Un aleccionamiento sobre liderazgo
He leído un magnífico texto sobre liderazgo en la página web de la revista Harvard Business Reviewque se titula en inglés: Great Leadership Isn’t About You. Un artículo que me ha llevado a la reflexión sobre mi actuar como persona, como profesionista y finalmente como ciudadano.
Antes de señalar los puntos claves del citado texto y de hacer una opinión al respecto, platicaré brevemente una de mis primeras experiencias en la industria como Continuous Improvement Team Leader –conocido como líder de equipo y mejora continua-, posición encargada –sobre todo en la industria automotriz- de liderar pequeños proyectos de mejora continua con diferentes equipos de trabajo dentro de una planta manufacturera.
En aquella novata experiencia y ya fuera del sector automotriz, tuve la oportunidad de liderar un proyecto en el que consistía mejorar los tiempos de cambios de producción en unas máquinas llamadas rotativas –utilizadas para la impresión a gran escala-, en donde se me asignó de forma deliberada –por lo que supe ya hasta después- una tripulación de operadores “conflictivos” que manejaban una de las 6 rotativas utilizadas para la impresión de tirajes diversos que requerían nuestros clientes. En el grupo que me tocó liderar se encontraba el líder sindical, así como algunos de sus miembros del comité. Se me asignó dicho grupo como reto inherente al proyecto por la enorme resistencia al cambio a la que me iba a enfrentar; si lo superaba, estaría hecho el 50% del trabajo para replicarse en muchas más líneas de producción, el cual así fue. ¿Cuál fue la clave? Escuchar primero las necesidades, molestias, opiniones, críticas y hasta chismes de manera respetuosa y atenta con cada uno de los involucrados; después, fui poniendo cada una de esas inquietudes dentro del mismo proyecto, de manera que la metodología SMED –por sus siglas en inglés Single Minute Exchange Die- no solo me ayudara a reducir los largos tiempos de preparación y cambios de tirajes, sino que también me sirviera como una herramienta para mejorar su calidad de trabajo con un menor esfuerzo y una alta autoestima personal por lograr hacer el mismo trabajo de una mejor manera, e imprimiéndole una calidad mayor a su trabajo.
La analogía más simple que utilicé fue que ellos se sintieran dentro de una gran carrera automovilística, en donde cada vez que se requiriera un cambio en el tiraje a producir, el paro significara como cuando entra un monoplaza a los “pits stop” para realizar una parada técnica en el cambio de neumáticos y mantenimiento, y que pensaran que la rotativa era su bólido, y la carrera significaba llegar a la meta en el menor tiempo posible, cuidando su integridad física, y realizando un recorrido perfecta, es decir, haciendo el trabajo con calidad.
El gran texto Great Leadership Isn’t About You que se traduciría algo así como: “El gran líder que no eres”, me hizo recordar aquellas enseñanzas que aprendí:
- Escuchar atentamente y con respecto a la gente, dejando que participen opinando, y agregando en la medida de lo posible sus ideas aportadas.
- Mostrar y actuar con desinterés como líder del proyecto en utilizar el éxito del grupo como un instrumento de autopromoción.
- Hacer preguntas inteligentes sin obviar nada, más vale ser un gran ignorante un minuto, que el resto de tu vida. Y como dice Einstein: “Yo solo soy una apasionado curioso”.
- Dejar a un lado el protagonismo como instrumento para recibir el reconocimiento de los demás y del grupo.
Concluyo este texto de la misma forma que lo hace John Michel, el cual cito en español:
“La necesidad de volver a imaginar y reestructurar nuestra forma de pensar sobre el liderazgo como nunca antes mayormente ha sido. Y dice el autor: muchos de nosotros hemos permitido que nuestra comprensión del liderazgo crezca paralizada ante tantos grandes problemas que nos enfrentamos en nuestra sociedad hoy día. Ahora es el momento de descubrir el líder que todos llevamos dentro. Ahora es el momento de aceptar ese liderazgo que tiene la intención de ser más verbo que sustantivo, más activo que pasivo”.
El Apunte
No hay nada más emocionante y gratificante que mover emociones e inspirar a más gente a que alcance sus metas, objetivos y sueños. Es algo que puede llegar a ser muy complicado y frustrante a la vez.
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