miércoles, 26 de septiembre de 2012


Peña dará continuidad a la estúpida Guerra POLIMNIA ROMANA @polimniaromana mar 25 de septiembre de 2012 Desde Washington, el presidente del empleo y de los 90 mil muertos, de una guerra que nadie pidió, aseguró a los vecinos del norte que el próximo presidente de México, su hoy amigo Peña Nieto, continuará la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado de la misma manera que él lo hizo, o sea golpeando el avispero, porque, según su corta visión, no existe otra alternativa. Desde luego que no aclaró dónde y cuándo se puso de acuerdo con el nuevo PRI para continuar semejante aberración. Entre los grandes logros de su estúpida estrategia de "seguridad" no mencionó el diagnóstico de los centros penitenciarios del país que ayer mismo dio a conocer la CNDH. En el 60 % de esos centros existen autogobiernos y cogobiernos liderados por integrantes del crimen organizado que tienen el control de la seguridad interna, así como de las actividades y servicios que se dan en estos centros de reclusión. En pocas palabras: vivimos una crisis penitenciaria además de la económica, la política, la social, etc., etc. El ombudsman nacional, Raúl Plascencia Villanueva, sostuvo en su informe que en los años recientes han empeorado las condiciones de los centros penitenciarios federales, estatales y municipales, y expuso que de 2010 a la fecha se tiene el registro de 14 fugas, con un saldo de 521 PRESOS EVADIDOS, y en el mismo lapso hubo 75 riñas que dejaron 352 muertos, y dos motines que causaron dos decesos y 32 lesionados. Entre el cúmulo de irregularidades detectadas en los centros de reclusión, el ombudsman nacional enumeró las siguientes: -no existen áreas de separación entre hombres y mujeres -las sanciones y correctivos las aplican los propios internos -hay torturas y se aísla a los presos -priva el hacinamiento -el control de las autoridades es escaso -existe venta de mariguana y otras drogas, bebidas alcohólicas, armas (cuchillos), teléfonos celulares, tarjetas telefónicas, chips, pedazos de varilla afilados, bates de beisbol e incluso gallos de pelea -son deficientes los servicios de salud y no hay medicamentos -no se ha previsto una efectiva separación entre procesados y sentenciados -no hay programas ocupacionales ni se permite una cabal rehabilitación, entre muchas otras irregularidades. ¿De verdad no hay otra alternativa para combatir la descomposición social, la inseguridad y la violencia? Claro que sí pero a estos bárbaros no les interesa mejorar las condiciones de vida y educación de la población. Lo único que han hecho, y seguirán haciendo, es profundizar las causas de la violencia. No es sólo con medidas coercitivas que se va a recuperar la paz en el país, al contrario, esto sólo está convirtiéndose en un círculo vicioso que nos está alcanzando a todos.

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