Por Federico Arreola
Refrán chino

Porque me llamó poderosamente la atención, reproduzco lo que ayer miércoles dijo Pensativo en el espacio de comentarios de los lectores del SDP:

“El mejor negocio es aquel que llega a todas las clases sociales, pero los mejores de todos son los que obtienen los favores de las clases populares, pues sin ser ricos y vivir al día, siempre pagan de contado, son muchos, y los negocios que atienden sus necesidades de consumo se vuelven tremendamente ricos, ejemplos: Bimbo, tianguis, mercados públicos, tiendas que ofrecen mercancías en abonos. Ellos sí la saben hacer, cuando que al final las clases populares terminan en muchísimas ocasiones gastando más que las clases económicamente boyantes.

“El populacho, como vulgarmente se refieren algunos, es la clase que encumbra y enriquece, pues sin tener el poder adquisitivo son millones, por eso atenderlos resulta sin lugar a dudas una rentabilísima operación. Junco y muchos medios más creyeron que siempre iban a ser beneficiados por las elites, sin embargo se dieron de topes contra la pared, pues les jugaron el dedo en la boca y sólo han recibido migajas, y todo, pero todo el descredito a su función pues carecen de equilibrio en sus notas, equilibrio de ideas y solo se han cerrado a informar en conveniencia de los grupos de poder, que al final son los menos y que representan en ingreso tan solo el .02 por ciento de la población consumista, en pocas palabras, ellos solos se han cerrado las puertas. ‘Siéntate en el quicio de tu puerta a esperar y veras el cadáver de tu enemigo pasar’ (refrán chino)”.