El IFE pretendió justificar la impunidad que le dio a Enrique Peña Nieto al dictaminar que no incurrió en publicidad encubierta en Televisa y Radio Fórmula alegando que los hechos por los cuales se le acusa ocurrieron antes de la reforma constitucional de 2007 y, por lo tanto, el IFE no podría aplicar la ley de modo retroactivo.
Por medio de un comunicado, el IFE justificó además la impunidad para Peña Nieto alegando que la queja era en realidad una reiteración de otras quejas que ya habían sido conocidas y desahogadas por el IFE y por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
"La coalición (Movimiento Progresista) pretendía re-discutir asuntos que ya son cosa juzgada, algunos de los cuales, incluso, el IFE sancionó en su oportunidad", dijo el IFE.
Justificó también la aparición de Peña Nieto en un programa de espectáculos alegando que cada medio puede decidir entrevistar a las personas que considere relevantes y que sólo se transmitió una vez y no de manera reiterada.
No explicó, no obstante, cómo era relevante que un programa de espectáculos entrevistara a un gobernador, pero sí alegó que otros candidatos de otros partidos aparecieron en programas similares.
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