jueves, 29 de agosto de 2013

Todos contra los maestros
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Todos contra los maestros

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Enrique Legorreta/@enriquelego3_0

(27 de agosto, 2013).- La aprobación de la Reforma Educativa en diciembre de 2012 se llevó a cabo de forma rápida y sin tomar en cuenta a los principales involucrados en el tema: los maestros.
Esta situación tuvo sus repercusiones con manifestaciones en contra de la iniciativa -a principios de año- por parte de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), quienes no fueron escuchados por las autoridades y, ahora, realizan un cambio de estrategia para que sean escuchados. Esta situación ha afectado a la Ciudad de México, ya que como la capital del país concentra a los tres Poderes de la Unión.
Ante estos hechos, los políticos han externado su opinión al respecto. En algunos casos ha proliferado la idea de que tanto las autoridades federales como las de la ciudad deberían implementar la fuerza pública que garantice la estabilidad de un estado de derecho.
Unos de los principales opositores a las movilizaciones de los maestros de la CNTE ha sido el partido en el gobierno, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que a través de su presidente nacional, Cesar Camacho Quiroz, declaró que la fuerza pública debía de ser empleada para controlar la situación
“Si ellos [los profesores] son los que tensan las cosas y si este ambiente descriptivo se mantiene, pondrán al gobierno del Distrito Federal, primero, en una posición difícil y al gobierno federal después, para tomar medidas de otra naturaleza. Es una medida extrema, pero en un país democrático, cuando se observan los protocolos y los códigos no sólo de la ley nacional, sino los instrumentos internacionales establecen, ésta pudiera ser una opción si es que la irracionalidad impera”.
Esta situación fue respaldada por el encargado de la seguridad interna, el secretario de gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien tras una semana de protestas de la CNTE declaró en la reunión plenaria de los senadores del PRI que, de seguir afectando a los ciudadanos, habría respuesta.
“No es advertencia, pero si las protestas y manifestaciones de los maestros disidentes afectan o lastiman a terceros, se aplicará el Estado de derecho”.
Aunque uno de las principales señalados por la situación de “descontrol” en la ciudad ha sido el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, las críticas hacia la CNTE y al gobierno Federal son las más utilizadas por el Partido Acción Nacional (PAN), quien en voz de su coordinador de los diputados, Alberto Villareal, ha señalado que es la responsabilidad de Enrique Peña Nieto resolver esta situación y que se debe de ejercer mano dura a los maestros.
“Lo que hay es un gobierno que no puede con la responsabilidad. Dónde quedó ese PRI que durante 12 años se dedicó a decir que ellos eran los políticos del oficio. Pues miren nada más. En la historia moderna del Congreso de la Unión, nunca se había visto que las dos cámaras tuvieran que evacuar las sedes que les corresponden y buscar una sede alterna para seguir con los trabajos legislativos. Yo vuelvo a elevar el reclamo y la exigencia al Gobierno de la República a que haga cumplir la ley, a que les dé garantías a los ciudadanos”.
Aunque la izquierda ha sido la principal propulsora del debate y diálogo con la coordinadora, y que el líder del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano, señaló que el gobierno del DF actúa con responsabilidad al no usar la fuerza pública,  recientemente ha insinuado que el afectar a terceros ya es un acto que no se debe de tolerar en una ciudad de libertades, replicando el discurso de sus “aliados” en el Pacto por México.
“En efecto, se está trastocando la vida de una ciudad de libertades. No comparto las formas de lucha que está impulsando la CNTE ni creo que les ayude a ellos para ganar simpatías, ni creo que genere condiciones para que podamos encontrar las mejores salidas posibles y por supuesto que comparto las molestias de la gente que nos desenvolvemos en la Ciudad de México en donde han dislocado el funcionamiento normal”.
Movimiento Ciudadano ha respaldado el accionar de los maestros, ya que no han sido estos tomados en cuenta y no fueron escuchados en su momento para el análisis de la Reforma Educativa, así fue señalado por el diputado Ricardo Monreal.
“Es un error que minimicen a la coordinadora, que el gobierno minimice a los maestros. Esto que está pasando es por la campaña mediática que se ha ejercido en contra de los maestros, la satanización que están siendo parte por otros sectores políticos, sería un error que el gobierno juegue con esta situación”.
Aunque se ha apuntado a Andrés Manuel López Obrador como uno de los personajes que ha orquestado la situación de las marchas y plantones de la CNTE, éste ha sido claro con lo que está ocurriendo y llamó a Peña Nieto a que asuma la responsabilidad de sus causas, exhortando al gobierno federal a agotar todas las posibilidades de diálogo y no ejercer la represión ante las demandas de la CNTE.
“Se debe de agotar todo, si dicen que ya no hay posibilidades de diálogo hay que seguir hablando, no usar la fuerza bruta para resolver los problemas, eso no resuelve nada, y prueba de ello son los sucesos que se han registrado en el país cada vez que hay represión y violencia. La fuerza nunca es opción”.
Con esto, los maestros de la CNTE se enfrentan a un escenario donde los actores políticos, en su mayoría, han legitimado el uso de la fuerza bruta a través del discurso. Con una oposición contundente a su movimiento, los profesores continúan los bloqueos para hacerse visibles y encontrar una solución a su problema. Está en manos de las autoridades encontrarle una solución pacífica, mediante el diálogo, al problema magisterial.

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