El 23 de septiembre pasado Andrés Manuel López Obrador le dijo en un mitin a la dirigencia del PRD (controlada por Nueva Izquierda) que si insistían en hacer alianza con el PAN que mejor se quitaran la careta y se fueran al PAN.
Ayer, la senadora perredista por Tlaxcala, Minerva Hernández Ramos, quien era parte de la corriente Nueva Izquierda, le tomó la palabra a AMLO renunciando a la bancada del PRD y pasándose a la bancada del PAN a invitación del senador Gustavo Madero. Que porque ella sí apoya las alianzas.
Minerva Hernández fue candidata del PRD a la gobernatura de Tlaxcala en 2009, pero a la mera hora declinó a favor de la candidata del PAN, quien a su vez perdió contra el PRI debido a que el electorado perredista, molesto por lo que hizo el PRD, decidió apoyar al PRI a manera de voto de castigo al PRD por haberlos traicionado.
Es decir, Nueva Izquierda sirvió a dos amos: al PAN declinando a su favor, y al PRI dándoles votos de perredistas molestos con la alianza PAN-PRD.
Creo entonces que la renuncia de Hernández Ramos al PRD es perfectamente congruente con los principios de Nueva Izquierda de servir al mejor postor.
Creo también que si todos los integrantes de Nueva Izquierda en el PRD se van al PAN será lo mejor que le pueda pasar al PRD.
Primero porque en el PAN nadie votaría por ellos y no pasarían de tener algunos huesitos ni de medio pelo. Y segundo porque entonces los electores de izquierda en México ya no le tendrían asco al PRD y gustosos volverían a votar por ese partido.
Esperemos que el resto de los Chuchos panaderos se quiten la careta lo más pronto posible para que de esta manera el PRD vuelva a ser un partido opositor de izquierda, y no simplemente un partido palero del panismo-salinismo, como lo tienen los Chuchos.
Mi reconocimiento entonces para Minerva Hernández Ramos por ponerle el ejemplo al resto del chuchismo panadero. Si le van a hacer el trabajo sucio al PAN, pues que mejor se vayan a ese partido ¿no? Total. Ni que los fuera a juzgar el electorado de izquierda por ser congruentes con su vocación para venderse al que mejor pague (politicamente hablando, desde luego).
PD: Lo curioso del asunto es que los panistas ven a esa renuncia como una derrota para AMLO. ¿Cómo va a ser una derrota si eso fue lo que AMLO les dijo a los Chuchos que hicieran? En fin.
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