domingo, 29 de septiembre de 2013

Presentimientos de la Nación




DESFILADERO

Jaime Avilés




Todo insinúa que Chepo de la Torre fue tan sólo un títere en la estrategia mediática del gobierno para la privatización de Pemex. Durante meses, a ciencia y paciencia de Televisa, el director técnico de la llamada selección “nacional” perdió sistemáticamente cada uno de los partidos que eran importantes para que el equipo “mexicano” entrara al mundial de futbol Brasil 2014.   

Después de cada derrota, mientras algunos de los analistas más agudos de la prensa nativa –Juan Villoro a la cabeza de todos ellos-- desatendían asuntos de mucho mayor relieve para explicarnos los errores tácticos defensivos y ofensivos de la escuadra “azteca”, un clamor estremecía al país: “¡Fuera Chepo!”

Pero Emilio Azcárraga –ese personaje de tragedia isabelina que se le fue vivo a Fabrizio Mejía en Nación TV-- sonreía inconmovible con la sangre fría de un tahúr cada que sus voceros reconfirmaban  al Chepo, una y otra vez, como timonel del barco al garete.  

“¡Nooo! ¡No puede ser! ¡Qué está pasando!”, se decían entonces, y se arrancaban los pelos, legiones de hombres y mujeres con los cachetes pintados de verde, blanco y rojo, llorando ante la pantalla chica después del nuevo fracaso.

Quienes nos alegrábamos por este motivo desde la orilla opuesta de la misma estupidez inducida, tampoco sabíamos que también nos estaban manipulando. Y es que todo estuvo desde el principio fríamente calculado para hundir en la depresión a millones de televidentes y en el último minuto devolverles la esperanza. Es cosa de comparar calendarios.

En el emotivo mitin que presidió el domingo pasado en la principal avenida del DF, Andrés Manuel López Obrador dio a conocer un documento interno que circula entre la clase política y precisa que la “reforma energética”,esto es, la privatización de Pemex, se consumará el martes 15 de octubre. Pero, adivinen qué...

El viernes 11 de octubre, “México” jugará contra “Panamá” ¡Síii! ¡Cuatro días antes! Ya si “perdemos” ese partido, podremos “olvidarnos” de Brasil. Oye, pero si “ganamos”, volverán a abrirse, aunque sea poquito, las puertas del Cielo y de la Gloria. 

Aún “tendremos” oportunidad de soñar con la Copa del Mundo, de poner muy en alto el nombre de México, de gritar con orgullo en Maracaná: “¡México, creo en ti, porque tu nombre se escribe con M que tiene algo de W invertida!”. 

 Si “vencemos” al equipo de Panamá –un coloso entre colosos-- “necesitaremos” batir a otro gigante centroamericano, creo que Belice, y si “conseguimos” tan tremenda hazaña, entonces “iremos” a la repesca, a medirnos con Nueva Zelanda. Es decir, después de perder todos los juegos que Televisa ordenó perder al Chepo de la Torre, ahora “estamos” obligados a ganar, sí o sí, los tres que “nos” separan de Brasil 14. 

 En otras palabras, mientras venden Pemex, “viviremos” con el alma colgada de un hilo, devorados por la angustia, la incertidumbre y el pánico de quedar fuera del Mundial. ¡Purísima madre! ¡Qué tortura! 

¿Cómo se darán las cosas, al mismo tiempo, en el calendario paralelo? De mañana en ocho, esto es, el domingo 6 de octubre –cinco días antes del México-Panamá, y nueve antes del madruguete legislativo--, habrá una nueva manifestación en Paseo de la Reforma, y la apuesta de López Obrador es que haya gente, consciente e informada, desde el Auditorio Nacional hasta el Zócalo. Así lo dijo el domingo pasado.

Esa misma tarde, sólo dos horas después del mitin, Andrés Manuel se reunió con los coordinadores de Morena en todos los estados del país, para afinar la estrategia. Al día siguiente inició una gira por todo el Distrito Federal, y en su primer acto, allá por Iztapalapa, no reunió a más de 20 personas, pero anoche, sumando y sumando, terminó en Benito Juárez hablando ante una multitud. 

Un grupo de intelectuales y activistas procedentes de Guadalajara, se reunió el mismo domingo pasado por la tarde, en un café cercano al Monumento a la Revolución donde siguen acampados los maestros, y se puso a analizar los resultados de un pequeño ejercicio, vamos a llamarlo así, “demoscópico”.

