sábado, 22 de abril de 2017

Con #Duarte, el #PRIAN la tiene fácil para mandar a AMLO a las 2 chingadas

@NietzscheAristosáb 22 abr 2017 11:56
 
  
 
 Presenten pruebas de que López Obrador recibió dinero de Duarte -todos queremos verlas- y el tabasqueño se irá de inmediato a las 2 chingadas.
Presenten pruebas de que López Obrador recibió dinero de Duarte -todos queremos verlas- y el tabasqueño se irá de inmediato a las 2 chingadas.
Foto propiedad de: Internet
Causa cuando menos fastidio (ya que la indignación no funciona en México) leer y escuchar a los comentaristas sobre el caso de la detención de Javier Duarte y el plan del PRI y el PAN (PRIAN) para involucrar a López Obrador y Morena con el ex gobernador de Veracruz, caído en supuesta desgracia ahora que ha sido atrapado en condiciones que se prestan cuando menos a la suspicacia.
Y fastidian las dos partes, los que ven un complot contra AMLO y los que, malintencionados, interesados, dan por hecho un acuerdo entre el líder de Morena y el ex gobernador para beneficiar a este partido en el proceso electoral de Veracruz en 2016, y para entregar dinero incluso a López Obrador. Los primeros, por no “ir al grano”; los segundos por comportarse de manera cucurbitácea.
Los políticos del lodo, la cobardía y la calumnia están en lo suyo. Ochoa, Anaya, Vázquez, Del Mazo, Yunes,… De ellos no se puede esperar más que deyecciones contra el opositor. (Y aunque Peña ya ha hablado sobre el chile que desea, sorprende que no lo haya hecho aún el ahora calladito Calderón; acaso sea por lo que pudiera venir sobre su involucramiento en la corrupción del caso Odebrecht, acaso porque por vez primera le puedan las fotos y videos en los que él y su esposa aparecen con Duarte, acaso por las floridas palabras que les dedicó el veracruzano, acaso por algún intríngulis). Pero, los periodistas y opinadores ¿por qué siguen la misma línea del “sospechosismo” cuando todo es tan claro?
Claro y simple: Cuando en prian-gordillista Yunes Linares acusó sin pruebas a López Obrador de haber recibido dinero de Duarte (como reacción airada a la denuncia del político opositor sobre los intentos de Yunes de prolongar en sus hijos su influencia política en Veracruz), la respuesta fue contundente:
“Es cosa nada más de que él demuestre que Duarte me dio dinero y yo renuncio a la política. Me retiro de la política si Yunes demuestra que Duarte me dio dinero. Les adelanto que nunca vi a Duarte, no lo conozco”.
Y agregó:
“Pero como yo estoy diciendo que renuncio a la política, si Yunes demuestra que Duarte me dio dinero, así le pido al señor Yunes Linares que si no es cierto, que él deje la gubernatura de Veracruz, que deje el poder que ostenta porque no le está haciendo ningún bien al pueblo de Veracruz y sólo le recuerdo que no somos iguales, no somos lo mismo. A mí me pueden llamar Peje, pero no soy lagarto.” (video colocado en su cuenta de Facebook el 22-02-17).
Más contundente, más simple no puede ser.
Y por si fuera poco, el propio Duarte, en entrevista con El Universal, negó de manera categórica haber apoyado a Morena:
- ¿Usted fortaleció a MORENA, intentó fortalecer a MORENA para bajarle votos a Yunes?
- No, no y te lo respondo de manera categórica, no.
- ¿No hubo una intentona de subir a Cuitláhuac y darle?...
- No lo conozco.
- A través de sus operadores generar esta burbuja para luchar el 5 de junio…
- No, non, en latín.
Más incisiva no podía ser la intención de la pregunta; más contundente no podía ser la respuesta.
La cita es un fragmento de la entrevista del 08-08-16 vuelta a citar en una nota del 18-04-17, que añade: “Duarte entonces no se sentía abandonado por el PRI, ni por… Peña Nieto”. Ahí queda esta frase, por lo que se pueda especular. Por si a Duarte se le “ocurre” cambiar de versión.
Acaso en algo tenga razón Federico Arreola, la perversidad de Yunes Linares, su cualidad de político desvergonzado logró sembrar una duda que los medios y los periodistas a modo han sabido explotar para perjudicar a Morena y su líder. Y este se ha visto en la necesidad de explicar algo que no existió.
Parece que se trata de una ecuación. De ver a cuántos puede embaucar la duda convertida en desparramada regurgitación por el PRIAN. Porque no solamente no hay pruebas (existe un audio en que graban a Gabriel Deantes, exsecretario del Trabajo y Previsión Social, y que Yunes presentó como prueba del supuesto pacto; no prueba nada, está editado y Deantes ha declarado: “es absurdo que se me vincule en supuestas negociaciones con Morena”; SDPnoticias, 27-02-17), también hay un reto muy firme y claro que puede extenderse a todos los que acusan: presenten las pruebas y López Obrador renuncia. (Y esto lo debiera de decir cada vez que aborde el tema otro grupo de periodistas, el de los “objetivos”, no sólo señalar el posible complot y que se esperan las declaraciones acusadoras de Duarte, sean reales o inducidas).
Y si las presentaran, todos exigirían la abdicación política inmediata de López Obrador. Pero que sean pruebas, no chingaderas.
Qué más fácil lo quieren el PRIAN y los periodistas hijos de las trepadoras. No hay mucho que especular; para qué tanto escándalo: Presenten pruebas de que López Obrador recibió dinero de Duarte -todos queremos verlas- y el tabasqueño se irá de inmediato a las 2 chingadas. La chingada, chingada, y La Chingada. El lugar de origen, desgracia y consuelo para los mexicanos, y al rancho de Palenque; que, por otro lado, parece paradisiaco (a menos que tenga departamentos en Miami, Nueva York o Europa, como los del PRIAN).

P.d. Lo cierto es que actualmente gobierna, como los analistas políticos expertos han establecido, un sistema de complicidad tácita que se protege entre sí, que no combate la corrupción ni la impunidad sino que vive un aquelarre de simulaciones para poder continuar el gozo de sus carnavales de oro; de hedonismo onanista, finito y vulgar.

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