lunes, 25 de julio de 2016

Dos muertos más y dos policías federales heridos en emboscada
Matan a edil de Pungarabato pese a que denunció amenazas
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Sepelio del alcalde perredista de Pungarabato, Ambrosio Soto Duarte, y de su cuñado Omar Macedonio Mejía, realizado ayer en Ciudad Altamirano, en la región de la Tierra Caliente, GuerreroFoto Agencia API
Sergio Ocampo, Héctor Briseño y Ernesto Martínez
Corresponsales
Periódico La Jornada
Lunes 25 de julio de 2016, p. 32
El presidente municipal de Pungarabato, Guerrero, el perredista Ambrosio Soto, fue emboscado y asesinado a balazos la noche del sábado en el tramo que comunica la comunidad guerrerense de San Lucas con la tenencia de Riva Palacio, en Michoacán. En el ataque también perecieron su cuñado y una persona no identificada; además, dos policías federales resultaron lesionados.
Desde 2015, Soto denunció en tres ocasiones que la delincuencia organizada lo había amenazado.
Fuentes de la policía estatal guerrerense afirmaron que el sábado pasado, alrededor de las 22 horas, Soto regresaba de Huetamo, Michoacán, donde supervisó una refaccionaria de su propiedad, cuando pistoleros le cerraron el paso con dos vehículos cerca del paraje Las Curvas del Cajón, y le dispararon. Ahí perecieron el edil, su chofer y cuñado Omar Macedonio, y uno de los presuntos atacantes; dos policías federales que eran parte de su escolta resultaron lesionados.
Hace dos semanas, al terminar un acto encabezado por el gobernador Héctor Astudillo en Chilpancingo, Soto dijo que fue amenazado por criminales que días antes mataron a uno de sus primos y a su chofer. El pasado 8 de julio Soto escribió en su cuenta de Twitter: Mataron a mi primo. Estoy amenazado por la delincuencia organizada. Ya es hora de actuar, señor presidente EPN (Enrique Peña Nieto).
El gobernador Astudillo deslindó a su administración de la ejecución de Soto y sostuvo que las peticiones de seguridad de la víctima fueron atendidas siempre. Ayer, en conferencia de prensa en Casa Guerrero, lamentó el homicidio y cuestionó: Llama la atención que haya realizado el viaje en el que murió a sabiendas de que había sido reiteradamente amenazado, como él mismo lo señaló, por un grupo delictivo, y que dicho viaje lo hiciera en horas inconvenientes, en una zona de alta peligrosidad. Conviene reiterar que el homicidio se cometió en territorio de Michoacán.
Agregó que el alcalde recibió serias amenazas concretadas con el reciente homicidio de su chofer y familiar cercano Sebastián Soto.
Rechazó que no se le hubiera brindado protección y dijo que el 27 de octubre pasado en Pungarabato la Policía Federal desplegó una cantidad importante de elementos y equipos especiales de seguridad, que permanecen hasta la fecha.
Además, sostuvo que desde eneroSoto fue atendido con la protección de policías estatales, que solicitó, pero el día de los hechos él mismo pidió a la policía del estado mantenerse en Pungarabato para la protección de su familia, y salió a Huetamo, Michoacán, solamente con los efectivos de la Policía Federal.
La Secretaría de Gobernación lamentó el crimen. El senador perredista Armando Ríos Piter consideró que el homicidio es un hecho indignante y terrible. Acusó a la administración federal de no buscar a los delincuentes que amenazaron al edil y de no impedir que cumplieran sus amenazas.
La dirigencia nacional del PRD exigió al gobierno federal un protocolo especial de seguridad que incluya protección, incluso militar, a ediles que sufran amenazas y agresiones.
(Con información de Víctor Ballinas y José Antonio Román)

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