Esa mañana, antes del mitin, los integrantes de ese colectivo sin nombre repartieron lápices y papeles entre las personas arremolinadas en torno de la glorieta de Colón, y les pidieron que escribieran sus “piensos”, extraña palabra que en Jalisco equivale a pensamientos. ¿Qué debemos hacer para evitar la privatización de Pemex y sacar adelante al país?

De un total de 478 papeletas recogidas, 55 hombres y 33 mujeres se animaron a firmarlas con su nombre, dirección y lugar de procedencia, una fue suscrita con los apellidos de una familia, otra con los nombres de una pareja, otra por un brasileño y las demás tuvieron que ser atribuidas al autor más prolífico de todos los tiempos, o sea, a Anónimo.

El brasileño escribió: “O povo deve ter o poder sempre!!! (El pueblo debe tener el poder siempre)”. La propuesta del más radical de los anónimos fue un delirio de principio a fin: “Si se ocupara la ciudad de México entera, con todo el contingente posible, de manera pacífica pero recurriendo barricadas (sic) para tratar de atraer a los medios internacionales y los ojos del mundo, principalmente atraer la atención de rusia (sic) y pedir apoyo para una rebelión y pedir a la ONU una zona de exclusión aérea para defender la ciudad”. 

¿Así o más claro? Estadísticamente, la propuesta más reiterada fue “paro nacional” o “huelga general”, pero las papeletas identificadas con ella no llegaron al 5 por ciento de las opiniones recogidas. Otro anónimo escribió: “No ir a trabajar y tocar el claxon todo el día”. 

 Muchos recomendaron la unidad de todas las fuerzas opositoras al régimen y el combate a la corrupción dentro de Pemex. Algunos dieron consejos explícitos en materia de tecnología, otros se pronunciaron a favor de la inversión, la educación, la creación de empleos y la multiplicación de refinerías.

Otras papeletas contenían vivas a la CNTE, saludos al “licenciado López Obrador” y exigencias locales para resolver problemas en municipios de Tabasco, Oaxaca, Puebla, Veracruz, Chiapas, Tlaxcala,Morelos, Edomex, Jalisco, Nayarit, Sinaloa y por supuesto en el estado de Monterrey. 

El tema de la unidad, al menos en las ramas del árbol de las apariencias, dio ayer un fruto aún muy verde: con apoyo del SME y militantes de otros sindicatos, así como de miembros del PRD cercanos a Cuauhtémoc Cárdenas pero no a los chuchos, y también del PT y de la dirigencia de Morena, surgió el Frente Nacional para el Rescate de la Nación.

Veremos qué aporta en materia de peticiones con nombre, apellidos y datos de la credencial de elector, que deberán ser depositados el 6 de octubre en las urnas que habrá a lo largo del Paseo de la Reforma. Según el ex consejero del IFE, Jaime Cárdenas Gracia, para que la demanda de consulta nacional sobre el futuro de Pemex sea atendida tiene que contar con el respaldo de un millón 650 mil firmas.

Que la selección tricolor de Televisa estará en el mundial de Brasil 14, después de una manipulación mediática tan atrabiliaria e insultante como las que día a día efectúan Laura Bozzo y Cristina Sánchez Azuara, en sus melodramas con muertos de hambre alquilados... 

Que a pesar de todas sus protestas los maestros no revertirán la reforma laboral que los dejará sin empleo. 

Que incluso gravando con IVA el alpiste de los canarios, las escuelas de los niños, las rentas de las viviendas y las velas y flores que haya en los velorios de los suicidas, Hacienda no logrará reunir los 52 mil millones de dólares que necesita chuparnos para cubrir el hoyo que dejará de percibir Pemex cuando lo privaticen.

Que sin tomar en cuenta a los cientos de miles que seamos en las calles, ni a los millones que se opondrán de otras formas en todo el país, de todos modos venderán Pemex y provocarán un desastre económico, hundirán el peso, vaciarán las arcas públicas y nos aplastarán con una dictadura militar porque no les quedará otra salida. 

Tales son, por desgracia, los terribles presentimientos de la nación, pues como decía el gran Fontanarrosa, “el principal derivado del petróleo es la guerra”. Dicho lo cual, cedo la palabra a Juan Villoro para que nos ilumine acerca de la alineación que a su leal saber y entender deberá utilizar Vucetich contra los panameños...

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