martes, 11 de junio de 2013

Trascendió Nacional

:Que a diferencia de lo que ocurre con los ex funcionarios tabasqueños, los días de intranquilidad para el ex director de Operaciones de la Comisión Federal de Electricidad, Néstor Félix Moreno, parecen haber terminado.
Ayer se le vio muy tranquilo desayunando en el restaurante El Bajío, en la plaza Reforma 222, que está frente al edificio de la PGR.
Gracias a un amparo, Moreno enfrenta en libertad el proceso penal en su contra, por el delito de enriquecimiento ilícito por más de 33 millones de pesos.
:Que en la oficina de la comisionada para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, Nuvia Mayorga, parece que no tienen prisa para responder sobre los planes de remodelación de sus oficinas, que incluyen sillas de 36 mil pesos y libreros de 127 mil, como lo dio a conocer MILENIO.
Quizá por su cercanía con el titular de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, de quien fue secretaria de Finanzas en el gobierno de Hidalgo, consideran que no es necesario explicar esos gastos suntuarios en una de las dependencias encargadas de atender a los pobres entre los pobres.
:Que “lo hice porque era mi último recurso”, dijo Ana María Orozco a la pregunta de por qué ventiló desde la cárcel su pleito con el padre de sus dos hijos, el ex presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Genaro Góngora.
“Era lo último que tenía en mente”, agregó Orozco. “Mi intención fue siempre llegar a un acuerdo sin hacerlo público, pero el miedo a quedarme en prisión fue lo que me impulsó a hacerlo”.
Parece que ya logró el acuerdo, por lo que el caso saldría de los medios.
:Que en Los Pinos se confirmó la decisión de que, para no calentar más el ambiente político, el presidente Enrique Peña Nieto no asistirá a las plazas que tendrán elecciones el 1 de julio.
Las giras programadas para esta semana en Tamaulipas y Oaxaca quedaron pospuestas para después de los comicios.
:Que, a pesar de los trancazos, la cortesía aún priva en el Pacto por México.
En la firma de la ley de telecomunicaciones, los ánimos se pusieron tensos cuando el líder perredista, Jesús Zambrano, criticó a los gobernadores y a los empresarios. Pero al término del evento, mandatarios como el veracruzano Javier Duarte y los de Tamaulipas, Egidio Torre, y Quintana Roo, Roberto Borge, pasaron a despedirse de Zambrano.
Muy educados, todos ellos se estrecharon la mano y apapacharon un poco.

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