domingo, 30 de octubre de 2011

La trampa de Lula-- VÍCTOR HERNÁNDEZ

Desde algún tiempo me ha llamado la atención la insistencia de Luiz Inácio Lula da Silva en que Pemex se “asocie” con Petrobras. Insiste tanto en lo mismo que hasta sospechoso me empezó a parecer. Máxime porque ahora no lo hace como presidente, sino como indivíduo que cobra por lo que hace y dice.

Vamos:

1. Petrobras no vive de la exportación de petróleo. Vive principalmente de la venta de gasolina en Brasil y de la venta de tecnología.

2. Pemex vive de la exportación de petróleo, el cual tiene en abundancia en territorio mexicano.

3. La producción de petróleo de Pemex es más rentable para México que la producción de petróleo de Petrobras para Brasil, ya que mientras que Pemex le da el 100% de sus ingresos al erario Mexicano, Petrobras, al ser 36% privada, sólo le da el 64% de sus ingresos al erario brasileño.

4. De asociarse con Petrobras, Pemex tendría que ceder el 50% de sus ingresos petroleros a Petrobras—que a su vez le daría parte de esos ingresos a privados. Si el petróleo se produjera en Brasil, no sería algo distinto a lo que Brasil ya está acostumbrado (perder renta petrolera). Pero si la producción se hiciera en México, sería ganancia neta para Petrobras y pérdida neta para México.

Esto claramente perjudicaría a México y beneficiaría a Brasil. Es por eso que Lula está tan necio en insistir en que Pemex se “asocie” con Petrobras—al grado de abogar por los empresarios en su última visita a México.

Ahora bien, a menos de que Lula sepa que Brasil se va a acabar el petróleo que tiene en muy poco tiempo, y necesite petróleo barato de otros paises para seguir manteniendo a Petrobras, no tiene ningún sentido que esté tan necio en que México pierda dinero para beneficiar a Brasil. Su insistencia, por lo tanto, de plano me parece una trampa.

La única manera en la que Pemex se podría beneficiar de una alianza con Petrobras sería produciendo petróleo en otros paises. Pero como la tendencia internacional es la autosuficiencia energética—es decir, a rechazar a las trasnacionales—realmente no hay beneficio.

El que Lula le haya tendido esa trampa a México me parece de plano inmoral. Máxime cuando Lula sabe la rapacidad de las trasnacionales y lo podrido de los gobiernos del PAN y del PRI.

Por eso mejor AMLO y Martí 2012.

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PD: Y que conste. Yo no estoy usando nacionalismos para rechazar la alianza con Petrobras. Me limito estrictamente a los números desde un punto de vista comercial. A México no le conviene ceder su renta petrolera (que es del 100%) para beneficio de nadie. Cualquier pérdida del erario en renta petrolera tendría que recuperarse forzosamente subiendo impuestos a la clase media.

PD2: Por otro lado, Lula dice que no entiende cuál es el problema en confiar en los empresarios. Muy fácil: que en Brasil los empresarios sí pagan impuestos y pagan un salario mínimo que no es de hambre. En México no hacen ni lo uno ni lo otro. Lula sabe esto. El pretender no saberlo es lo que hace a su trampa aún más inmoral.

PD3: Evítense la defensa Chewbacca. Los principales factores que permitieron que Brasil aumentara su prosperidad económica tras la crisis de 2008 no fue el petróleo, sino el plan de Lula de reducirle impuestos a la clase media.

PD4: No se confundan. Que Lula hizo cosas buenas, eso que ni que. Pero la privatización de Petrobras no fue una de ellas ni fue algo bueno. Eso lo hizo su antecesor. Lula intentó renacionalizar Petrobras. No lo dejaron. De haberlo hecho, el beneficio económico para Brasil hubiera sido mayor.

PD5: Exxon reportó menor producción de petróleo durante el tercer trimestre. Para que vean que el que una empresa sea privada no garantiza que produzca más.

PD6: El SAT reporta que bajó la recaudación de impuestos no petroleros en el tercer trimestre debido a las devoluciones del IVA. Esta pérdida se tuvo que compensar parcialmente ¡con dinero de los ingresos petroleros! Lo cual demuestra lo que he estado diciendo: Si Pemex se privatiza, México pierde un ingreso que requiere. Y si pierde el ingreso petrolero, lo único que se puede hacer para compensarlo es subir el IVA, el ISR, la gasolina, la luz y poner más impuestos. Privatizar Pemex, por lo tanto, sería un tiro en el pie para México.

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