mujeres y las personas homosexuales. Ojo, los humanos somos personas ante todo y eso nos iguala lo queramos o no.
Por otro lado, es inhumano ir en contra de la vida, ningún ser saludable podría pensar así.  Pero inhumano y aberrante también es, encarcelar a una mujer que con zozobra seguramente, toma una decisión privada sobre su propio cuerpo y decide abortar.  
Impedir que una pareja de seres humanos independientemente de su género puedan unirse legalmente, es simplemente impráctico hoy día porque existen las personas homosexuales naturalmente reclamando derecho a espacio igualitario asunto mucho más allá del bien o del mal, o de estar de acuerdo o no con la homosexualidad ¿por qué impedir que obtengan el mismo derecho a contraer lazos legales—matrimonio-- como lo hacen las personas heterosexuales?
Veremos qué tan avanzado y progresista es el electorado del Estado de México. En este mismo rubro nos gustaría escuchar a las demás candidaturas. Pero en cuestión de Derechos Humanos, tal actitud ultra conservadora, sin duda movilizará la decisión de ese abundante segmento afectado.    

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