Por Polimnia Romana Sierra
Comentaristas a modo

No conforme con declarar que ella no veía por ningún lado las irregularidades cometidas en las elecciones de 2006, y haber avalado con sus comentarios frívolos el fraude electoral, Denisse Merker el martes dijo algo digno de análisis. Desde luego que antes lamentó la muerte del hombre íntegro que fue Don Carlos Abascal, y elogió su poder de negociación – habría que preguntarles a Flavio Sosa y a los pobladores de Atenco sobre esa actitud negociadora –, después se atrevió a decir que Fox y López Obrador son los culpables de la división entre los mexicanos, por sus enfrentamientos irresponsables.
¡Sí!, eso dijo. En primer lugar, no se pueden comparar en nada, absolutamente en nada, Fox y Andrés Manuel López Obrador, no sólo por su postura ideológica sino por su integridad moral. O sea que la guerra sucia del PAN y de los personajes más siniestros de la política, ayudados por la elite empresarial, no tuvieron vela en el entierro. Pero fue más lejos, celebró que el presidente espurio declarara que no intervendrá en las campañas electorales, casi casi lo puso de ejemplo a seguir.
Ninguna de las mentiras de Calderón han sido cuestionadas por esta “dama”, que conserva un programa en radio y televisión de cable en los mejores horarios, a diferencia de nuestra querida Carmen Aristegui que fue silenciada ni más ni menos que por el cuñadito de Calderón.
Con estos comentaristas, ya ni qué decir de López Dóriga y Beteta, la derecha cree estar blindada contra la verdad. Pero no es así. La proliferación de medios alternativos y la cruda realidad se encargan de poner a cada quien en su lugar. Si no, pregúntenle al pueblo. ¿Verdad que no se atreven