Tras de la debacle político-económica de los periodos presidenciales Ordaz-Echeverría, fue el presidente José López Portillo quien en 1977 hace ingresar a México a la Democracia formal, llamada en Occidente de forma genérica como “democracia liberal”, en la cual por primera vez en la historia del país se reconoce legalmente personalidad —existencia jurídica y derechos inalienables— a los Partidos políticos, dotándolos del carácter de “entidades de interés público”, con la llamada Ley Federal de Organizaciones Políticas y Procesos Electorales.
—¡Hablamos apenas de la existencia de 34 años de algo que puede llamarse “democracia formal” en el México moderno!
Nueve años más tarde surge el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, sólo para ser rápidamente reemplazado en 1990 con otro nuevo, que estuvo vigente hasta la reciente reforma electoral de 2007-2008.
Así vemos que la incipiente democracia mexicana ha estado caracterizada por la improvisación, la falta de principios duraderos y congruentes, cuando no se ha visto afectada por una deliberada intención desestabilizadora.
—Acusación que se substancia por el hecho de que “sólo en México” sucede que la Ley sea reformada a las puertas de una elección, como fue en abril de 1994 y mismo mes pero de 2006, introduciéndose “novísimas disposiciones” faltando sólo 2 meses para la celebración de elecciones
De entre todos los países del mundo, solamente en México se ha visto que el marco jurídico-electoral sea reformado hasta 7 veces en 4 años, con el Salinato. Maquinaria esta de “reformas” y chapuzas “a modo” para acomodar las cosas para la elección inmediata posterior
Y no con poca desazón ha aparecido el miércoles el pre-candidato presidencial de la Izquierda, Andrés Manuel López Obrador, en entrevista para MVS Noticias con Carmen Aristegui comentando cómo se confirma por parte del Consejo General del IFE —además incompleto hasta hoy, porque el PRI quiso meter a la hermana del director de “noticieros Televisa” Arely Gómez— que él como precandidato producto de un proceso de consenso de los partidos PRD, PT y Movimiento Ciudadano (antes Convergencia por la Democracia) no podrá aparecer en tiempos otorgados para radio y televisión por no haber ya más contendientes, habiendo declinado Marcelo Ebrard Casaubón, jefe del GDF, ya en su favor.
—¡Es hasta abril de 2012 cuando AMLO podrá aparecer por primera vez públicamente promoviendo entre la ciudadanía el voto por la Izquierda!
Por eso somos los ciudadanos a los que nos corresponde seguir promoviendo con nuestra voz y opinión, y sumando esfuerzos, el inaplazable Cambio verdadero para un país que desde los años 90 ha venido siendo arrasado por la inseguridad y violencia generalizadas, la corrupción política, y la censura y el control totalitario de medios electrónicos por parte de un Monopolio de asociados (Azcárraga y Salinas).
Entre más civilizado es un país, más libertades y derechos se reconocen para el común de los ciudadanos, y especialmente para la contribución a los procesos democráticos. Nuevamente nos encontramos que sólo México penaliza la existencia de liderazgos ciudadanos para la construcción de nuestro propio proceso político-electoral y de partidos, prohibiéndoles LO MÁS DEMOCRÁTICO SOBRE LA TIERRA como lo es el llamado al ejercicio de los propios derechos político-electorales de la ciudadanía.
—Solamente en México, insólitamente ya dentro del propio año electoral, está prohibido el llamado público al voto por parte del candidato abanderado por varios partidos políticos legalmente constituidos en el país, cuando en los países civilizados existe exactamente lo contrario
Conclusión es que en México aún nos encontramos lejos de la normalidad democrática en comparación con el concierto internacional, y la sombra de la dictadura ahora encarnada en una “partidocracia” sigue estando muy presente, pero como bien lo hizo López Obrador el día martes, ni siquiera invocando los derechos políticos fundamentales, sino el propio derecho humano A LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN constitucionalmente reconocido, todas y todos debemos luchar porque no se limite ni menos aún se penalice como ahora sucede, la libre conciencia y elección de ciudadanos de una República, producto de la primera Revolución social del siglo XX.
—Llamemos todos a votar por el Cambio verdadero en 2012 con el Movimiento Progresista
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