El Gobierno de Enrique Peña Nieto "es cómplice del asesinato" de Ayotzinapa, sostuvo Epigmenio Ibarra, productor y periodista mexicano, en el programa de RT 'Entrevista'. "Es cómplice de la masacre, porque les dio tiempo a los asesinos", argumenta Ibarra.
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"La violencia en México no tiene medida. La crueldad de los asesinos es brutal. La apatía, la indiferencia del Gobierno espeor todavía. ¿Qué hizo Peña Nieto el día cuando le avisaron que habían desaparecido 43 estudiantes? Nada. Sabiendo que las primeras horas en el caso de una desaparición forzada, más en México, más en Guerrero, son cruciales, Peña Nieto se cruzó de brazos12 días", destacó Ibarra.
En México, la línea entre la política y el delito se borró
Fue "el poder del dinero" lo que llevó al actual jefe de Estado a la silla presidencial, insistió el periodista, que acentuó que es la corrupción lo que está en el fondo de los problemas del país. "En México, la línea entre la política y el delito se borró. Estado y crimen organizado son las dos caras de una misma moneda. La corrupción es un crimen de los más violentos, no solamente porque roban el dinero público, sino porque establece un comportamiento criminal, […] porque de la violencia se nutre el narco, porque la impunidad ha prevalecido", puntualizó.
Nos tenían apendejados frente a la tele
Sin embargo, Ibarra espera que pronto la situación cambie. "Hoy quien nos gobierna se atenía a una sola regla: borrar las huellas del crimen. […] Nos tenían apendejados, adormecidos frente a la televisión sin considerar que la suma de eventos iba a producir esta indignación transformada en rabia. Ayotzinapa esla gota que rebalsa la copa", destacó. Para él, los 43 normalistas "son maestros" que han enseñado un camino a toda la nación. Está seguro de que se establecerán precedentes, y que a partir de ahora quien aspire a gobernar el país tendrá que regirse "por reglas distintas".
"Las puertas del Palacio Nacional se van a abrir con la presión de millones en la calle. […] Tenemos que hacer un esfuerzo consistente para que la gente continúe en la calle exigiendo justicia, señalando a los culpables de la corrupción que es violencia extrema y exigiendo destitución y el juicio a Peña Nieto. Si no hacemos eso, lo que nos quede es la violencia", concluyó Peña Nieto.
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