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Y la calumnia, ¿de dónde viene?; @hdemauleon y las amenazas de muerte

Empieza el año para Morena y López Obrador con normalidad; la normalidad de que sigue de puntero hacia el 2018 y no encuentran todavía cómo bajarlo.
Foto propiedad de: Internet
“Las amenazas vinieron de Morena”; acusa Héctor de Mauleón. Una cosa es responsabilizar a un individuo, muy otra, responsabilizar a terceros y a una colectividad con base en la responsabilidad del primero; sobre todo, sin pruebas. Inicia apenas la cronología de 2017 y es inaugurada con ¿un ataque, una calumnia, una inocentada? del columnista de El Universal contra Morena y López Obrador. El rastreo de unas amenazas de muerte virtuales recibidas en twitter, le llevó a él y a la “policía cibernética” del gobierno de la ciudad a una cuenta que, ojo, no generó, sino que retuiteó y comentó algunas de ellas. Y resulta que esa cuenta pertenece a José Castrejón Aguilar, un militante de Morena desde septiembre de 2012, sostiene el periodista. En el rastreo personal del padrón del partido registrado ante el INE y actualizado en diciembre de 2016, no he encontrado el nombre en cuestión. Es decir, hay que indagar la veracidad del dato ofrecido por De Mauleón; el propio partido tiene la obligación de aclarar el asunto.
¿Y por qué ataque, calumnia o inocentada? Porque, independientemente de que se trate de un militante o no, desde el título de su texto, De Mauleón responsabiliza a Morena de los comentarios y retuiteos salidos de la cuenta rastreada. Y bien pudiera ser correcta la argumentación del periodista en torno a la persona y por supuesto que tiene que investigarse y aplicarse la ley si así procede. Eso es claro. Pero lo cierto es que el título y el relato de las amenazas al periodista, en el contexto de críticas vertidas a la organización y su líder, conducen a concluir que Morena y López Obrador están detrás del contenido de los tuits que ni siquiera generó el supuesto militante: “Las amenazas vinieron de Morena”, proclama de manera escandalosa De Mauleón; “La cuenta fue uno de los ejes torales de las amenazas recibidas” (El Universal; 02-01-17).
Y a darse gusto los tragones. El toque de inicio para los ataques y los odios contra López Obrador en 2017. Algo común y ordinario; sólo se trata de encontrar siempre alguna excusa para ello, algún dato, alguna información distorsionada. Como consecuencia, se leen de inmediato los cargados comentarios de los bots, los malaleches, los odiadores gratuitos y profesionales y también de los incautos. No es novedad. Ahora, estos dirán que Morena amenaza la vida de periodistas.
Esto tiene, como bien plantea Federico Arreola, el tinte de una calumnia y de una irresponsabilidad periodística. ¿Intencional, planeada o solamente producto del temor justificado del periodista? Porque una cosa es encontrar responsables y otra responsabilizar a todo un partido y de paso a su presidente por una acción individual. También es claro que no se trata de desdeñar las reprobables amenazas a De Mauleón, pero éste tiene que ubicarse ante los datos que tiene; que no le gane su antipatía o su preferencia política.
Quienes conocen el perfil y la trayectoria de López Obrador, la característica de sus simpatizantes, el historial pacifista de sus manifestaciones de todo orden -que también han preservado como principio en el nuevo partido-, saben que esta conducta de un militante de Morena sería absolutamente atípica (si es que se confirmara la militancia del individuo en cuestión). Entonces, ¿cómo suponer que Morena estaría detrás de las amenazas?
Empieza el año para Morena y López Obrador con normalidad; la normalidad de que sigue de puntero hacia el 2018 y no encuentran todavía cómo bajarlo.
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