viernes, 31 de octubre de 2014

Ayotzinapa y la movilización de estudiantes hacen que se percate de que debe rendir cuentas
Sabe el gobierno que el despertar del país está próximo: politécnicos
Aún no hay respuesta real a nuestras demandas; luchamos por educación gratuita y de calidad, señalan
Foto
Juan Alfredo Hernández, Daniela Valderrábano y Héctor Hernández Mireles, tres de los estudiantes del IPN designados por sus compañeros para dialogar con las autoridades educativas, en entrevista con La JornadaFoto Marco Peláez
Arturo Sánchez Jiménez
 
Periódico La Jornada
Viernes 31 de octubre de 2014, p. 40
El despertar nacional está a la vuelta de la esquina, asegura Héctor Hernández Mireles, uno de los jóvenes escogidos para ser la voz del movimiento estudiantil del Instituto Politécnico Nacional (IPN) en la mesa de diálogo que esperan entablar pronto con el gobierno.
Con Ayotzinapa, el Politécnico y todas las universidades hermanas que se nos han unido, el gobierno se está percatando de que debe rendirnos cuentas y seguir una política que nos beneficie a todos; una prueba de ello se dará cuando responda satisfactoriamente a los puntos de nuestro pliego petitorio, afirma.
Junto con él están Daniela Valderrábano y Juan Alfredo Hernández, también escogidos por sus compañeros para la misma empresa. Ella tiene 16 años y estudia en la Vocacional 6; Héctor, de 19, cursa una licenciatura en la Escuela Nacional de Medicina y Homeopatía, y Juan Alfredo, a sus 28, ya está en el doctorado en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas.
Para los tres queda muy claro que el gobierno aún no da respuesta real a las demandas de los estudiantes del Politécnico. Sus respuestas van en el sentido de querer resolver la problemática del instituto. Sin embargo, nada hay firmado aún que pueda sustentar las soluciones propuestas. La base estudiantil, la Asamblea General Politécnica y nosotros, de la mesa de diálogo, no estamos de acuerdo en que sólo por un comunicado que se presenta a través de los medios de comunicación ellos planteen que ya hay resolución. Lo que pedimos son documentos firmados que podamos llevar a nuestra comunidad y, si ellos lo aprueban, reanudar la vida académica del instituto, asegura Juan Alfredo en entrevista realizada anoche en la Plaza Roja de Zacatenco.
Junto a la estatua de Cárdenas
Quizá no es casual el lugar que escogieron para el encuentro: a los pies de la estatua de Lázaro Cárdenas, creador del Politécno. Ahora es Daniela quien toma la palabra:Debemos recordar cómo surgieron estos proyectos. Las normales rurales y el IPN nacieron del pueblo y para el pueblo, para que éste mejore su calidad de vida, porque no por ser pobre mereces una educación pobre. (...) Desde niña he admirado el IPN, era lo máximo para mí. Como estudiante he visto su calidad, y que alguien, de un momento a otro venga y diga que van a cambiar sus planes de estudio, que su calidad ya no será la misma, me indigna.
Pero uno de los puntos que se les ha cuestionado es que el paro de labores en el Poli lleva más de un mes y el diálogo con el gobierno aún no empieza. Ayer justamente estaba previsto que comenzara, pero las autoridades no se presentaron porque el IPN no les pareció un lugar adecuado para la cita, entre otros argumentos.
“La sede no será obstáculo para sentarse a negociar con el gobierno federal, pero parece que sí lo es para la SEP, que había dicho que no pondría trabas para resolver el pliego petitorio, pero hoy se ha demostrado lo contrario.
Debemos recordar la historia; tan sólo por mencionar que Emilio Chuayffet (titular de la SEP) firmó los acuerdos de San Andrés como secretario de Gobernación, pero nunca cumplió, sostiene Juan Alfredo.
Para los jóvenes, en la coyuntura nacional de protestas estudiantiles el gobierno se está jugando su credibilidad y su responsabilidad hacia el pueblo. Nosotros los estudiantes nos estamos jugando que las generaciones venideras tengan una educación de calidad.
Creen que con el sistema político-económico actual, nada garantiza que en algunos años sigamos teniendo enseñanza gratuita y de calidad como la que actualmente ofrecen el IPN o la UNAM. El neoliberalismo ha privatizado todo y las reformas estructurales van a tocar a la educación gratuita, que es lo único que nos queda y por lo que estamos luchando, afirman.
Para el movimiento del IPN, el siguiente paso es el congreso nacional politécnico, cuya organización, aseguran, será totalmente incluyente.Juega un papel crucial para la resolución de algunas de nuestras demandas, principalmente la democratización, aseguran. Asimismo, consideran que por lo pronto el Presidente va a imponernos a un nuevo director, y será el último, pues el CNP se encargará de democratizar el IPN; por eso necesitamos que tenga peso jurídico y que no sea sólo un acto académico, y eso es justo lo que exigirán a las autoridades cuando se sienten a dialogar.

No hay comentarios: