PORQUE SOMOS MEXICANOS.SI SEÑOR, CON COMPROMISO Y DIGNIDAD PARA CUMPLIR OBLIGACIONES Y EXIGIR DERECHOS COMO HOMBRES Y MUJERES LIBRES. (("No me preocupa el grito de los violentos, de los corruptos, de los deshonestos, de los sin ética. Lo que más me preocupa es el silencio de los buenos." Martin Luther King)) PASE USTED POR SU DERECHO A LA VERDAD!!!! BIENVENIDO!!!
jueves, 30 de abril de 2009
ABUSOS, ENGAÑO, IRRESPONSABILIDAD, EN TORNO A LA INFLUENZA.
México, D.F., 29 de abril (apro).- Los políticos, ya sean diputados en funciones o candidatos a legisladores o gobernadores fueron pillados abusando, mintiendo o actuando con ligereza en torno a la crisis sanitaria que padece el país. A continuación tres estampas de ello.
Caso Valdemar Gutiérrez, candidato a diputado federal por el PAN
Mexico, D.F..- La disidencia del sindicato de trabajadores del Seguro Social denunció que su secretario general nacional, Valdemar Gutiérrez Fragoso, ofrece a afiliados la aplicación de una "inexistente vacuna" contra la gripe porcina.
Con el fin de congraciarse con la base trabajadora luego que aceptara ser postulado por el Partido Acción Nacional (PAN) a una diputación federal de mayoría relativa, Gutiérrez Fragoso prometió el 25 de abril pasado que en "las próximas horas estarán vacunados contra la influenza porcina todos los trabajadores sindicalizados del IMSS", acusó la oposición en su órgano informativo Hoja Obrera.
En realidad, aclaró la disidencia, los trabajadores fueron vacunados por orden de la dirección del IMSS contra la influencia estacional, protección que hasta el momento no representa una cura o una medida de prevención frente al virus H1N1.
"Este fraudulento galeno y líder sindical desconoce la materia médica y de investigación, ignora que en el mercado aún no hay una vacuna contra la influenza porcina. Esta nueva mentira incrementa más su ignorancia y falsedad de preocuparse por los agremiados del sindicato", indicó la Asamblea Sindical del IMSS, que distribuye la Hoja Obrera.
Así mismo, indicó que la vacuna contra la influenza estacional no alcanzó para todos los empleados sindicalizados del IMSS y mucho menos para los derechohabientes.
"Este oscuro dirigente, detrás de ese gesto, escabulle su responsabilidad de exigir al patrón el cumplimiento de cubrir todo gasto por riesgos de trabajo. Estas son las partes que el patrón pretende modificar en su pliego petitorio y que Valdemar, el Comité Ejecutivo Nacional y los secretarios seccionales están por entregar en la próxima revisión salarial", señaló.
Rodrigo Medina, candidato a gobernador del PRI en Nuevo León
MONTERREY, N.L..- El candidato del PRI a la gubernatura de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, instaló en su comité de campaña maquinaria para elaborar cubrebocas y distribuirlos entre la población para evitar cualquier contagio por la influenza porcina.
Medina de la Cruz informó que el material y las 14 máquinas que serán usadas para confeccionar estos aditamentos de higiene, fueron aportados por un empresario local.
El candidato del PRI recorrió este miércoles las instalaciones de esta improvisada maquiladora ubicada en bulevar Díaz Ordaz 123, en la colonia Santa María, al poniente de Monterrey, donde operan 22 trabajadores en dos turnos.
Medina dijo que por cada turno se confeccionarán mil tapabocas, y explicó que abrió esta fábrica debido a la demanda creciente que ha provocado desabastecimiento de tapabocas en la localidad.
Por la mañana, Medina entregó a taxistas y operadores de autobuses más de 12 mil tapabocas y botes de gel antibacterial con su imagen.
Por su parte, el diputado local del PAN, el otorrinolaringólogo Ángel Valle de la O, consideró irresponsable la maquila de los tapabocas, pues, dijo, no cumple con la Norma Oficial Mexicana correspondiente y se desconocen las condiciones higiénicas en las que son elaborados, y pidió al gobernador Natividad González Parás impedir que el candidato de su partido reparta estos auxiliares sanitarios.
"No es posible que el gobernador y el secretario de Salud (Gilberto Montiel Amoroso) permitan que personas ajenas al gobierno tomen actitudes como las que toma Medina, porque es competencia exclusiva de la Secretaría de Salud y por ahí debe controlarse todo.
"Además, están haciendo una maquiladora de cubre bocas y no tenemos la certeza del control de calidad sanitario que deben cumplir o que estén cumpliendo en la Norma Oficial Mexicana. Por eso creo que es irresponsable, porque lucran con la salud", dijo.
Ector Jaime Ramírez, diputado federal del PAN
MÉXICO, D.F.- A pesar de la emergencia sanitaria, la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados se encuentra paralizada porque el presidente de dicha comisión, el panista Ector Jaime Ramírez Barba, se encuentra en Turquía, desde hace una semana.
Este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó al nivel 5, la última fase antes de la declaratoria de pandemia, mientras que en México el gobierno federal decretó la suspensión de actividades en la administración pública y en sectores no prioritarios, a partir del 1 de mayo y hasta el día 5.
Sin embargo, pese a la gravedad de la situación, la Comisión de Salud se ha mantenido al margen de las propuestas, debido a la ausencia de su presidente Ector Jaime Ramírez, en cuya oficina sólo se han limitado a informar que se encuentra "en un evento" en Turquía, aunque se desconoce la fecha en que regresará al país y a sus labores legislativas.
El martes, el diputado del PRI, José Murat, propuso que la Comisión de Salud creara un plan que involucrara a todos los legisladores para coadyuvar con las acciones para evitar la propagación del virus.
No hubo respuesta. La ausencia del paniasta Ramírez Barba ha generado que los legisladores que integran la comisión trabajen por separado. Los diputados del PRD propusieron ayer diez acciones de gobierno para "atenuar" los efectos de la influenza, entre ellos la creación de un Fondo Nacional de Contingencia de, por lo menos, 5 mil millones de pesos. El PRI apoyó la propuesta y presentó una propia.
Caso Valdemar Gutiérrez, candidato a diputado federal por el PAN
Mexico, D.F..- La disidencia del sindicato de trabajadores del Seguro Social denunció que su secretario general nacional, Valdemar Gutiérrez Fragoso, ofrece a afiliados la aplicación de una "inexistente vacuna" contra la gripe porcina.
Con el fin de congraciarse con la base trabajadora luego que aceptara ser postulado por el Partido Acción Nacional (PAN) a una diputación federal de mayoría relativa, Gutiérrez Fragoso prometió el 25 de abril pasado que en "las próximas horas estarán vacunados contra la influenza porcina todos los trabajadores sindicalizados del IMSS", acusó la oposición en su órgano informativo Hoja Obrera.
En realidad, aclaró la disidencia, los trabajadores fueron vacunados por orden de la dirección del IMSS contra la influencia estacional, protección que hasta el momento no representa una cura o una medida de prevención frente al virus H1N1.
"Este fraudulento galeno y líder sindical desconoce la materia médica y de investigación, ignora que en el mercado aún no hay una vacuna contra la influenza porcina. Esta nueva mentira incrementa más su ignorancia y falsedad de preocuparse por los agremiados del sindicato", indicó la Asamblea Sindical del IMSS, que distribuye la Hoja Obrera.
Así mismo, indicó que la vacuna contra la influenza estacional no alcanzó para todos los empleados sindicalizados del IMSS y mucho menos para los derechohabientes.
"Este oscuro dirigente, detrás de ese gesto, escabulle su responsabilidad de exigir al patrón el cumplimiento de cubrir todo gasto por riesgos de trabajo. Estas son las partes que el patrón pretende modificar en su pliego petitorio y que Valdemar, el Comité Ejecutivo Nacional y los secretarios seccionales están por entregar en la próxima revisión salarial", señaló.
Rodrigo Medina, candidato a gobernador del PRI en Nuevo León
MONTERREY, N.L..- El candidato del PRI a la gubernatura de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, instaló en su comité de campaña maquinaria para elaborar cubrebocas y distribuirlos entre la población para evitar cualquier contagio por la influenza porcina.
Medina de la Cruz informó que el material y las 14 máquinas que serán usadas para confeccionar estos aditamentos de higiene, fueron aportados por un empresario local.
El candidato del PRI recorrió este miércoles las instalaciones de esta improvisada maquiladora ubicada en bulevar Díaz Ordaz 123, en la colonia Santa María, al poniente de Monterrey, donde operan 22 trabajadores en dos turnos.
Medina dijo que por cada turno se confeccionarán mil tapabocas, y explicó que abrió esta fábrica debido a la demanda creciente que ha provocado desabastecimiento de tapabocas en la localidad.
Por la mañana, Medina entregó a taxistas y operadores de autobuses más de 12 mil tapabocas y botes de gel antibacterial con su imagen.
Por su parte, el diputado local del PAN, el otorrinolaringólogo Ángel Valle de la O, consideró irresponsable la maquila de los tapabocas, pues, dijo, no cumple con la Norma Oficial Mexicana correspondiente y se desconocen las condiciones higiénicas en las que son elaborados, y pidió al gobernador Natividad González Parás impedir que el candidato de su partido reparta estos auxiliares sanitarios.
"No es posible que el gobernador y el secretario de Salud (Gilberto Montiel Amoroso) permitan que personas ajenas al gobierno tomen actitudes como las que toma Medina, porque es competencia exclusiva de la Secretaría de Salud y por ahí debe controlarse todo.
"Además, están haciendo una maquiladora de cubre bocas y no tenemos la certeza del control de calidad sanitario que deben cumplir o que estén cumpliendo en la Norma Oficial Mexicana. Por eso creo que es irresponsable, porque lucran con la salud", dijo.
Ector Jaime Ramírez, diputado federal del PAN
MÉXICO, D.F.- A pesar de la emergencia sanitaria, la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados se encuentra paralizada porque el presidente de dicha comisión, el panista Ector Jaime Ramírez Barba, se encuentra en Turquía, desde hace una semana.
Este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó al nivel 5, la última fase antes de la declaratoria de pandemia, mientras que en México el gobierno federal decretó la suspensión de actividades en la administración pública y en sectores no prioritarios, a partir del 1 de mayo y hasta el día 5.
Sin embargo, pese a la gravedad de la situación, la Comisión de Salud se ha mantenido al margen de las propuestas, debido a la ausencia de su presidente Ector Jaime Ramírez, en cuya oficina sólo se han limitado a informar que se encuentra "en un evento" en Turquía, aunque se desconoce la fecha en que regresará al país y a sus labores legislativas.
El martes, el diputado del PRI, José Murat, propuso que la Comisión de Salud creara un plan que involucrara a todos los legisladores para coadyuvar con las acciones para evitar la propagación del virus.
No hubo respuesta. La ausencia del paniasta Ramírez Barba ha generado que los legisladores que integran la comisión trabajen por separado. Los diputados del PRD propusieron ayer diez acciones de gobierno para "atenuar" los efectos de la influenza, entre ellos la creación de un Fondo Nacional de Contingencia de, por lo menos, 5 mil millones de pesos. El PRI apoyó la propuesta y presentó una propia.
MARCELA GOMEZ ZALCE. --- A PUERTA CERRADA.---
Cuando la pandemia nos alcance (parte II)
A Puerta Cerrada
Marcela Gómez Zalce
2009-04-30•Política
• La Amenaza
• El calderón de los virus…
Contra la desinformación y el rumor, mi estimado, no hay amparo alguno. El asunto sobre la influenza porcina está en todos los medios internacionales, donde el caso del niño Edgar Hernández, de cinco años de edad originario de la comunidad La Gloria en Veracruz, es acreditado con ser el primer portador del virus H1N1 que hoy tiene, y mantiene, al mundo con los focos rojos encendidos, desencadenando ayer que the WHO eleve a nivel 5 la alerta, básicamente pronosticando que la pandemia es inminente, por lo que exhorta a los países comenzar con los preparativos para enfrentar este nueva plaga del SXXI.
El simpático documento Responding to an Influenza Pandemic in the Americas, del que ayer le platicaba en este irreverente espacio, emitido en mayo del 2006 por el CSIS, my friend, dividido en dos secciones, The Threat (la amenaza) y The Response (las acciones), resumen puntualmente lo que las naciones deben implementar y esperar con lo relacionado con el delicado brote de una pandemia… que en ese año estaba enfocado con la cuestión del brote de la influenza aviar (gripe aviar) que desencadenó una alerta en Asia.
Hoy, ante el escenario vaticinado en medio de un contexto de peligrosa recesión mundial derivado del colapso económico, los analistas financieros prevén un hoyo negro mucho más complicado para países en donde se ubica, of course, a México.
Pero déjeme le resumo, amable lector, las conclusiones emanadas de ese primer panel titulado The Threat. (La Amenaza).
Hay creciente preocupación sobre un inminente brote de influenza aviar en el Continente que pueda contribuir a una pandemia de influenza sustentada en la transmisión de un nuevo tipo de virus entre humanos. De ser así, el efecto variará en las personas y en las economías regionales de acuerdo a varios factores. La virulencia del virus, la proporción de casos clínicos y el nivel de preparación para enfrentar la amenaza.
La infraestructura de los sectores de salud hasta en los países más desarrollados, serán rápidamente rebasados por los efectos de una pandemia forzando la inclusión de puntuales cuidados en casa como complemento de la estrategia de acciones.
Es de esperar que una pandemia de influenza se propagará con rapidez y afectará desproporcionadamente a la población mas joven presionando de más no sólo los sectores de salud sino otros servicios claves.
Las regiones más vulnerables serán aquéllas dependientes de sectores como el turismo, de la exportación de productos perecederos y en las que sus economías se encuentren bajo fuertes presiones que derive de deficientes servicios de salud.
Una pandemia de influenza impactará en el corto plazo de manera grave y sustancial las economías de la región donde la variante estará en la duración de la misma, en la tasa de mortalidad, en el tiempo de convalecencia y en el número de las irrupciones del contagio.
La afectación en el corto plazo de los recursos laborales junto a las demandas del consumidor serán de suma gravedad.
La capacidad para mantener la oferta y demanda estará ligada con la continuidad para implementar la ley y el orden junto con los servicios básicos durante el tiempo crítico de la pandemia.
Las instituciones financieras estarán bajo máxima presión dificultando actividades bancarias, mercantiles, cambiarias y fiscales. El ausentismo laboral presionará la planta productiva, los servicios de telecomunicación, transportación, tecnología e información obligando a los gobiernos a ajustar sus políticas micro y macroeconómicas, las financieras y sobre todo las fiscales.
La duración de la pandemia será un factor clave para enfrentar con éxito estos retos así como el grado en que la sociedad desarrolle “planes alternos en la continuidad de los negocios” para controlar la disrupción de la cadena económica.
Hasta aquí los puntos mas trascendentes, my friend, donde se exponen básicamente los puntos más vulnerables, sus secuelas y donde hoy, ante el nivel 5 de la alerta emitida por the WHO, deben ser cuidadosamente sopesados y considerados por el Gymboree del (des)gobierno de Felipe Calderón, que en el colmo de su (mala) suerte lucha además contra otro virus… el de su nula credibilidad.
OR FIN, SI O NO ES PARA ALARMARSE?? POLIMNIA ROMANA.
Después del golpe financiero a los restauranteros del D.F., ya salió el Secretario de ¡Salud! a decir que no es para tanto. Si sólo son 7 muertitos por la mentada influenza. Lo que pasa es que hay que aplicar medidas preventivas que espanten, pero no a los negocios jugosos sino a lo ciudadanos revoltosos.
Marcelo Ebrad ha tomado la delantera en esto de la prevención, así que a él no le tienen que reclamar la medida maquiavélica impuesta desde Los Pinos con el apoyo de organismos internacionales, que seguramente tienen calculado todo…todo el beneficio que les acarreará ver al pelele dispuesto a poner una venta de Garage en la puerta de atrás, sí, por la que se coló con ayuda del PRI para disque “gobernar”.
Por el tema de la Influenza yo me siento tranquila al igual que la mayoría de mis amigos, conocidos y familiares. Finalmente esto va a pasar en algún momento, esperemos que no tarde demasiado porque la gente más afectada y vulnerable: niños sin guarderías y sin escuela, jóvenes sin asistir a clases, bueno, los afortunados que tienen un espacio dónde estudiar porque estos podridos gobiernos no han pensado jamás a futuro; los pobladores del campo donde ni clínicas de salud existen y los pequeños y medianos empresarios que viven al día y que tienen que compartir las pocas ganancias con el otro bueno para nada de Carstens, ellos son los que van a terminar pagando los platos rotos. ¿A caso nos han preocupado como sociedad, solapadora de funcionarios corruptos, los miles de niños que mueren cada año por enfermedades curables? ¡Claro que no!, esos no son epidemias que nos puedan contagiar, y sin embargo, esas muertes duelen tanto… son tan graves, hablan de nuestro egoísmo, de la pérdida de los valores humanos universales. Esas muertes de las que somos cómplices seguirán porque nuestra preocupación es salvarnos a nosotros mismos sin entender que con ellos también nos morimos un poco.
Marcelo Ebrad ha tomado la delantera en esto de la prevención, así que a él no le tienen que reclamar la medida maquiavélica impuesta desde Los Pinos con el apoyo de organismos internacionales, que seguramente tienen calculado todo…todo el beneficio que les acarreará ver al pelele dispuesto a poner una venta de Garage en la puerta de atrás, sí, por la que se coló con ayuda del PRI para disque “gobernar”.
Por el tema de la Influenza yo me siento tranquila al igual que la mayoría de mis amigos, conocidos y familiares. Finalmente esto va a pasar en algún momento, esperemos que no tarde demasiado porque la gente más afectada y vulnerable: niños sin guarderías y sin escuela, jóvenes sin asistir a clases, bueno, los afortunados que tienen un espacio dónde estudiar porque estos podridos gobiernos no han pensado jamás a futuro; los pobladores del campo donde ni clínicas de salud existen y los pequeños y medianos empresarios que viven al día y que tienen que compartir las pocas ganancias con el otro bueno para nada de Carstens, ellos son los que van a terminar pagando los platos rotos. ¿A caso nos han preocupado como sociedad, solapadora de funcionarios corruptos, los miles de niños que mueren cada año por enfermedades curables? ¡Claro que no!, esos no son epidemias que nos puedan contagiar, y sin embargo, esas muertes duelen tanto… son tan graves, hablan de nuestro egoísmo, de la pérdida de los valores humanos universales. Esas muertes de las que somos cómplices seguirán porque nuestra preocupación es salvarnos a nosotros mismos sin entender que con ellos también nos morimos un poco.
ASTILLERO.
Tapabocas, un mito genial
Porosos e ineficaces: Lezana
Pánico, una “manera de actuar”
Julio Hernández López
Los tapabocas casi no sirven de nada en el caso específico de la influenza hoy en fase 5, pero fue la gente por sí misma la que demandó” ponérselos para así sentirse “más segura”, según la desparpajada versión que ahora da un funcionario mexicano que para nada usa los famosos protectores faciales, ni más ni menos que la máxima autoridad burocrática en materia de esas enfermedades infecciosas, el doctor Miguel Ángel Lezana, director general de vigilancia epidemiológica y control de enfermedades de la Secretaría de Salud, que con desfachatez de la misma cepa reconoce que la alarma mundial creada fue “una manera de actuar” que buscó reducir el número de muertes.
Las esclarecedoras palabras del doctor Lezana no fueron arrancadas con profesionalismo crítico por los varios entrevistadores de radio y televisión que en estos días han tenido constantemente en sus estudios al destacado funcionario pero sólo para que junto con otros especialistas genere un continuo flujo de información técnica que hace a los escuchas fortalecer sus miedos (“periodismo informativo” de preguntitas médicas de consultorio, sin ir al fondo del asunto ni exigir verdades). Primero fue ante corresponsales extranjeros donde Lezana soltó la frase en la que acepta modalidades actorales. Inquietos porque las cifras mexicanas no cuadran por ningún lado que se les vea, los representantes de medios foráneos pidieron a la administración calderónica que alguna autoridad en la materia les explicara el enredo en el que conforme pasan los días son menos los muertos por el virus ahora pandémico pues, como en un programa televisivo de pastelazos, al estilo Capulina, el secretario Córdova anunció la noche del pasado martes que, luego de ajustes en los que nada habría tenido que ver el IFE, el número de fallecimientos técnicamente relacionados con la mencionada gripe mutante eran... siete. Para explicar los milagros aritméticos a los corresponsales extranjeros fue comisionado el médico Lezana y, según publicó en El País el reportero Pablo Ordaz, en una entrega intitulada “Lo que México no responde”, el funcionario así reaccionó cuando le hicieron ver que el propio Felipe Calderón había mencionado originalmente 159 muertes relacionadas con la influenza, y luego se había hablado de 20: “¿Y el resto? ‘El resto sólo huelen a influenza’, reconoció Lezana. ¿Podría pasar que, de las 159 muertes anunciadas, finalmente sólo fuesen atribuibles a la influenza 10 o 20? ‘Podría ser posible’. Entonces, le preguntaron los periodistas, toda esta alarma mundial… ‘Era la única manera de actuar, si no lo hubiésemos hecho así, en vez de 30 muertes podríamos haber tenido 3 mil’”. Producciones Calderón presenta, para fines benéficos, “La alarma necesaria”.
El mismo Ordaz consiguió luego una cita con el mencionado Lezana en sus oficinas. En las calles, todo mundo llevaba tapabocas, inclusive, escribió en su entrega de hoy en el citado diario hispano, “los soldados de un retén del Ejército dedicado, precisamente, a repartir mascarillas. La sorpresa llega cuando el periodista entra en la Secretaría de Salud. Nadie lleva mascarillas. Ni la recepcionista, ni nadie del servicio de limpieza, ni las secretarias, ni el jefe de Prensa ni, por supuesto, el doctor Lezana. Así que la primera pregunta no puede ser otra. ¿Por qué no llevan ustedes mascarillas? ‘Porque la porosidad que tienen permite fácilmente el paso de las partículas, y porque además es muy poco viable que el virus pueda transmitirse por el aire sin estar en contacto con ninguna superficie’. Y entonces –la siguiente pregunta también es obvia– ¿por qué han repartido millones de mascarillas? ‘Bueno, es más una demanda de la población. La gente se siente más segura llevándolas, más tranquila, y no les hace ningún daño’. La declaración del funcionario no deja de ser sorprendente, sobre todo porque, durante los primeros días del brote, la población asistió angustiada a la escasez de mascarillas, y los políticos en tropel –en vez de hacer el discurso de Lezana– se lanzaron a prometer mascarillas como si en ellas estuviera la salvación. Lezana explica entonces que el virus sólo es capaz de vivir en el aire cuestión de segundos, pero que donde sí se hace fuerte es sobre los objetos. ‘Por eso lo importante es lavarse mucho las manos, limpiar mucho los objetos que otras personas han tocado’”. También reveló el doctor Lezana que uno de los primeros brotes de los que se tuvo noticia fue el de la comunidad veracruzana La Gloria, el cual “se inició el 9 de marzo y concluyó el 10 de abril” y afectó a “treinta por ciento de la población”, pero sin defunciones. El funcionario no lo mencionó, pero la empresa acusada de provocar esos males es Granjas Carroll de México, la trasnacional de la que ayer se escribió aquí. “La noticia de otro brote llegó el 12 de abril. Una mujer de 39 años, encuestadora de opinión, fue ingresada en un hospital y falleció al día siguiente”, explicó Ordaz con base en las declaraciones de Lezana. Finalmente, el funcionario aceptó que la danza regresiva de número de muertos se debe a que “tenemos un problema de comunicación”.
ESTORNUDOS INOPORTUNOS. Juan Carlos Romero Hicks, director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, estornudó tres veces durante una conferencia de prensaFoto Carlos Cisneros
Astillas
Esta columna ha recibido gran cantidad de cartas por Internet a las que invariablemente se da lectura pero a las que materialmente es imposible responder una por una. Además de comentarios e interpretaciones personales, han llegado opiniones técnicas y científicas, estudios y tesis que hablan del terrible abandono en que se ha tenido a la estructura pública de salud y de la oportuna denuncia que se ha hecho de los riesgos de una epidemia por influenza. Gracias a todos por escribir... Por cierto, en los comentarios a esta columna en la versión de Internet también se pueden leer textos interesantes y ciertos debates sabrosos... Y, mientras las protestas por el 1º de mayo también son sometidas al tapabocas, ¡hasta el próximo lunes, en esta sección que por razones de calendario laboral mañana no se publicará!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
Porosos e ineficaces: Lezana
Pánico, una “manera de actuar”
Julio Hernández López
Los tapabocas casi no sirven de nada en el caso específico de la influenza hoy en fase 5, pero fue la gente por sí misma la que demandó” ponérselos para así sentirse “más segura”, según la desparpajada versión que ahora da un funcionario mexicano que para nada usa los famosos protectores faciales, ni más ni menos que la máxima autoridad burocrática en materia de esas enfermedades infecciosas, el doctor Miguel Ángel Lezana, director general de vigilancia epidemiológica y control de enfermedades de la Secretaría de Salud, que con desfachatez de la misma cepa reconoce que la alarma mundial creada fue “una manera de actuar” que buscó reducir el número de muertes.
Las esclarecedoras palabras del doctor Lezana no fueron arrancadas con profesionalismo crítico por los varios entrevistadores de radio y televisión que en estos días han tenido constantemente en sus estudios al destacado funcionario pero sólo para que junto con otros especialistas genere un continuo flujo de información técnica que hace a los escuchas fortalecer sus miedos (“periodismo informativo” de preguntitas médicas de consultorio, sin ir al fondo del asunto ni exigir verdades). Primero fue ante corresponsales extranjeros donde Lezana soltó la frase en la que acepta modalidades actorales. Inquietos porque las cifras mexicanas no cuadran por ningún lado que se les vea, los representantes de medios foráneos pidieron a la administración calderónica que alguna autoridad en la materia les explicara el enredo en el que conforme pasan los días son menos los muertos por el virus ahora pandémico pues, como en un programa televisivo de pastelazos, al estilo Capulina, el secretario Córdova anunció la noche del pasado martes que, luego de ajustes en los que nada habría tenido que ver el IFE, el número de fallecimientos técnicamente relacionados con la mencionada gripe mutante eran... siete. Para explicar los milagros aritméticos a los corresponsales extranjeros fue comisionado el médico Lezana y, según publicó en El País el reportero Pablo Ordaz, en una entrega intitulada “Lo que México no responde”, el funcionario así reaccionó cuando le hicieron ver que el propio Felipe Calderón había mencionado originalmente 159 muertes relacionadas con la influenza, y luego se había hablado de 20: “¿Y el resto? ‘El resto sólo huelen a influenza’, reconoció Lezana. ¿Podría pasar que, de las 159 muertes anunciadas, finalmente sólo fuesen atribuibles a la influenza 10 o 20? ‘Podría ser posible’. Entonces, le preguntaron los periodistas, toda esta alarma mundial… ‘Era la única manera de actuar, si no lo hubiésemos hecho así, en vez de 30 muertes podríamos haber tenido 3 mil’”. Producciones Calderón presenta, para fines benéficos, “La alarma necesaria”.
El mismo Ordaz consiguió luego una cita con el mencionado Lezana en sus oficinas. En las calles, todo mundo llevaba tapabocas, inclusive, escribió en su entrega de hoy en el citado diario hispano, “los soldados de un retén del Ejército dedicado, precisamente, a repartir mascarillas. La sorpresa llega cuando el periodista entra en la Secretaría de Salud. Nadie lleva mascarillas. Ni la recepcionista, ni nadie del servicio de limpieza, ni las secretarias, ni el jefe de Prensa ni, por supuesto, el doctor Lezana. Así que la primera pregunta no puede ser otra. ¿Por qué no llevan ustedes mascarillas? ‘Porque la porosidad que tienen permite fácilmente el paso de las partículas, y porque además es muy poco viable que el virus pueda transmitirse por el aire sin estar en contacto con ninguna superficie’. Y entonces –la siguiente pregunta también es obvia– ¿por qué han repartido millones de mascarillas? ‘Bueno, es más una demanda de la población. La gente se siente más segura llevándolas, más tranquila, y no les hace ningún daño’. La declaración del funcionario no deja de ser sorprendente, sobre todo porque, durante los primeros días del brote, la población asistió angustiada a la escasez de mascarillas, y los políticos en tropel –en vez de hacer el discurso de Lezana– se lanzaron a prometer mascarillas como si en ellas estuviera la salvación. Lezana explica entonces que el virus sólo es capaz de vivir en el aire cuestión de segundos, pero que donde sí se hace fuerte es sobre los objetos. ‘Por eso lo importante es lavarse mucho las manos, limpiar mucho los objetos que otras personas han tocado’”. También reveló el doctor Lezana que uno de los primeros brotes de los que se tuvo noticia fue el de la comunidad veracruzana La Gloria, el cual “se inició el 9 de marzo y concluyó el 10 de abril” y afectó a “treinta por ciento de la población”, pero sin defunciones. El funcionario no lo mencionó, pero la empresa acusada de provocar esos males es Granjas Carroll de México, la trasnacional de la que ayer se escribió aquí. “La noticia de otro brote llegó el 12 de abril. Una mujer de 39 años, encuestadora de opinión, fue ingresada en un hospital y falleció al día siguiente”, explicó Ordaz con base en las declaraciones de Lezana. Finalmente, el funcionario aceptó que la danza regresiva de número de muertos se debe a que “tenemos un problema de comunicación”.
ESTORNUDOS INOPORTUNOS. Juan Carlos Romero Hicks, director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, estornudó tres veces durante una conferencia de prensaFoto Carlos Cisneros
Astillas
Esta columna ha recibido gran cantidad de cartas por Internet a las que invariablemente se da lectura pero a las que materialmente es imposible responder una por una. Además de comentarios e interpretaciones personales, han llegado opiniones técnicas y científicas, estudios y tesis que hablan del terrible abandono en que se ha tenido a la estructura pública de salud y de la oportuna denuncia que se ha hecho de los riesgos de una epidemia por influenza. Gracias a todos por escribir... Por cierto, en los comentarios a esta columna en la versión de Internet también se pueden leer textos interesantes y ciertos debates sabrosos... Y, mientras las protestas por el 1º de mayo también son sometidas al tapabocas, ¡hasta el próximo lunes, en esta sección que por razones de calendario laboral mañana no se publicará!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
MEXICO S.A.
Ya no se siente lo duro, sino lo tupido
Alerta el Banco de México de más caída del PIB
Carlos Fernández-Vega
En cuestiones económicas el país también está en alerta, pero en fase 6, porque el balance del primer tercio de este caótico 2009 resulta desastroso si se atienden las conclusiones que sobre el particular el Banco de México divulgó ayer: de enero a marzo, el producto interno bruto mexicano registró un desplome de entre 7 y 8 por ciento a tasa anual (aunque puede ser superior), lo que significa una proporción 10 veces mayor a la reportada en igual periodo, pero de 1995, el año de la gran crisis”; en igual lapso del presente año se cancelaron 372 mil 289 empleos formales registrados en el IMSS, una caída cercana a 3 por ciento contra 0.5 por ciento en el primer trimestre de 1995; la inflación no cede y su variación anual promedio en el periodo es igual a la del cuarto trimestre de 2008, aunque en renglones como el de alimentos ha superado a los indicadores previos; persiste el deterioro de las exportaciones y se mantiene la presión sobre el tipo de cambio, entre otras gracias, sin incluir el efecto de la emergencia sanitaria.
Un pésimo balance para una población que ya no siente lo duro, sino lo tupido, en medio de tres lacerantes crisis (económica, sanitaria y de seguridad), cuya solución no tiene para cuándo, sobre todo con un “gobierno” que, si bien va y siendo generoso, sólo puede atender –si en realidad lo hace– una de ellas a la vez y con todos los bemoles.
Resulta que el Banco de México divulgó ayer su Informe sobre la inflación enero-marzo de 2009, en el que entre otras cosas subraya que “la evolución de la actividad económica en México durante el primer trimestre del año se enmarcó en un contexto global caracterizado, en términos generales, por un creciente deterioro en los niveles de demanda y por condiciones mucho más adversas de acceso al financiamiento externo en los mercados de capitales internacionales. Este entorno desfavorable se vio reflejado en la mayoría de las cifras de demanda y de actividad productiva domésticas, las cuales sugieren que, en el trimestre que se reporta, la economía mexicana registró una caída considerable en sus niveles de actividad. Por un lado, la evolución de las exportaciones de bienes y servicios muestra que el deterioro de la demanda externa persistió durante el primer trimestre del año. Por otro, se observó una transmisión más profunda y generalizada del choque externo a los niveles de gasto doméstico. Como consecuencia de ello, la caída de la actividad productiva, que inició a finales del año anterior, se vio magnificada de manera importante”.
De igual forma, reconoce que “hasta ahora” la caída de la inflación general “ha sido más lenta que lo previsto, si se considera la fuerte contracción por la que está atravesando la economía. En los siguientes meses se espera que dos factores principales dominen la evolución de la inflación. En primer lugar, a pesar de que es factible que una parte importante del proceso de traspaso de la depreciación cambiaria a los precios al consumidor de las mercancías ya se haya llevado a cabo, no puede descartarse que en los siguientes meses dicho proceso continúe, aunque lo haga con menor intensidad. En este sentido, la apreciación y mayor estabilidad que ha registrado recientemente la paridad, la caída en las cotizaciones internacionales de las materias primas, así como la fase recesiva por la que atraviesa la economía, contribuirán a atenuar el referido traspaso. En segundo, se anticipa que las condiciones recesivas se vayan reflejando gradualmente con mayor intensidad en la formación de precios en el sector de los servicios, posiblemente induciendo una mayor caída de su inflación. En balance, se anticipa que la inflación general muestre una tendencia decreciente a partir de mayo del presente año y converja hacia su meta a finales de 2010”.
El ingrato balance reportado por el Banco de México no incorpora, como lo precisa en el informe, el efecto negativo que en la economía tendrá la emergencia sanitaria: “en los últimos días ha aparecido un brote de influenza porcina en el país. Dado lo reciente de este evento, no es posible saber cuáles serán su duración e intensidad, por lo que tampoco se puede prever cuáles serán sus efectos sobre variables como la inflación, el crecimiento y el tipo de cambio. En consecuencia, tanto el análisis, como los resultados y las proyecciones que se presentan en este informe, no consideran dicha situación”.
Por lo que toca al empleo, advierte que la disminución de los niveles de actividad productiva durante el primer trimestre de 2009 “condujo a un deterioro de las condiciones prevalecientes en el mercado laboral. Esto, al inducir una reducción importante de la demanda de trabajo y propiciar un aumento significativo en las tasas de desempleo. Al cierre del primer trimestre de 2009, el número de trabajadores asegurados en el IMSS presentó una contracción anual significativa, con lo cual se exacerbó la trayectoria negativa del empleo formal en el país. Ello se pone de manifiesto en el comportamiento de las caídas anuales del número de trabajadores asegurados en el IMSS al cierre del cuarto trimestre de 2008 y del primer trimestre del año en curso, que resultaron de 37 mil 535 y 372 mil 289 personas (menos 0.3 y menos 2.6 por ciento), respectivamente. Al cierre de marzo de 2009, la reducción anual en el número de trabajadores se derivó de la combinación de una disminución de 379 mil 633 trabajadores permanentes (menos 3 por ciento) y un aumento de 7 mil 344 eventuales urbanos (0.5 por ciento)”.
Como referencia, en el primer trimestre de 1995 la cancelación de empleo formal se concentró en las plazas eventuales. En la crisis de 2009 la mayor factura laboral ha recaído en las plazas permanentes. El Banco de México destaca que “si bien la caída del empleo formal en la economía continuó observándose principalmente en el sector manufacturero, las actividades fundamentalmente dirigidas al mercado doméstico también empezaron a manifestar una mayor debilidad en sus niveles de empleo formal”.
Las rebanadas del pastel
Contrario al registro del feliz funcionario que todo lo ve color de rosa, Agustín Carstens, el gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz –un catastrofista institucional que suele estar más cerca de la realidad–, advirtió ayer que la emergencia sanitaria, sin duda, “tendrá un impacto negativo en la economía mexicana”, tanto que actualizó su estimación para 2009: el PIB nacional se desplomaría hasta 4.8 por ciento. Un norme beso (con cubrebocas cumpleañero) a la dueña de mi sistema cardiaco.
cfvmexico_sa@hotmail.com • mexicosa@infinitum.com.mx
Alerta el Banco de México de más caída del PIB
Carlos Fernández-Vega
En cuestiones económicas el país también está en alerta, pero en fase 6, porque el balance del primer tercio de este caótico 2009 resulta desastroso si se atienden las conclusiones que sobre el particular el Banco de México divulgó ayer: de enero a marzo, el producto interno bruto mexicano registró un desplome de entre 7 y 8 por ciento a tasa anual (aunque puede ser superior), lo que significa una proporción 10 veces mayor a la reportada en igual periodo, pero de 1995, el año de la gran crisis”; en igual lapso del presente año se cancelaron 372 mil 289 empleos formales registrados en el IMSS, una caída cercana a 3 por ciento contra 0.5 por ciento en el primer trimestre de 1995; la inflación no cede y su variación anual promedio en el periodo es igual a la del cuarto trimestre de 2008, aunque en renglones como el de alimentos ha superado a los indicadores previos; persiste el deterioro de las exportaciones y se mantiene la presión sobre el tipo de cambio, entre otras gracias, sin incluir el efecto de la emergencia sanitaria.
Un pésimo balance para una población que ya no siente lo duro, sino lo tupido, en medio de tres lacerantes crisis (económica, sanitaria y de seguridad), cuya solución no tiene para cuándo, sobre todo con un “gobierno” que, si bien va y siendo generoso, sólo puede atender –si en realidad lo hace– una de ellas a la vez y con todos los bemoles.
Resulta que el Banco de México divulgó ayer su Informe sobre la inflación enero-marzo de 2009, en el que entre otras cosas subraya que “la evolución de la actividad económica en México durante el primer trimestre del año se enmarcó en un contexto global caracterizado, en términos generales, por un creciente deterioro en los niveles de demanda y por condiciones mucho más adversas de acceso al financiamiento externo en los mercados de capitales internacionales. Este entorno desfavorable se vio reflejado en la mayoría de las cifras de demanda y de actividad productiva domésticas, las cuales sugieren que, en el trimestre que se reporta, la economía mexicana registró una caída considerable en sus niveles de actividad. Por un lado, la evolución de las exportaciones de bienes y servicios muestra que el deterioro de la demanda externa persistió durante el primer trimestre del año. Por otro, se observó una transmisión más profunda y generalizada del choque externo a los niveles de gasto doméstico. Como consecuencia de ello, la caída de la actividad productiva, que inició a finales del año anterior, se vio magnificada de manera importante”.
De igual forma, reconoce que “hasta ahora” la caída de la inflación general “ha sido más lenta que lo previsto, si se considera la fuerte contracción por la que está atravesando la economía. En los siguientes meses se espera que dos factores principales dominen la evolución de la inflación. En primer lugar, a pesar de que es factible que una parte importante del proceso de traspaso de la depreciación cambiaria a los precios al consumidor de las mercancías ya se haya llevado a cabo, no puede descartarse que en los siguientes meses dicho proceso continúe, aunque lo haga con menor intensidad. En este sentido, la apreciación y mayor estabilidad que ha registrado recientemente la paridad, la caída en las cotizaciones internacionales de las materias primas, así como la fase recesiva por la que atraviesa la economía, contribuirán a atenuar el referido traspaso. En segundo, se anticipa que las condiciones recesivas se vayan reflejando gradualmente con mayor intensidad en la formación de precios en el sector de los servicios, posiblemente induciendo una mayor caída de su inflación. En balance, se anticipa que la inflación general muestre una tendencia decreciente a partir de mayo del presente año y converja hacia su meta a finales de 2010”.
El ingrato balance reportado por el Banco de México no incorpora, como lo precisa en el informe, el efecto negativo que en la economía tendrá la emergencia sanitaria: “en los últimos días ha aparecido un brote de influenza porcina en el país. Dado lo reciente de este evento, no es posible saber cuáles serán su duración e intensidad, por lo que tampoco se puede prever cuáles serán sus efectos sobre variables como la inflación, el crecimiento y el tipo de cambio. En consecuencia, tanto el análisis, como los resultados y las proyecciones que se presentan en este informe, no consideran dicha situación”.
Por lo que toca al empleo, advierte que la disminución de los niveles de actividad productiva durante el primer trimestre de 2009 “condujo a un deterioro de las condiciones prevalecientes en el mercado laboral. Esto, al inducir una reducción importante de la demanda de trabajo y propiciar un aumento significativo en las tasas de desempleo. Al cierre del primer trimestre de 2009, el número de trabajadores asegurados en el IMSS presentó una contracción anual significativa, con lo cual se exacerbó la trayectoria negativa del empleo formal en el país. Ello se pone de manifiesto en el comportamiento de las caídas anuales del número de trabajadores asegurados en el IMSS al cierre del cuarto trimestre de 2008 y del primer trimestre del año en curso, que resultaron de 37 mil 535 y 372 mil 289 personas (menos 0.3 y menos 2.6 por ciento), respectivamente. Al cierre de marzo de 2009, la reducción anual en el número de trabajadores se derivó de la combinación de una disminución de 379 mil 633 trabajadores permanentes (menos 3 por ciento) y un aumento de 7 mil 344 eventuales urbanos (0.5 por ciento)”.
Como referencia, en el primer trimestre de 1995 la cancelación de empleo formal se concentró en las plazas eventuales. En la crisis de 2009 la mayor factura laboral ha recaído en las plazas permanentes. El Banco de México destaca que “si bien la caída del empleo formal en la economía continuó observándose principalmente en el sector manufacturero, las actividades fundamentalmente dirigidas al mercado doméstico también empezaron a manifestar una mayor debilidad en sus niveles de empleo formal”.
Las rebanadas del pastel
Contrario al registro del feliz funcionario que todo lo ve color de rosa, Agustín Carstens, el gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz –un catastrofista institucional que suele estar más cerca de la realidad–, advirtió ayer que la emergencia sanitaria, sin duda, “tendrá un impacto negativo en la economía mexicana”, tanto que actualizó su estimación para 2009: el PIB nacional se desplomaría hasta 4.8 por ciento. Un norme beso (con cubrebocas cumpleañero) a la dueña de mi sistema cardiaco.
cfvmexico_sa@hotmail.com • mexicosa@infinitum.com.mx
FRENTE A LA GRIPE, COMPROMISO CAMPESINO.
Gustavo Duch Guillot
Nuestra madre Tierra enfermó de gripe. Un cuadro clínico cuyo origen y agudización encontramos en la propagación de una agroindustria poderosa, responsable de la masiva destrucción de la tierra campesina y por ende la desaparición de sus moradores. Pero tenemos una esperanza, porque el campo –a pesar de todo– reserva semillas predispuestas y dispuestas a germinar. Como la iniciativa del Compromiso Campesino (www.compromisocampesino.org) encabezada por Jerónimo Aguado Martínez, campesino, trabajador de la tierra y el ganado en la comarca de Tierra de Campos, Palencia, España.
Cuando me siento a charlar con Jeromo, así le llamamos, siempre acabo pensando que debería tener a mano papel y bolígrafo. Porque la memoria falla y hay mucho que aprender y recordar de todo lo que trasmite Jeromo. Bueno, de lo que explica y de lo que hace, que eso de la coherencia también es algo que proteger. Jeromo te cuenta de su abuela materna que, cuidando tantos hijos que crió, ni tiempo tuvo de ir a ver las tierras de trigo de la familia, pero que nunca –y enfatiza, nunca– permitió que se vendieran. De sus años de militante colaborando con causas campesinas en Nicaragua como cuando fue a una entrega de tierras a pequeños campesinos a cargo de Ernesto Cardenal. O de María José que gestiona un huerto con la única tecnología que le proporcionan sus manos, ecológico mil por mil. Y de su rebaño de 180 ovejas, ni una más, porque la avaricia empobrecería sus tierras y su equilibrio natural. Cordero que paren, cordero vendido entre consumidores locales que saben de la calidad e higiene de ese ganado. Realidades modernas del siglo XXI que te hacen comprender que existen campesinos y campesinas cuya vinculación con la tierra va más allá del ejercicio de una profesión, porque se sienten y son seres vivos que, en colaboración y reciprocidad con la naturaleza, producen vida y alimentos sanos para la sociedad sin necesidad de generar riesgos sanitarios. Ese saber, esa responsabilidad, esos valores, Jeromo (¡gracias!) los ha recogido en un manifiesto donde expresa de forma clara al mundo su solidaridad con la causa de todas las campesinas y campesinos del mundo y los valores que orientan su quehacer. Con ese punto precisamente da inicio el manifiesto:
Un valor, la ética por encima de los negocios. Un compromiso, cuidar la tierra, los animales, los ríos, las semillas, los bosques, los ecosistemas, a la vez que produzco alimentos. Una función, producir alimentos sanos y nutritivos para toda la ciudadanía. Una opción de vida antes que una profesión, vivir y mantener las comunidades rurales y campesinas allí donde produzcamos los alimentos. Una cultura y una técnica no neutral, la agroecología, la agricultura campesina y local. Un objetivo, la construcción de la soberanía alimentaria, desde lo local a lo global. Una estrategia, mantener vivas las culturas y los conocimientos campesinos para el manejo de la tierra, el ganado, los ecosistemas, los alimentos, las plantas medicinales. Una táctica, defender la tierra propia con uñas y dientes hasta que ésta sea de todos y todas, o de nadie. Un posicionamiento firme e irrenunciable frente a los cultivos y las semillas transgénicas, los agrocombustibles, los desiertos verdes, la ocupación de suelos de cultivo para urbanizaciones innecesarias, los grandes circuitos para favorecer el absurdo transporte de alimentos de una punta a otra del planeta, la agricultura industrializada y el uso de materias para su práctica. Un enemigo, el neoliberalismo. Un método de lucha, la no violencia y la desobediencia civil. Unos compañeros y compañeras de viaje, los y las sin tierra, los agricultores y agricultoras, los consumidores y consumidoras, y todas las personas que creen que otro mundo es posible.
Jeromo ha sido el primero, ha elaborado el manifiesto, lo ha firmado y lo ha colgado bien visible a la entrada de su finca. Y ahora está circulando entre sus compañeras y compañeros campesinos de todo el planeta, para que repitan el gesto, y se convierta en una causa colectiva. Frente a la agroindustria que sólo se compromete a generar más dividendos a sus accionistas dejando de lado cualquier preocupación social y ecológica, y que es capaz de provocar una crisis sanitaria de carácter global sin ruborizarse tan siquiera, es esperanzador pensar que cuando viajemos por el medio rural encontraremos en las puertas de pequeñas fincas, granjas y huertos carteles impresos con el Compromiso Campesino, para mí, el mejor certificado de producciones limpias. Si hay futuro, es ecológico y campesino.
Nuestra madre Tierra enfermó de gripe. Un cuadro clínico cuyo origen y agudización encontramos en la propagación de una agroindustria poderosa, responsable de la masiva destrucción de la tierra campesina y por ende la desaparición de sus moradores. Pero tenemos una esperanza, porque el campo –a pesar de todo– reserva semillas predispuestas y dispuestas a germinar. Como la iniciativa del Compromiso Campesino (www.compromisocampesino.org) encabezada por Jerónimo Aguado Martínez, campesino, trabajador de la tierra y el ganado en la comarca de Tierra de Campos, Palencia, España.
Cuando me siento a charlar con Jeromo, así le llamamos, siempre acabo pensando que debería tener a mano papel y bolígrafo. Porque la memoria falla y hay mucho que aprender y recordar de todo lo que trasmite Jeromo. Bueno, de lo que explica y de lo que hace, que eso de la coherencia también es algo que proteger. Jeromo te cuenta de su abuela materna que, cuidando tantos hijos que crió, ni tiempo tuvo de ir a ver las tierras de trigo de la familia, pero que nunca –y enfatiza, nunca– permitió que se vendieran. De sus años de militante colaborando con causas campesinas en Nicaragua como cuando fue a una entrega de tierras a pequeños campesinos a cargo de Ernesto Cardenal. O de María José que gestiona un huerto con la única tecnología que le proporcionan sus manos, ecológico mil por mil. Y de su rebaño de 180 ovejas, ni una más, porque la avaricia empobrecería sus tierras y su equilibrio natural. Cordero que paren, cordero vendido entre consumidores locales que saben de la calidad e higiene de ese ganado. Realidades modernas del siglo XXI que te hacen comprender que existen campesinos y campesinas cuya vinculación con la tierra va más allá del ejercicio de una profesión, porque se sienten y son seres vivos que, en colaboración y reciprocidad con la naturaleza, producen vida y alimentos sanos para la sociedad sin necesidad de generar riesgos sanitarios. Ese saber, esa responsabilidad, esos valores, Jeromo (¡gracias!) los ha recogido en un manifiesto donde expresa de forma clara al mundo su solidaridad con la causa de todas las campesinas y campesinos del mundo y los valores que orientan su quehacer. Con ese punto precisamente da inicio el manifiesto:
Un valor, la ética por encima de los negocios. Un compromiso, cuidar la tierra, los animales, los ríos, las semillas, los bosques, los ecosistemas, a la vez que produzco alimentos. Una función, producir alimentos sanos y nutritivos para toda la ciudadanía. Una opción de vida antes que una profesión, vivir y mantener las comunidades rurales y campesinas allí donde produzcamos los alimentos. Una cultura y una técnica no neutral, la agroecología, la agricultura campesina y local. Un objetivo, la construcción de la soberanía alimentaria, desde lo local a lo global. Una estrategia, mantener vivas las culturas y los conocimientos campesinos para el manejo de la tierra, el ganado, los ecosistemas, los alimentos, las plantas medicinales. Una táctica, defender la tierra propia con uñas y dientes hasta que ésta sea de todos y todas, o de nadie. Un posicionamiento firme e irrenunciable frente a los cultivos y las semillas transgénicas, los agrocombustibles, los desiertos verdes, la ocupación de suelos de cultivo para urbanizaciones innecesarias, los grandes circuitos para favorecer el absurdo transporte de alimentos de una punta a otra del planeta, la agricultura industrializada y el uso de materias para su práctica. Un enemigo, el neoliberalismo. Un método de lucha, la no violencia y la desobediencia civil. Unos compañeros y compañeras de viaje, los y las sin tierra, los agricultores y agricultoras, los consumidores y consumidoras, y todas las personas que creen que otro mundo es posible.
Jeromo ha sido el primero, ha elaborado el manifiesto, lo ha firmado y lo ha colgado bien visible a la entrada de su finca. Y ahora está circulando entre sus compañeras y compañeros campesinos de todo el planeta, para que repitan el gesto, y se convierta en una causa colectiva. Frente a la agroindustria que sólo se compromete a generar más dividendos a sus accionistas dejando de lado cualquier preocupación social y ecológica, y que es capaz de provocar una crisis sanitaria de carácter global sin ruborizarse tan siquiera, es esperanzador pensar que cuando viajemos por el medio rural encontraremos en las puertas de pequeñas fincas, granjas y huertos carteles impresos con el Compromiso Campesino, para mí, el mejor certificado de producciones limpias. Si hay futuro, es ecológico y campesino.
CLASE POLITICA.
Diferencias superadas
Miguel Ángel Rivera
El trabajo legislativo de estos días puso de manifiesto que se pueden superar diferencias políticas en bien del país.
Esta actitud deberá seguir en lo que resta de la actual legislatura y sobre todo cuando se instale la nueva Cámara de Diputados, de la cual dependerá definir el gasto federal y, con el Senado, determinar impuestos, así como precios y tarifas de los productos y servicios gubernamentales.
Esto porque el Banco de México pronostica que la caída de la economía será mayor a lo estimado hace unos meses. Ahora se habla de que el PIB podría descender entre 3.8 y 4.8 por ciento, mientras que antes se estimaba entre 0.8 y 1.8 por ciento.
La cosecha
El Senado aprobó reformas al artículo 37 constitucional por las cuales un ciudadano mexicano ya no requiere permiso del Congreso para trabajar al servicio de gobiernos extranjeros o aceptar condecoraciones o títulos de otros países. Sólo se deberá pedir permiso al Ejecutivo federal, que a su vez informará al Senado…
El secretario general del PRI, senador Jesús Murillo, dijo que el calendario electoral no se modifica y sólo se suspenden los actos masivos. Esto implica que se mantiene la fecha del 3 de mayo para el inicio de campañas para renovar la Cámara de Diputados. Además, negó que sea un acto electoral que un candidato del PRI distribuya cubrebocas en Nuevo León, pues en su opinión es un acto de solidaridad…
El PRI del estado de México, que encabeza Ricardo Aguilar Castillo, celebró un convenio con cuatro partidos –Nueva Alianza, Verde Ecologista de México, Social Demócrata y Futuro Democrático– para presentar candidatos comunes en los 125 municipios del estado y de inmediato registraron el acuerdo ante el Instituto Electoral local…
Irene Espinosa Cantellano, graduada en Economía en el ITAM, quien se desempeñaba como subtesorera de Operación de la Tesorería de la Federación desde octubre de 2007, rindió protesta ante el Senado como titular de ese organismo, a propuesta del presidente Felipe Calderón…
El sindicato minero informó que los 420 trabajadores de la sección 142 El Cubo, con sede en la capital de Guanajuato, iniciaron una huelga al no llegar a un acuerdo en la revisión del contrato colectivo…
Como parte de sus acciones para fortalecer su infraestructura en la sonda de Campeche, Pemex anunció que contratará el servicio de instalación de diversos sistemas para aumentar la producción en la región de Ku-Maloob-Zaap…
El presidente de la Comisión de Desarrollo Metropolitano de la Cámara de Diputados, Obdulio Ávila, manifestó su apoyo a la petición de los empresarios de la ciudad de México de que el Fondo Nacional de Desastres incluya a la zona metropolitana del valle de México, ante la emergencia sanitaria que ha derivado en pérdidas diarias por 777 millones de pesos en servicios, comercio y turismo…
riverapaz@prodigy.net.mx
Miguel Ángel Rivera
El trabajo legislativo de estos días puso de manifiesto que se pueden superar diferencias políticas en bien del país.
Esta actitud deberá seguir en lo que resta de la actual legislatura y sobre todo cuando se instale la nueva Cámara de Diputados, de la cual dependerá definir el gasto federal y, con el Senado, determinar impuestos, así como precios y tarifas de los productos y servicios gubernamentales.
Esto porque el Banco de México pronostica que la caída de la economía será mayor a lo estimado hace unos meses. Ahora se habla de que el PIB podría descender entre 3.8 y 4.8 por ciento, mientras que antes se estimaba entre 0.8 y 1.8 por ciento.
La cosecha
El Senado aprobó reformas al artículo 37 constitucional por las cuales un ciudadano mexicano ya no requiere permiso del Congreso para trabajar al servicio de gobiernos extranjeros o aceptar condecoraciones o títulos de otros países. Sólo se deberá pedir permiso al Ejecutivo federal, que a su vez informará al Senado…
El secretario general del PRI, senador Jesús Murillo, dijo que el calendario electoral no se modifica y sólo se suspenden los actos masivos. Esto implica que se mantiene la fecha del 3 de mayo para el inicio de campañas para renovar la Cámara de Diputados. Además, negó que sea un acto electoral que un candidato del PRI distribuya cubrebocas en Nuevo León, pues en su opinión es un acto de solidaridad…
El PRI del estado de México, que encabeza Ricardo Aguilar Castillo, celebró un convenio con cuatro partidos –Nueva Alianza, Verde Ecologista de México, Social Demócrata y Futuro Democrático– para presentar candidatos comunes en los 125 municipios del estado y de inmediato registraron el acuerdo ante el Instituto Electoral local…
Irene Espinosa Cantellano, graduada en Economía en el ITAM, quien se desempeñaba como subtesorera de Operación de la Tesorería de la Federación desde octubre de 2007, rindió protesta ante el Senado como titular de ese organismo, a propuesta del presidente Felipe Calderón…
El sindicato minero informó que los 420 trabajadores de la sección 142 El Cubo, con sede en la capital de Guanajuato, iniciaron una huelga al no llegar a un acuerdo en la revisión del contrato colectivo…
Como parte de sus acciones para fortalecer su infraestructura en la sonda de Campeche, Pemex anunció que contratará el servicio de instalación de diversos sistemas para aumentar la producción en la región de Ku-Maloob-Zaap…
El presidente de la Comisión de Desarrollo Metropolitano de la Cámara de Diputados, Obdulio Ávila, manifestó su apoyo a la petición de los empresarios de la ciudad de México de que el Fondo Nacional de Desastres incluya a la zona metropolitana del valle de México, ante la emergencia sanitaria que ha derivado en pérdidas diarias por 777 millones de pesos en servicios, comercio y turismo…
riverapaz@prodigy.net.mx
EDITORIAL.-----DESINFORMACION, MALTRATO Y ESPECULACION POLITICA.----
Aseis días de anunciada la emergencia sanitaria por el surgimiento de un nuevo virus de influenza, el gobierno federal se empeña en compensar por medio de discursos tranquilizadores y casi triunfalistas la imprevisión, la desorganización y la impericia con la que ha hecho frente a la crisis epidémica. A las indicaciones y contraindicaciones sobre medidas de prevención elemental como el uso de cubrebocas, a la ligereza en el manejo en las cifras de muertes –que, en boca del secretario de Salud federal, José Ángel Córdova Villalobos, disminuyeron de 29 a ocho– y a las colisiones declarativas entre los más altos funcionarios, ha de sumarse la marginación regular, por parte de los funcionarios federales, de la prensa escrita, y el improcedente favoritismo a los medios electrónicos, en lo que constituye una preocupante muestra de incomprensión en torno al funcionamiento complementario de la primera y de los segundos, especialmente en circunstancias críticas como la presente.
El manejo informativo deficiente contribuye a alimentar rumores, desorienta, desalienta y dificulta, en última instancia, la contención de la epidemia. Con todo, en el desempeño gubernamental hay problemas mucho más graves. Por ejemplo, poco a poco han ido saliendo a la luz pública historias sobre la indolencia, el descuido y hasta el maltrato que han sufrido en hospitales del sector salud, en días pasados, pacientes afectados por el nuevo virus, en algunos casos con consecuencias fatales. Tales episodios, narrados a diversos medios informativos por familiares de los enfermos o de los fallecidos, tendrían que ser investigados a fondo y, en su caso, admitidos y sancionados.
En otro sentido, se ha hecho patente la falta de reflejos por parte de la Federación para actuar ante las consecuencias económicas –obligadamente desastrosas– que provocará, y que ya está provocando, el estallido de la epidemia, así como la adopción de medidas para contenerla.
El anuncio de un programa específico orientado a corregir las inocultables carencias del sistema de salud pública y a atenuar las penurias agudizadas por la emergencia sanitaria, así como una explicación de las inconsistencias informativas cometidas hasta ahora, habría sido una buena manera para que el titular del Ejecutivo federal, Felipe Calderón Hinojosa, restañara, en su mensaje de anoche, la erosionada credibilidad de sus colaboradores inmediatos en materia de salud pública.
Sin embargo, el político michoacano optó por minimizar su propio mensaje al reducirlo al anuncio de un asueto oficial que de todos modos se daba por hecho, en el puente del primero al 5 de mayo, y a la presentación de un panorama tranquilizador que, en la presente circunstancia de zozobra y desinformación, carece de sustento. Más preocupante aún, Calderón buscó desautorizar, de manera más bien explícita, la determinación del Gobierno del Distrito Federal de suspender las actividades de los restaurantes en tanto persista la emergencia. El gesto es lamentable por partida triple: porque no se justifica en el contexto de lo dicho por el propio orador horas antes, en el sentido de evitar las aglomeraciones en locales cerrados si éstas no son indispensables, porque se percibe como un intento de aprovechar la crisis para emprender un nuevo golpeteo político contra el gobernante capitalino, Marcelo Ebrard, y porque siembra confusiones y dudas entre la población, en momentos en que el combate a la epidemia requiere de certidumbres, de acciones coordinadas y de una imagen de colaboración entre las autoridades de los distintos niveles de gobierno.
No es el presente un momento oportuno para buscar la descalificación de adversarios políticos, de recurrir al optimismo injustificado para procurar beneficios de imagen ni de perseguir réditos electorales y de popularidad a costa de la eficiencia en las acciones de contención sanitaria. Se requiere, por el contrario, de capacidad de decisión para emprender las medidas suficientes para evitar la continuación de los contagios, por impopulares que éstas resulten –como lo han hecho, a fin de cuentas, las autoridades del Distrito Federal–, y dejar de lado actitudes de especulación política y de promoción de imagen.
El manejo informativo deficiente contribuye a alimentar rumores, desorienta, desalienta y dificulta, en última instancia, la contención de la epidemia. Con todo, en el desempeño gubernamental hay problemas mucho más graves. Por ejemplo, poco a poco han ido saliendo a la luz pública historias sobre la indolencia, el descuido y hasta el maltrato que han sufrido en hospitales del sector salud, en días pasados, pacientes afectados por el nuevo virus, en algunos casos con consecuencias fatales. Tales episodios, narrados a diversos medios informativos por familiares de los enfermos o de los fallecidos, tendrían que ser investigados a fondo y, en su caso, admitidos y sancionados.
En otro sentido, se ha hecho patente la falta de reflejos por parte de la Federación para actuar ante las consecuencias económicas –obligadamente desastrosas– que provocará, y que ya está provocando, el estallido de la epidemia, así como la adopción de medidas para contenerla.
El anuncio de un programa específico orientado a corregir las inocultables carencias del sistema de salud pública y a atenuar las penurias agudizadas por la emergencia sanitaria, así como una explicación de las inconsistencias informativas cometidas hasta ahora, habría sido una buena manera para que el titular del Ejecutivo federal, Felipe Calderón Hinojosa, restañara, en su mensaje de anoche, la erosionada credibilidad de sus colaboradores inmediatos en materia de salud pública.
Sin embargo, el político michoacano optó por minimizar su propio mensaje al reducirlo al anuncio de un asueto oficial que de todos modos se daba por hecho, en el puente del primero al 5 de mayo, y a la presentación de un panorama tranquilizador que, en la presente circunstancia de zozobra y desinformación, carece de sustento. Más preocupante aún, Calderón buscó desautorizar, de manera más bien explícita, la determinación del Gobierno del Distrito Federal de suspender las actividades de los restaurantes en tanto persista la emergencia. El gesto es lamentable por partida triple: porque no se justifica en el contexto de lo dicho por el propio orador horas antes, en el sentido de evitar las aglomeraciones en locales cerrados si éstas no son indispensables, porque se percibe como un intento de aprovechar la crisis para emprender un nuevo golpeteo político contra el gobernante capitalino, Marcelo Ebrard, y porque siembra confusiones y dudas entre la población, en momentos en que el combate a la epidemia requiere de certidumbres, de acciones coordinadas y de una imagen de colaboración entre las autoridades de los distintos niveles de gobierno.
No es el presente un momento oportuno para buscar la descalificación de adversarios políticos, de recurrir al optimismo injustificado para procurar beneficios de imagen ni de perseguir réditos electorales y de popularidad a costa de la eficiencia en las acciones de contención sanitaria. Se requiere, por el contrario, de capacidad de decisión para emprender las medidas suficientes para evitar la continuación de los contagios, por impopulares que éstas resulten –como lo han hecho, a fin de cuentas, las autoridades del Distrito Federal–, y dejar de lado actitudes de especulación política y de promoción de imagen.
miércoles, 29 de abril de 2009
MANUEL CAMACHO SOLIS
Lo que he vivido
29 de abril de 2009
Una llamada de Jorge Zepeda me puso a escribir. Después de preguntar sobre mi estado de salud me sugiere, “ya como periodista”, escribir sobre mi experiencia como paciente de influenza. Acepto.
Martes 21. Desde la mañana sentí síntomas parecidos a una gripa fuerte, pero ya para la noche, después de haber ido a una comida, el malestar se acentuó: escalofríos, más de 39 grados de temperatura, falta completa de apetito. Pensé que con un buen sueño amanecería mejor. No fue así.
Miércoles 22. Siguió el cuadro. Era tan fuerte que, para la tarde, acepté me pusieran una inyección de un antibiótico potente. La noche volvió a ser pesada; cuatro veces me tuve que cambiar de ropa porque estaba empapado en sudor.
Jueves 23. Esperaba que el antibiótico hubiera hecho efecto, pero no. No había leído la prensa para enterarme de la epidemia de influenza, pero mi esposa me puso en contacto con una amiga que la había vivido hace meses en Oaxaca, me la refirió como el flu (que yo había vivido en mi adolescencia en Estados Unidos y sabía era simplemente un gripa más fuerte). Pero como el malestar aumentó y empecé a sentir síntomas como los que había vivido hace treinta años con una salmonelosis fuerte, llamé a mi esposa. Me propuso llevarme con el especialista, con el doctor César Decanini, a su consultorio del Hospital Inglés. Nunca imaginé que horas más tarde sería internado. En cuanto me revisó me dijo: yo creo que es influenza. Buscó al especialista. Me sugirieron me hiciera una serie de estudios.
Jueves por la noche. Pruebas de sangre, radiografías, tomografía, suero, medición de la capacidad respiratoria. A las 10:00 p.m., en un cubículo de emergencias, con Mónica, Lupita y ya con la presencia de mi hermano Rafael, me rodea con tapabocas el equipo médico. Toma la palabra el prestigiado médico neumólogo Eulo Lupi, quien me informa que debo hospitalizarme: “Su capacidad respiratoria está disminuida en 50% y en los cortes de la tomografía vemos que sus pulmones se están deteriorando con rapidez”. Todavía me atrevo a decirle, porque eso deseaba y para confirmar la gravedad del diagnóstico: que qué pasa si me regreso a mi casa. Fija su vista, mira a los otros médicos y con autoridad, enfáticamente, me dice: “Sus médicos le sugerimos no lo haga, por su seguridad y la de su familia. De ahí al último cubículo de terapia intensiva. Por suerte, Decanini tenía en su consultorio una caja del antiviral indicado; tomé la primera pastilla.
Viernes 24 en la madrugada. En mi nuevo cuarto (TI) cobré conciencia de que tenía una enfermedad grave (“estuvimos a horas de tener que entubarte, etcétera”) que podría, incluso, llevarme a la muerte. Como sé que suelo ser un mal enfermo (me enojo fácilmente y hasta reacciono mal) decidí que ahora no podía darme ese lujo. No obstante, de repente se me venían encima pensamientos destructivos (¿y si algo me pasa?; balances rápidos sobre el pasado y todo en medio de un repiqueteo de alarmas que no dejaron de sonar toda la noche, al grado de que el único aliento era sentir el apretón sobre el antebrazo de la banda tomadora de presión y el sonar de su bomba de aire. Prácticamente no pude dormir.
Cuando amaneció empecé a ver el primer rayo de luz. Por la ventana se observaban unos árboles que me parecieron hermosos. La enfermera encargada era en extremo profesional y cuidadosa; me levantaba el ánimo observar su pericia y dedicación. Me tomaron las pruebas de sangre y la placa. Pero lo más importante, el doctor Hugo Zulaica, connotado especialista en infecciones, me dijo: “Empiezo a estar más tranquilo. Creo que se está frenando el proceso y eso, en estos casos, es todo: el antiviral es una maravilla, pues en sólo 12 horas ya está haciendo efecto. Él y el doctor Lupi pensaban que el tratamiento debería ser para el virus (influenza) y con dosis fuertes de un antibiótico especial, para unas bacterias que consideraban estaban actuando junto con el virus. Le dieron al clavo.
Sábado 25, todo parecía que estaba estabilizado, pero no se podía cantar victoria. Ahí en ese cuarto, pedí mi computadora para escribir mi artículo del lunes, esa noche. Lo hice en las condiciones más adversas, inmovilizado entre alambres, sondas, alarmas, y sin lentes, con uno o dos dedos. Me costó trabajo, pero me sirvió de terapia. Ya no pensé en la enfermedad.
Domingo 26. Primeros síntomas de mejoría. Me trasladan a la zona de terapia intermedia.
Lunes 27. “Va usted mejor. Se están empezando a despejar sus pulmones, aunque todavía hay ruidos”. Son procesos lentos. Por la tarde me hacen una prueba de resistencia y me quitan el oxígeno.
Martes 28. Mejoría clara. Me ponen a caminar para medir mi oxigenación. Maravilloso, ya sin oxígeno está entre 90 y 95 (de 100). Me anuncian que si todo sigue igual podría salir el miércoles, aunque necesitaré dos semanas más de medicamentos y cuidados, pero con el gran aliento de que “se recuperará completamente”.
Miércoles 29, espero ser dado de alta.
La salud recuperada, la competencia de los médicos y enfermeras, el enorme cariño de la familia, la oportunidad de leer, la solidaridad de muchos amigos (más de los que hubiera esperado), han compensado con mucho los sinsabores de este capítulo de mi vida. Lo que no deja de lastimarme, de darme tristeza, es pensar en los otros que están viviendo circunstancias parecidas, y sobre todo, en las familias de quienes murieron. Que esta experiencia nos sirva a todos para humanizarnos y para confirmar el grado de responsabilidad colectiva de los ciudadanos que permite en nuestra ciudad hacer cosas que difícilmente se podrían hacer en otras metrópolis.
29 de abril de 2009
Una llamada de Jorge Zepeda me puso a escribir. Después de preguntar sobre mi estado de salud me sugiere, “ya como periodista”, escribir sobre mi experiencia como paciente de influenza. Acepto.
Martes 21. Desde la mañana sentí síntomas parecidos a una gripa fuerte, pero ya para la noche, después de haber ido a una comida, el malestar se acentuó: escalofríos, más de 39 grados de temperatura, falta completa de apetito. Pensé que con un buen sueño amanecería mejor. No fue así.
Miércoles 22. Siguió el cuadro. Era tan fuerte que, para la tarde, acepté me pusieran una inyección de un antibiótico potente. La noche volvió a ser pesada; cuatro veces me tuve que cambiar de ropa porque estaba empapado en sudor.
Jueves 23. Esperaba que el antibiótico hubiera hecho efecto, pero no. No había leído la prensa para enterarme de la epidemia de influenza, pero mi esposa me puso en contacto con una amiga que la había vivido hace meses en Oaxaca, me la refirió como el flu (que yo había vivido en mi adolescencia en Estados Unidos y sabía era simplemente un gripa más fuerte). Pero como el malestar aumentó y empecé a sentir síntomas como los que había vivido hace treinta años con una salmonelosis fuerte, llamé a mi esposa. Me propuso llevarme con el especialista, con el doctor César Decanini, a su consultorio del Hospital Inglés. Nunca imaginé que horas más tarde sería internado. En cuanto me revisó me dijo: yo creo que es influenza. Buscó al especialista. Me sugirieron me hiciera una serie de estudios.
Jueves por la noche. Pruebas de sangre, radiografías, tomografía, suero, medición de la capacidad respiratoria. A las 10:00 p.m., en un cubículo de emergencias, con Mónica, Lupita y ya con la presencia de mi hermano Rafael, me rodea con tapabocas el equipo médico. Toma la palabra el prestigiado médico neumólogo Eulo Lupi, quien me informa que debo hospitalizarme: “Su capacidad respiratoria está disminuida en 50% y en los cortes de la tomografía vemos que sus pulmones se están deteriorando con rapidez”. Todavía me atrevo a decirle, porque eso deseaba y para confirmar la gravedad del diagnóstico: que qué pasa si me regreso a mi casa. Fija su vista, mira a los otros médicos y con autoridad, enfáticamente, me dice: “Sus médicos le sugerimos no lo haga, por su seguridad y la de su familia. De ahí al último cubículo de terapia intensiva. Por suerte, Decanini tenía en su consultorio una caja del antiviral indicado; tomé la primera pastilla.
Viernes 24 en la madrugada. En mi nuevo cuarto (TI) cobré conciencia de que tenía una enfermedad grave (“estuvimos a horas de tener que entubarte, etcétera”) que podría, incluso, llevarme a la muerte. Como sé que suelo ser un mal enfermo (me enojo fácilmente y hasta reacciono mal) decidí que ahora no podía darme ese lujo. No obstante, de repente se me venían encima pensamientos destructivos (¿y si algo me pasa?; balances rápidos sobre el pasado y todo en medio de un repiqueteo de alarmas que no dejaron de sonar toda la noche, al grado de que el único aliento era sentir el apretón sobre el antebrazo de la banda tomadora de presión y el sonar de su bomba de aire. Prácticamente no pude dormir.
Cuando amaneció empecé a ver el primer rayo de luz. Por la ventana se observaban unos árboles que me parecieron hermosos. La enfermera encargada era en extremo profesional y cuidadosa; me levantaba el ánimo observar su pericia y dedicación. Me tomaron las pruebas de sangre y la placa. Pero lo más importante, el doctor Hugo Zulaica, connotado especialista en infecciones, me dijo: “Empiezo a estar más tranquilo. Creo que se está frenando el proceso y eso, en estos casos, es todo: el antiviral es una maravilla, pues en sólo 12 horas ya está haciendo efecto. Él y el doctor Lupi pensaban que el tratamiento debería ser para el virus (influenza) y con dosis fuertes de un antibiótico especial, para unas bacterias que consideraban estaban actuando junto con el virus. Le dieron al clavo.
Sábado 25, todo parecía que estaba estabilizado, pero no se podía cantar victoria. Ahí en ese cuarto, pedí mi computadora para escribir mi artículo del lunes, esa noche. Lo hice en las condiciones más adversas, inmovilizado entre alambres, sondas, alarmas, y sin lentes, con uno o dos dedos. Me costó trabajo, pero me sirvió de terapia. Ya no pensé en la enfermedad.
Domingo 26. Primeros síntomas de mejoría. Me trasladan a la zona de terapia intermedia.
Lunes 27. “Va usted mejor. Se están empezando a despejar sus pulmones, aunque todavía hay ruidos”. Son procesos lentos. Por la tarde me hacen una prueba de resistencia y me quitan el oxígeno.
Martes 28. Mejoría clara. Me ponen a caminar para medir mi oxigenación. Maravilloso, ya sin oxígeno está entre 90 y 95 (de 100). Me anuncian que si todo sigue igual podría salir el miércoles, aunque necesitaré dos semanas más de medicamentos y cuidados, pero con el gran aliento de que “se recuperará completamente”.
Miércoles 29, espero ser dado de alta.
La salud recuperada, la competencia de los médicos y enfermeras, el enorme cariño de la familia, la oportunidad de leer, la solidaridad de muchos amigos (más de los que hubiera esperado), han compensado con mucho los sinsabores de este capítulo de mi vida. Lo que no deja de lastimarme, de darme tristeza, es pensar en los otros que están viviendo circunstancias parecidas, y sobre todo, en las familias de quienes murieron. Que esta experiencia nos sirva a todos para humanizarnos y para confirmar el grado de responsabilidad colectiva de los ciudadanos que permite en nuestra ciudad hacer cosas que difícilmente se podrían hacer en otras metrópolis.
ASTILLERO.
Granjas México
Carroll, un ejemplo
¿Préstamos?: virus HSxHS
Julio Hernández López
CERCO SANITARIO. En la Cámara de Diputados se observó baja asistencia de empleados y no se aceptaron visitantes; el salón de plenos se mantuvo cerrado durante la sesión. En la imagen, el personal de seguridad es desinfectadoFoto José Antonio López
Los mexicanos son diariamente afectados en su salud por la producción de carnes y vegetales que son estimulados en su crecimiento, durabilidad y aspecto mediante agentes químicos sabidamente dañinos que son utilizados impune y criminalmente por los grandes comercializadores que suelen ser patrocinadores de campañas políticas de quienes (a título de cualquier partido) están en el poder y donadores” generosos a las cuentas particulares de la patológica clase política multicolor que en estos momentos cruciales padece el país.
Un ejemplo altamente significativo son las Granjas Carroll (GC) instaladas en 1994 en el valle de Perote, Veracruz, mediante una sociedad formada por Agroindustrias de México y la principal firma estadunidense productora de cerdos, Smithfield. Con un pie de cría de 40 mil vientres, GC produce al año alrededor de 800 mil puercos, de tal manera que es una de las tres principales empresas del ramo en México. Los métodos de trabajo de la trasnacional han provocado mútiples protestas debido a la evidente contaminación material que provocan con los residuos y desperdicios de su proceso pero, sobre todo, por los constantes problemas de salud que los ocupantes de las cercanías han estado padeciendo y de cuya responsabilidad se deslinda activamente la citada empresa, a cuyos postulados de inocencia se han abierto procesos judiciales contra ciudadanos que han encabezado movimientos de oposición a la firma cuyo componente estadunidense, Smithfield, recibió en 1985 el castigo por un litigio del ámbito civil más cuantioso de los registros gringos por violaciones al Acta de Agua Limpia: un millón 285 mil dólares; en 1996, un juez sentenció a pagar 12.6 millones de dólares y a cumplir 18 meses de arresto a un gerente de Smithfield y a uno de sus operadores por falsificar y destruir muestras registradas y por la descarga intencional de agua tóxica en el río Pagan.
En México, desde luego, esos inversionistas fueron recibidos con las chequeras particulares abiertas por distintos funcionarios que aun cambiando de nombres, partidos y temporalidad en el poder, les han garantizado impunidad y protección. El gobierno calderónico y el políticamente nigérrimo de Veracruz han protegido a Granjas Carroll y se han desatendido de las múltiples denuncias (difundidas oportunamente por Andrés Timoteo, corresponsal de La Jornada en Veracruz) que llevaron el pasado 2 de abril a que hubiera constancia pública internacional de los riesgos de salud que allí se gestaban y que enfermaron de manera inusual, sospechosa, a unos 400 de los tres mil habitantes del poblado irónicamente llamado La Gloria. El brote extraordinario de gripe y neumonía, y las versiones de autoridades comunales sobre la muerte de menores de edad, no movieron a las autoridades mexicanas (ni modo de llevarse una comisión en asuntos económicante tan menores) a indagar nada, a pesar de que un despacho gringo de biovigilancia, Veratect, advirtió de los hechos a la Organización Mundial de la Salud (otro de esos entes mutantes de la economía y el mercado dominados por las grandes firmas). El caso de las Granjas Carroll ha llevado a Internet diversas interpretaciones que creen encontrar allí el origen de las mutaciones que han causado la crisis sanitaria en curso.
Por otra parte, haiga sido por lo que haiga sido (virus HSxHS), el agravamiento en México de una crisis sanitaria crea las condiciones para que sean usados bajo criterios discrecionales de emergencia los préstamos de “blindaje” genérico adquiridos recientemente y el muy específico de 205 millones de dólares. Nadie sabe ¿y nadie sabrá? cómo se están gastando los dineros públicos en el torbellino inducido de miedo social ni quiénes son y serán los beneficiados con las compras y gastos gubernamentales hechos en el marco propicio del pánico decretado.
El mismo virus HSxHS (escatológico, de duración presuntamente sexenal, que puede ser contagiado a través de tapaojos y tapaoídos electrónicos como son la mayoría de los noticieros de radio y televisión) ha afectado severamente al de por sí maltrecho y anémico cuerpo electoral que presuntamente habría de dar a luz el próximo julio una criatura legislativa federal (con variantes en ciertas entidades donde se elegirán gobernadores, presidentes municipales y congresos locales) a la que desde ahora se apresuraban algunos Padrinos a dar por vestida principalmente con telas de tres colores (debidamente contrastadas con abundantes pero no mayoritarios toques de blanco y azul). El golpe epidemiológico ha hecho trastabillar los procesos partidistas de arranque de campañas, ha desinflado al extremo los de por sí lánguidos ánimos de participación electoral, e incluso está llevando a considerar la aparición en el menú del platillo que resulta más apetitoso para la desfondada banda panista: la posibilidad de cancelar o posponer los comicios en porcina puerta que, de cualquier manera, ya han sido contagiados porque la capacitación electoral a cargo del IFE no se ha podido completar y porque la continuidad del proceso ya no se puede garantizar. La dictadura, o cuando menos sus tentaciones sanitarias.
Astillas
Porcinas dudas: ¿Por qué se insiste en que la población asuma fórmulas de sometimiento masivo como el uso de los azules tapabocas si los propios especialistas consultados constantemente en noticieros televisos aseguran que no es la vía aérea la que propicia más riesgos de contagio sino el contacto manual que en todo caso impulsaría a promover el uso de guantes y no de trozos de tela que sólo servirían frente a secreciones hechas a corta distancia por enfermos?.. Y, mientras esta columna ha de cerrarse antes de que dieran nocturna conferencia de prensa los funcionarios federales encabezados por José Ángel Córdova, ¡hasta mañana, con la “guerra” contra el narcotráfico en una especie de tregua que da paso, en tanto las mayorías ven para epidémicos lados, a la autorización legislativa para la portación de pequeñas dosis de sustancias estupefacientes!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
Carroll, un ejemplo
¿Préstamos?: virus HSxHS
Julio Hernández López
CERCO SANITARIO. En la Cámara de Diputados se observó baja asistencia de empleados y no se aceptaron visitantes; el salón de plenos se mantuvo cerrado durante la sesión. En la imagen, el personal de seguridad es desinfectadoFoto José Antonio López
Los mexicanos son diariamente afectados en su salud por la producción de carnes y vegetales que son estimulados en su crecimiento, durabilidad y aspecto mediante agentes químicos sabidamente dañinos que son utilizados impune y criminalmente por los grandes comercializadores que suelen ser patrocinadores de campañas políticas de quienes (a título de cualquier partido) están en el poder y donadores” generosos a las cuentas particulares de la patológica clase política multicolor que en estos momentos cruciales padece el país.
Un ejemplo altamente significativo son las Granjas Carroll (GC) instaladas en 1994 en el valle de Perote, Veracruz, mediante una sociedad formada por Agroindustrias de México y la principal firma estadunidense productora de cerdos, Smithfield. Con un pie de cría de 40 mil vientres, GC produce al año alrededor de 800 mil puercos, de tal manera que es una de las tres principales empresas del ramo en México. Los métodos de trabajo de la trasnacional han provocado mútiples protestas debido a la evidente contaminación material que provocan con los residuos y desperdicios de su proceso pero, sobre todo, por los constantes problemas de salud que los ocupantes de las cercanías han estado padeciendo y de cuya responsabilidad se deslinda activamente la citada empresa, a cuyos postulados de inocencia se han abierto procesos judiciales contra ciudadanos que han encabezado movimientos de oposición a la firma cuyo componente estadunidense, Smithfield, recibió en 1985 el castigo por un litigio del ámbito civil más cuantioso de los registros gringos por violaciones al Acta de Agua Limpia: un millón 285 mil dólares; en 1996, un juez sentenció a pagar 12.6 millones de dólares y a cumplir 18 meses de arresto a un gerente de Smithfield y a uno de sus operadores por falsificar y destruir muestras registradas y por la descarga intencional de agua tóxica en el río Pagan.
En México, desde luego, esos inversionistas fueron recibidos con las chequeras particulares abiertas por distintos funcionarios que aun cambiando de nombres, partidos y temporalidad en el poder, les han garantizado impunidad y protección. El gobierno calderónico y el políticamente nigérrimo de Veracruz han protegido a Granjas Carroll y se han desatendido de las múltiples denuncias (difundidas oportunamente por Andrés Timoteo, corresponsal de La Jornada en Veracruz) que llevaron el pasado 2 de abril a que hubiera constancia pública internacional de los riesgos de salud que allí se gestaban y que enfermaron de manera inusual, sospechosa, a unos 400 de los tres mil habitantes del poblado irónicamente llamado La Gloria. El brote extraordinario de gripe y neumonía, y las versiones de autoridades comunales sobre la muerte de menores de edad, no movieron a las autoridades mexicanas (ni modo de llevarse una comisión en asuntos económicante tan menores) a indagar nada, a pesar de que un despacho gringo de biovigilancia, Veratect, advirtió de los hechos a la Organización Mundial de la Salud (otro de esos entes mutantes de la economía y el mercado dominados por las grandes firmas). El caso de las Granjas Carroll ha llevado a Internet diversas interpretaciones que creen encontrar allí el origen de las mutaciones que han causado la crisis sanitaria en curso.
Por otra parte, haiga sido por lo que haiga sido (virus HSxHS), el agravamiento en México de una crisis sanitaria crea las condiciones para que sean usados bajo criterios discrecionales de emergencia los préstamos de “blindaje” genérico adquiridos recientemente y el muy específico de 205 millones de dólares. Nadie sabe ¿y nadie sabrá? cómo se están gastando los dineros públicos en el torbellino inducido de miedo social ni quiénes son y serán los beneficiados con las compras y gastos gubernamentales hechos en el marco propicio del pánico decretado.
El mismo virus HSxHS (escatológico, de duración presuntamente sexenal, que puede ser contagiado a través de tapaojos y tapaoídos electrónicos como son la mayoría de los noticieros de radio y televisión) ha afectado severamente al de por sí maltrecho y anémico cuerpo electoral que presuntamente habría de dar a luz el próximo julio una criatura legislativa federal (con variantes en ciertas entidades donde se elegirán gobernadores, presidentes municipales y congresos locales) a la que desde ahora se apresuraban algunos Padrinos a dar por vestida principalmente con telas de tres colores (debidamente contrastadas con abundantes pero no mayoritarios toques de blanco y azul). El golpe epidemiológico ha hecho trastabillar los procesos partidistas de arranque de campañas, ha desinflado al extremo los de por sí lánguidos ánimos de participación electoral, e incluso está llevando a considerar la aparición en el menú del platillo que resulta más apetitoso para la desfondada banda panista: la posibilidad de cancelar o posponer los comicios en porcina puerta que, de cualquier manera, ya han sido contagiados porque la capacitación electoral a cargo del IFE no se ha podido completar y porque la continuidad del proceso ya no se puede garantizar. La dictadura, o cuando menos sus tentaciones sanitarias.
Astillas
Porcinas dudas: ¿Por qué se insiste en que la población asuma fórmulas de sometimiento masivo como el uso de los azules tapabocas si los propios especialistas consultados constantemente en noticieros televisos aseguran que no es la vía aérea la que propicia más riesgos de contagio sino el contacto manual que en todo caso impulsaría a promover el uso de guantes y no de trozos de tela que sólo servirían frente a secreciones hechas a corta distancia por enfermos?.. Y, mientras esta columna ha de cerrarse antes de que dieran nocturna conferencia de prensa los funcionarios federales encabezados por José Ángel Córdova, ¡hasta mañana, con la “guerra” contra el narcotráfico en una especie de tregua que da paso, en tanto las mayorías ven para epidémicos lados, a la autorización legislativa para la portación de pequeñas dosis de sustancias estupefacientes!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
MEXICO S.A.
Crisis de salud agrava más la situación económica
El gobierno de México garantiza dólares a corporativos
Carlos Fernández-Vega
Una emergencia nacional, la sanitaria, momentáneamente eclipsó a la otra gran sacudida nacional, la económica, pero dada la proporción de la primera y la magnitud de la segunda ambas comenzaron a caminar de la mano. Y no es para menos, porque si bien la información relativa a la epidemia domina la oferta de los medios de comunicación y concentra la atención de los ciudadanos, la de carácter económico no deja de sacudir a este heroico país.
Transcurrida casi una semana desde que la autoridad sanitaria declaró la emergencia sanitaria con motivo de la influenza porcina, la realidad económica aparentemente pasó a una muy alejada segunda posición, por mucho que cotidianamente a la ciudadanía le cale hasta los huesos. Aún así, el Inegi se encarga de reubicar la ingrata información de carácter económico, tal como lo hizo ayer al divulgar que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) se desplomó 10.8 por ciento en términos reales durante febrero pasado, en comparación con igual mes de 2008, el mismo índice que en enero del presente año reportó una caída de 9.3 por ciento.
Así, la actividad económica en el país acumula cinco meses al hilo de desplome (octubre de 2008 a febrero de 2009), sin considerar que en agosto del año anterior el resultado fue de cero por ciento, lo que da cuerpo, por si hubiera alguna duda, a la emergencia que intenta ser opacada por la sanitaria, cuando en realidad ambas van de la mano. El resultado oficial en febrero pasado hace retroceder el IGAE a un nivel no reportado desde enero de 2005, lo que da idea del efecto real que este catarrito ha tenido en la actividad económica del país.
Para el segundo mes de 2009, el Inegi precisa que el desempeño negativo de la actividad económica de México fue producto de la caída en sus tres grandes grupos de actividades: las secundarias se desplomaron 13.2 por ciento; las terciarias 9.6 por ciento y las primarias 7.1 por ciento. Como bien lo precisa el propio organismo, el IGAE incorpora información preliminar y no incluye la totalidad de las actividades que integran el PIB trimestral, por lo que debe considerarse como un indicador de tendencia o dirección de la economía mexicana en el corto plazo. Falta sumar los efectos económicos de la emergencia sanitaria, aunque éstos condicionarán el comportamiento de los resultados para el segundo trimestre del año.
El detalle, de acuerdo con el Inegi, dice así: con información preliminar de la Sagarpa, las actividades primarias (que incluyen a la agricultura y ganadería) cayeron 7.1 por ciento a tasa anual durante el segundo mes de 2009, debido al retroceso reportado en la agricultura como consecuencia de la menor superficie sembrada en el ciclo otoño-invierno y de la cosechada en el primavera-verano, lo que derivó en una disminución de la producción de cultivos como: sorgo y trigo en grano, caña de azúcar, papa, alfalfa verde, cebada en grano, sorgo forrajero, chile y tomate verde, café cereza y tomate rojo. Por su parte, la ganadería presentó un aumento anual en el mes en cuestión.
Por lo que toca a las actividades secundarias (minería; electricidad, agua y suministro de gas por ductos al consumidor final; construcción e industrias manufactureras) se desplomaron 13.2 por ciento en términos reales en el segundo mes de este año respecto de febrero de 2008. Este comportamiento se derivó de las disminuciones mostradas en la mayoría de los subsectores que las integran, destacando las caídas de equipo de transporte; edificación; extracción de petróleo y gas; equipo de computación, comunicación, medición y de otros equipos, componentes y accesorios electrónicos; industrias metálicas básicas; productos a base de minerales no metálicos; productos metálicos; industria química; equipo de generación eléctrica y aparatos y accesorios eléctricos; maquinaria y equipo, y trabajos especializados para la construcción, entre otros.
Las actividades terciarias registraron una caída de 9.6 por ciento. Dicha evolución fue resultado de los decrementos reportados en el comercio; servicios inmobiliarios; autotransporte de carga; instituciones de intermediación crediticia y financiera no bursátil; servicios profesionales, científicos, técnicos, de alojamiento temporal, relacionados con el transporte, de preparación de alimentos y bebidas, y educativos, básicamente.
Ese es el panorama documentado por el Inegi. Como se observa, nada tiene que ver con los signos alentadores que Calderón dice ver, pero que nadie registra por ninguna parte. Sin duda, por mucho que desde Los Pinos se pretenda minimizar, la situación económica es de emergencia nacional, la cual se ve robustecida por la otra emergencia, la sanitaria, que independientemente de su lamentable cuota fatal ha obligado a poner en marcha una seria de acciones que repercutirán negativamente en la propia actividad económica y en lo socialmente más elemental, el empleo.
De hecho, la decisión del gobierno capitalino de, entre otras, cerrar los restaurantes –aunque éstos surtan pedidos a domicilio o para llevar– pone en el filo de la navaja a cerca de 450 mil personas (jefes de familia la mayoría de ellos) que en el Distrito Federal se ocupan en y obtienen sus ingresos de tal actividad. Y la cifra tiende a incrementarse nacionalmente, en la medida en que la epidemia aumenta su intensidad y las autoridades sanitarias sus decisiones para acotarla lo más posible.
Las rebanadas del pastel
Prioridades son prioridades: mientras en México el gobierno calderonista actúa rápidamente para rescatar a las grandes empresas privadas y se esfuerza para conseguirles dolaritos baratos, como los 30 mil millones de billetes verdes obtenidos por el Banco de México, vía líneas swap con la Reserva Federal del vecino del norte, para proveer financiamientos a participantes del sector privado que enfrenten presiones para obtener recursos en dólares a plazo, en Estados Unidos el presidente Barack Obama solicita urgentemente al Congreso de su país una partida presupuestal de mil 500 millones de dólares para luchar contra el brote de fiebre porcina en el país, con 64 casos confirmados, acumular fármacos contra la enfermedad y reforzar las labores de supervisión; se trata de fortalecer la capacidad de nuestro país para responder el potencial avance de este brote; estos fondos deberán aportarse con máxima flexibilidad para permitirnos hacer frente a esta situación de emergencia. Más claro, el agua.
cfvmexico_sa@hotmail.com • mexicosa@infinitum.com.mx
El gobierno de México garantiza dólares a corporativos
Carlos Fernández-Vega
Una emergencia nacional, la sanitaria, momentáneamente eclipsó a la otra gran sacudida nacional, la económica, pero dada la proporción de la primera y la magnitud de la segunda ambas comenzaron a caminar de la mano. Y no es para menos, porque si bien la información relativa a la epidemia domina la oferta de los medios de comunicación y concentra la atención de los ciudadanos, la de carácter económico no deja de sacudir a este heroico país.
Transcurrida casi una semana desde que la autoridad sanitaria declaró la emergencia sanitaria con motivo de la influenza porcina, la realidad económica aparentemente pasó a una muy alejada segunda posición, por mucho que cotidianamente a la ciudadanía le cale hasta los huesos. Aún así, el Inegi se encarga de reubicar la ingrata información de carácter económico, tal como lo hizo ayer al divulgar que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) se desplomó 10.8 por ciento en términos reales durante febrero pasado, en comparación con igual mes de 2008, el mismo índice que en enero del presente año reportó una caída de 9.3 por ciento.
Así, la actividad económica en el país acumula cinco meses al hilo de desplome (octubre de 2008 a febrero de 2009), sin considerar que en agosto del año anterior el resultado fue de cero por ciento, lo que da cuerpo, por si hubiera alguna duda, a la emergencia que intenta ser opacada por la sanitaria, cuando en realidad ambas van de la mano. El resultado oficial en febrero pasado hace retroceder el IGAE a un nivel no reportado desde enero de 2005, lo que da idea del efecto real que este catarrito ha tenido en la actividad económica del país.
Para el segundo mes de 2009, el Inegi precisa que el desempeño negativo de la actividad económica de México fue producto de la caída en sus tres grandes grupos de actividades: las secundarias se desplomaron 13.2 por ciento; las terciarias 9.6 por ciento y las primarias 7.1 por ciento. Como bien lo precisa el propio organismo, el IGAE incorpora información preliminar y no incluye la totalidad de las actividades que integran el PIB trimestral, por lo que debe considerarse como un indicador de tendencia o dirección de la economía mexicana en el corto plazo. Falta sumar los efectos económicos de la emergencia sanitaria, aunque éstos condicionarán el comportamiento de los resultados para el segundo trimestre del año.
El detalle, de acuerdo con el Inegi, dice así: con información preliminar de la Sagarpa, las actividades primarias (que incluyen a la agricultura y ganadería) cayeron 7.1 por ciento a tasa anual durante el segundo mes de 2009, debido al retroceso reportado en la agricultura como consecuencia de la menor superficie sembrada en el ciclo otoño-invierno y de la cosechada en el primavera-verano, lo que derivó en una disminución de la producción de cultivos como: sorgo y trigo en grano, caña de azúcar, papa, alfalfa verde, cebada en grano, sorgo forrajero, chile y tomate verde, café cereza y tomate rojo. Por su parte, la ganadería presentó un aumento anual en el mes en cuestión.
Por lo que toca a las actividades secundarias (minería; electricidad, agua y suministro de gas por ductos al consumidor final; construcción e industrias manufactureras) se desplomaron 13.2 por ciento en términos reales en el segundo mes de este año respecto de febrero de 2008. Este comportamiento se derivó de las disminuciones mostradas en la mayoría de los subsectores que las integran, destacando las caídas de equipo de transporte; edificación; extracción de petróleo y gas; equipo de computación, comunicación, medición y de otros equipos, componentes y accesorios electrónicos; industrias metálicas básicas; productos a base de minerales no metálicos; productos metálicos; industria química; equipo de generación eléctrica y aparatos y accesorios eléctricos; maquinaria y equipo, y trabajos especializados para la construcción, entre otros.
Las actividades terciarias registraron una caída de 9.6 por ciento. Dicha evolución fue resultado de los decrementos reportados en el comercio; servicios inmobiliarios; autotransporte de carga; instituciones de intermediación crediticia y financiera no bursátil; servicios profesionales, científicos, técnicos, de alojamiento temporal, relacionados con el transporte, de preparación de alimentos y bebidas, y educativos, básicamente.
Ese es el panorama documentado por el Inegi. Como se observa, nada tiene que ver con los signos alentadores que Calderón dice ver, pero que nadie registra por ninguna parte. Sin duda, por mucho que desde Los Pinos se pretenda minimizar, la situación económica es de emergencia nacional, la cual se ve robustecida por la otra emergencia, la sanitaria, que independientemente de su lamentable cuota fatal ha obligado a poner en marcha una seria de acciones que repercutirán negativamente en la propia actividad económica y en lo socialmente más elemental, el empleo.
De hecho, la decisión del gobierno capitalino de, entre otras, cerrar los restaurantes –aunque éstos surtan pedidos a domicilio o para llevar– pone en el filo de la navaja a cerca de 450 mil personas (jefes de familia la mayoría de ellos) que en el Distrito Federal se ocupan en y obtienen sus ingresos de tal actividad. Y la cifra tiende a incrementarse nacionalmente, en la medida en que la epidemia aumenta su intensidad y las autoridades sanitarias sus decisiones para acotarla lo más posible.
Las rebanadas del pastel
Prioridades son prioridades: mientras en México el gobierno calderonista actúa rápidamente para rescatar a las grandes empresas privadas y se esfuerza para conseguirles dolaritos baratos, como los 30 mil millones de billetes verdes obtenidos por el Banco de México, vía líneas swap con la Reserva Federal del vecino del norte, para proveer financiamientos a participantes del sector privado que enfrenten presiones para obtener recursos en dólares a plazo, en Estados Unidos el presidente Barack Obama solicita urgentemente al Congreso de su país una partida presupuestal de mil 500 millones de dólares para luchar contra el brote de fiebre porcina en el país, con 64 casos confirmados, acumular fármacos contra la enfermedad y reforzar las labores de supervisión; se trata de fortalecer la capacidad de nuestro país para responder el potencial avance de este brote; estos fondos deberán aportarse con máxima flexibilidad para permitirnos hacer frente a esta situación de emergencia. Más claro, el agua.
cfvmexico_sa@hotmail.com • mexicosa@infinitum.com.mx
BAJO LA LUPA.
La globalización y sus catástrofes: del narco a la influenza
Alfredo Jalife-Rahme
Antecedentes: Hace cuatro años fueron abordados por Bajo la Lupa la militarización de los virus y su gran negocio farmacológico (2/10 y 2/11/05).
Hechos: El banquero neoliberal Hans Redeker, de BNP Paribas, alecciona que “si la influenza porcina prueba ser mas virulenta, entonces el dólar y el yen serían los refugios más populares”, declaración que enmarca The Financial Times (27/4/09), principal portavoz de la desregulada globalización, bajo el título sugerente: “El dólar cura mientras el riesgo captura frío”, del neomalthusiano financiero Neil Dennos.
Los descerebrados neoliberales globales y su fauna de banqueros desalmados, genuinos brujos aprendices de la posmodernidad, han desafiado las leyes (éstas sí verdaderamente tangibles) de la naturaleza, en particular de la sagrada biología, y han puesto en peligro al género humano en todos los ámbitos de su actividad.
Pese al ignominioso muro racista en la transfrontera, el “México neoliberal” añejo de 27 años de la diarquía PRI-PAN –el espejo negro donde EU no desea verse reflejado con sus forzados experimentos teratológicos, teológicos, biológicos, económicos, financieros y sociopolíticos– exhibe plenamente su característica inocultable de “Estado fallido” con su gabinete panista de pigmeos mentales con ínfulas megalomaniacas.
Así como los “mejores economistas del mundo” de Calderón (aliado de sus cómplices priístas Beltrones, Gamboa Patrón y Labastida, al unísono de los desviacionistas del PRD) intentan ocultar la grave crisis financiera y económica que devasta al país con el fin de rescatar a la plutocracia parasitaria (en especial a Cemex), sus fundamentalistas autoridades sanitarias –verdaderos ineptos aldeanos con infatuaciones globalistas– escondieron el brote de la influenza porcina desde marzo, lo que ha valido las reprimendas de Brasil (Stratfor, 27/4/09).
La desregulación transfronteriza –que se subsume en la tripleta del TLCAN-ASPAN-Iniciativa Mérida y en la total vigilancia militar del territorio mexicano por el NORAD/Comando Norte y Comando Sur de EU– ha acarreado calamidades a México desde su aciaga adopción desde hace alrededor tres décadas.
No se puede vivir con fronteras cerradas, pero tampoco con límites tan abiertos de par en par –si no que se lo pregunten a EU, el país más vigilado orwellianamente del planeta.
Se requiere un equilibrio integral a los dos lados de la transfrontera donde el TLCAN propició la bidireccionalidad del tráfico de estupefacientes y el contrabando de armas en las fronteras abiertas selectivamente, redondeado por el lavado de dinero de la banca controlada por Wall Street (remember “escándalo Casablanca”): un aspecto trascendental de “libre comercio” que ha sido eludido deliberadamente por los lubricados académicos del neoliberalismo y del establishment cultural local, más preocupados en defender al estafador Bernie Madoff que en denunciar tanto el infanticidio de palestinos en Gaza a manos de Israel (apéndice militar del modelo neoliberal global) como el estado cataclísmico de México del que se han beneficiado.
El teorema teológico neoliberal de Heckscher-Ohlin –“un país abundante en capital exportará sus bienes de capital-intensivo, mientras un país abundante en mano de obra exportará su bien de mano de obra intensiva”– fue hecho añicos por la realidad de la ósmosis biológica y financiera: el paso de líquidos de una menor a una mayor concentración a través de una membrana semipermeable, que podemos aplicar financieramente en la transfrontera “semipermeable” al transmutar “líquidos” por dinero y así entender la razón por la cual el “fallido México neoliberal” ha sido vaciado y viciado de y en su contenido.
La gente sale con cubrebocas a las calles del Distrito Federal, para evitar enfermarse de influenzaFoto Maria Luisa Severiano
En nuestro libro agotado: El lado oscuro de la globalización: postglobalización & balcanización (Ed. Cadmo & Europa, 2000) abordamos las dimensiones macabras, que ahora resultaron catástrofes palmarias, del modelo desregulado neoliberal: desde la piratería financiera en los paraísos fiscales, pasando por el narcotráfico transfronterizo, hasta las guerras biológicas.
Llama poderosamente la atención la omnisciencia del Pentágono, el FMI y el Foro Económico Mundial de Davos sobre el esparcimiento de los virus. Hace 13 años se publicó un estudio Air Force 2025 en cuyo capítulo cinco se presenta un cronograma con una “historia plausible” donde en 2009 (¡súper sic!) la influenza aniquilaría a 30 millones de personas (INFOWARS, 5/3/09).
El resucitado FMI, nuevo redentor del mundo (según la cumbre londinense del G-20), hace tres años estimulaba a la comunidad empresarial neoliberal a “desarrollar planes de emergencia” para lidiar con la pandemia de, en ese momento, fiebre aviar global (VOA, 13/3/06). Al parecer, la plutocracia neoliberal mexicana y sus ineptas autoridades sanitarias (Breitbart.com, 27/4/09), tan supeditadas a los lineamientos del FMI, no leyeron su aviso visionario.
La “misteriosa” (The Economist dixit) influenza mixta de triple cepa (porcina, aviar y humana), genéticamente originaria de EU y que extrañamente se brincó las trancas interespecies, obliga a plantear la hipótesis adicional de un “accidente” de laboratorio híbrido: militar y privado.
En forma no menos omnisciente, el Comité para Mejorar (¡súper sic!) la Situación del Mundo”, del Foro Económico Mundial de Davos, en sus reportes anuales sobre los “riesgos globales” (específicamente el de 2007, patrocinado por Citigroup, la aseguradora Swiss RE, la financiera Marsh & McLennan Companies y el Centro de Riesgo de la Escuela Wharton) correlaciona la simultaneidad (¡súper-extra-sic!) de la crisis financiera global y la crónica de una pandemia anunciada con la “reacción violenta (backlash) contra la globalización”, lo que “provocaría un incremento del militarismo y las tendencias autoritarias que reconfigurarían la geopolítica global”. ¿De dónde nace tanto interés extra curricular de los banqueros y financieros neoliberales, es decir, la fauna más misántropa del planeta, por los “riesgos globales”?
Andrew Marshall (Reuters, 27/4/09) pregunta “si la globalización nos hizo más proclives a la catástrofe”. Argumenta que en medio de la posibilidad de una pandemia de influenza, “un creciente cuerpo de hallazgos sugiere que la complejidad de la moderna (sic) economía global puede hacernos más vulnerables que nunca (sic) a la catástrofe”. Concluye que “un riesgo primordial, tanto de la crisis financiera como de cualquier (sic) pandemia, es que provoca una retirada (¡súper sic!) de la globalización con profundas consecuencias de largo plazo para el mundo”.
Entramos a fortiori a la era de la desglobalización que, sin pandemias de por medio y miedo, anticipamos. Quizá la pandemia viral sirva de coartada coreográfica para el cambio escenográfico de la globalización neoliberal o para apuntalar al dólar al precio que fuere.
AGUAS CON LA PAN...DEMIA Y CON EL PAN(NICO)!!! ---PAQUITA)---
El pánico se puede alimentar de más pánico. Aquí en México se comenzaron a reportar muertes por influenza porcina, y es el único país donde se reporta tal cosa, aunque en la gran mayoría de los casos no se sabe quién, cómo, condición social, cuadro clínico, edad, sexo, etc, como ya lo hizo evidente el Secretario de Salú. El epidemiólogo de la OMS anuncia que los muertitos que se le cargan a la influenza en México tenían otras enfermedades, y casualmente en otros países no se reportan muertes por esta causa.
Sin embargo, el caso mexicano tiene al mundo vuelto loco cerrando las fronteras para que nuestros compatriotas no lleguen a hacérselas cansada con la epidemia. De pronto nos enteramos en México, que unos españoles que regresaron después de hacer turismo aquí, se fueron directito al hospital. Lo que no se cuenta aquí es que el desconfiado gobierno español los mandó al hospital únicamente para ver si les encontraban algo mal en su estado de salud, ya que venían de la tierra del diablo. Aquí solamente nos llega que están hospitalizados y esto agudiza el pánico general.
Como esta historia, hay muchas historias de diálogo de pánico entre naciones en el marco de la pandemia, en el que ya no cabe la razón y las alarmas se retroalimentan e intensifican entre sí.
Lo cierto es que el gobierno mexicano no sabe cómo vender la idea de la influenza, ni hasta dónde debe empujar para conseguir sus fines desleales para con el pueblo de México. Ya nos hemos enterado de los negocios en el rubro farmacéutico que tiene en la bolsa Felipe Calderón desde la visita de Sarkozy a México y los medios han ayudado bastante a vender el producto “PANico”, en su nuevo sabor a “influenza”, ya que el anterior, el sabor “antinarco” no conquistó la porción suficiente de mercado como para meter a todos en sus casas y decretar un estado de excepción sin resistencias, “sospechosismos” y demás. Es sencillo, solo basta con decir verdades a medias; si la OMS hace declaraciones, se le recortan pedacitos, si mueren 50 personas de hambre, sólo di que se murieron y todos asumirán que murieron por influenza, menciona que los casos se han dado en personas jóvenes, pero no digas si tuvieron otras enfermedades o vivían en condiciones desfavorables.
En este mismo tenor, Calderón ha lanzado de nuevo militares a las calles, habiéndolos equipado primero con un bonche de cubrebocas. Sin embargo, para una emergencia civil, el comandante en jefe de las fuerzas armadas tendría que anunciar la aplicación del procedimiento BNIII, y no mandar indiscriminadamente a los soldaditos a las calles como si nada. Así mismo ya decretó disolver reuniones y facultó a la policía para entrar a la casa de quien sea a llevarse a los malditos infectados de influenza, neumonía, gripa, rebeldía o cualquier mal infeccioso, sin encontrarse con resistencias y, dada la “comprensión” del pueblo en general acerca de la epidemia, no encontrarían más que apoyo y solidaridad por parte de los vecinos. ¡Qué bonita manera de instalar una dictadura militar!
El caso es que quién sabe dónde se haya generado el virus y quién lo haya soltado, pero todo mundo saca su ronchita, recombinando el virus con estupidez, maldad, y estrategias diversas para convertirlo en un arma política bien afilada.
Jalen muchos pies esta noche, al fin que lo que no debe entrar en contacto son las manos.
Sin embargo, el caso mexicano tiene al mundo vuelto loco cerrando las fronteras para que nuestros compatriotas no lleguen a hacérselas cansada con la epidemia. De pronto nos enteramos en México, que unos españoles que regresaron después de hacer turismo aquí, se fueron directito al hospital. Lo que no se cuenta aquí es que el desconfiado gobierno español los mandó al hospital únicamente para ver si les encontraban algo mal en su estado de salud, ya que venían de la tierra del diablo. Aquí solamente nos llega que están hospitalizados y esto agudiza el pánico general.
Como esta historia, hay muchas historias de diálogo de pánico entre naciones en el marco de la pandemia, en el que ya no cabe la razón y las alarmas se retroalimentan e intensifican entre sí.
Lo cierto es que el gobierno mexicano no sabe cómo vender la idea de la influenza, ni hasta dónde debe empujar para conseguir sus fines desleales para con el pueblo de México. Ya nos hemos enterado de los negocios en el rubro farmacéutico que tiene en la bolsa Felipe Calderón desde la visita de Sarkozy a México y los medios han ayudado bastante a vender el producto “PANico”, en su nuevo sabor a “influenza”, ya que el anterior, el sabor “antinarco” no conquistó la porción suficiente de mercado como para meter a todos en sus casas y decretar un estado de excepción sin resistencias, “sospechosismos” y demás. Es sencillo, solo basta con decir verdades a medias; si la OMS hace declaraciones, se le recortan pedacitos, si mueren 50 personas de hambre, sólo di que se murieron y todos asumirán que murieron por influenza, menciona que los casos se han dado en personas jóvenes, pero no digas si tuvieron otras enfermedades o vivían en condiciones desfavorables.
En este mismo tenor, Calderón ha lanzado de nuevo militares a las calles, habiéndolos equipado primero con un bonche de cubrebocas. Sin embargo, para una emergencia civil, el comandante en jefe de las fuerzas armadas tendría que anunciar la aplicación del procedimiento BNIII, y no mandar indiscriminadamente a los soldaditos a las calles como si nada. Así mismo ya decretó disolver reuniones y facultó a la policía para entrar a la casa de quien sea a llevarse a los malditos infectados de influenza, neumonía, gripa, rebeldía o cualquier mal infeccioso, sin encontrarse con resistencias y, dada la “comprensión” del pueblo en general acerca de la epidemia, no encontrarían más que apoyo y solidaridad por parte de los vecinos. ¡Qué bonita manera de instalar una dictadura militar!
El caso es que quién sabe dónde se haya generado el virus y quién lo haya soltado, pero todo mundo saca su ronchita, recombinando el virus con estupidez, maldad, y estrategias diversas para convertirlo en un arma política bien afilada.
Jalen muchos pies esta noche, al fin que lo que no debe entrar en contacto son las manos.
H1N1 POLIMNIA ROMANA.
Estoy consciente que hay mil cosas más importantes de las que podría escribir, como la gira por Puebla y Morelos del Presidente Legítimo, sin embargo, creo prudente hacer una aclaración ante tanta tontería que he escuchado y leído en los últimos días en relación a la gripe porcina. Soy orgullosamente universitaria, estudié en la Facultad de Veterinaria de la UNAM y me siento obligada a dar una opinión. El virus de la Influenza Porcina es una enfermedad que afecta las vías respiratorias de los cerdos, aparece comúnmente en otoño e invierno y cuando lo hace enferma a todos los animales que están en contacto directo, aunque la tasa de mortalidad es muy baja. Existen varios tipos de este virus, el más común y el que está infectando a las personas es el H1N1 (H-hemaglutinina, N-Neuraminidasa). La gripe porcina por lo general no afecta al ser humano aunque han existido casos de contagio cerdo - humano registrados en personas que han estado en contacto con cerdos enfermos, veterinarios, productores, visitantes a ferias ganaderas, etc. Estos casos no han sido graves, las personas infectadas presentaron signos leves y sólo en casos especiales, como una mujer embarazada en 1988, resultaron fatales.
El virus por sí sólo no causa la muerte ni de los cerdos ni de los humanos. La enfermedad se complica cuando el paciente tiene deprimido su sistema inmune por desnutrición, embarazo, alguna otra enfermedad viral, etc. En este caso, la persona es atacada por las bacterias oportunistas, bacterias que viven a nuestro alrededor y esperan ocasiones como ésta para multiplicarse y así complicar la situación del paciente hasta llevarlo a la muerte. Con la atención médica oportuna no hay peligro de que una infección por el virus de la Influenza Porcina termine en tragedia. Es ahí donde nuestro país tiene una gran desventaja, la atención médica no es ni buena, ni atinada, ni gratuita, ni oportuna.
La incompetencia de los responsables del sector salud en México está perfectamente ejemplificada por el Sr. Córdova Villalobos, quién al no tener la menor idea de lo que es la Influenza Porcina desinformó al país entero provocando pánico general, además de una cortina de humo perfecta para el pelele y sus intenciones de endeudarnos hasta el tope y de sacar al ejército a las calles para evitar cualquier oposición a su fallido gobierno. Su miedo no era a la enfermedad, sino a que se evidencie su incompetencia y la falta de médicos y enfermeras bien pagados, medicinas gratuitas y centros de salud dignos y equipados. Si dejaran de gastar tanto en su jueguito de la guerra contra el narco y en los mega sueldos de los disfuncionarios, alcanzaría para que ningún mexicano más muriera a causa de deshidratación, diarrea o gripe
El virus por sí sólo no causa la muerte ni de los cerdos ni de los humanos. La enfermedad se complica cuando el paciente tiene deprimido su sistema inmune por desnutrición, embarazo, alguna otra enfermedad viral, etc. En este caso, la persona es atacada por las bacterias oportunistas, bacterias que viven a nuestro alrededor y esperan ocasiones como ésta para multiplicarse y así complicar la situación del paciente hasta llevarlo a la muerte. Con la atención médica oportuna no hay peligro de que una infección por el virus de la Influenza Porcina termine en tragedia. Es ahí donde nuestro país tiene una gran desventaja, la atención médica no es ni buena, ni atinada, ni gratuita, ni oportuna.
La incompetencia de los responsables del sector salud en México está perfectamente ejemplificada por el Sr. Córdova Villalobos, quién al no tener la menor idea de lo que es la Influenza Porcina desinformó al país entero provocando pánico general, además de una cortina de humo perfecta para el pelele y sus intenciones de endeudarnos hasta el tope y de sacar al ejército a las calles para evitar cualquier oposición a su fallido gobierno. Su miedo no era a la enfermedad, sino a que se evidencie su incompetencia y la falta de médicos y enfermeras bien pagados, medicinas gratuitas y centros de salud dignos y equipados. Si dejaran de gastar tanto en su jueguito de la guerra contra el narco y en los mega sueldos de los disfuncionarios, alcanzaría para que ningún mexicano más muriera a causa de deshidratación, diarrea o gripe
En franca contingencia
Por
29 de Abril, 2009 - 00:00
Por si la población no se había espantado lo suficiente, ahora el “gobierno federal” representado a ultranza por un dudoso 0.56%, por la puerta de atrás, emite un Decreto para prevenirse de algo muy grave, en mi opinión: el despertar de la conciencia popular, que se esparce como virus maligno contra su ilegitimidad y su ineptitud.
La cosa va más o menos así… Decreto Presidencial Autoriza a la Secretaría de salud a:
- Aislamiento de personas.
- Aplicación de vacunas, sueros, y otros recursos terapéuticos.
- Inspección de pasajeros.
- Ingreso a todo tipo de local o casa habitación.
- Libre adquisición a nivel nacional o internacional de medicamentos y equipo médico.
- Importar y autorizar importaciones de dichos productos.
- Evitar congregación de personas en cualquier lugar de reunión.
- Regulación del tránsito terrestre, aéreo o marítimo.
- Libre utilización de los servicios telefónicos, telegráficos y de correos.
- Solicitud de apoyo a instancias internacionales.
Todo esto dentro de un programa emergente de medidas NECESARIAS para CONTROLAR la propagación del peligroso virus denominado – CONCIENCIA POPULAR – de Influenza Estacional Epidémica.
Las medidas tendrán vigencia mientras dure la bendita contingencia.
Es todo por hoy.
Por
29 de Abril, 2009 - 00:00
Por si la población no se había espantado lo suficiente, ahora el “gobierno federal” representado a ultranza por un dudoso 0.56%, por la puerta de atrás, emite un Decreto para prevenirse de algo muy grave, en mi opinión: el despertar de la conciencia popular, que se esparce como virus maligno contra su ilegitimidad y su ineptitud.
La cosa va más o menos así… Decreto Presidencial Autoriza a la Secretaría de salud a:
- Aislamiento de personas.
- Aplicación de vacunas, sueros, y otros recursos terapéuticos.
- Inspección de pasajeros.
- Ingreso a todo tipo de local o casa habitación.
- Libre adquisición a nivel nacional o internacional de medicamentos y equipo médico.
- Importar y autorizar importaciones de dichos productos.
- Evitar congregación de personas en cualquier lugar de reunión.
- Regulación del tránsito terrestre, aéreo o marítimo.
- Libre utilización de los servicios telefónicos, telegráficos y de correos.
- Solicitud de apoyo a instancias internacionales.
Todo esto dentro de un programa emergente de medidas NECESARIAS para CONTROLAR la propagación del peligroso virus denominado – CONCIENCIA POPULAR – de Influenza Estacional Epidémica.
Las medidas tendrán vigencia mientras dure la bendita contingencia.
Es todo por hoy.
Por qué tantas dudas
Por
28 de Abril, 2009 - 00:00
Es normal que mucha gente dude de la veracidad de la información que nos proporcionan los medios con tanta “responsabilidad” cuando se han comportado al revés, con absoluta irresponsabilidad ante problemas muy serios.
La frase de Esopo sobre las mentiras es innegable: “Los mentirosos sólo ganan una cosa, no tener credibilidad aun cuando digan la verdad”.
Si analizamos todas las mentiras en las que se sostiene este gobierno usurpador, no podemos más que dudar de todo lo que dice y de todo lo que mal hace. De igual manera dudamos de los medios coludidos con él para imponer un régimen que el pueblo rechazó en las pasadas elecciones presidenciales.
Los poderosos cerraron filas para mantener sus privilegios y seguir saqueando al país, y aunque muchos de ellos sabían de las mentiras propagadas en la sucia campaña de Calderón, cerraron la boca y hasta cooperaron para que un sector de la población, suficiente para hacer un fraude, creyera en un peligro inexistente.
Todo el dinero atesorado no pudo salvar la vida de un hijo secuestrado y asesinado, ni puede ahora evitar que vivamos en un estado de incertidumbre y zozobra.
El apoyo y la difusión de organismos internacionales puede ayudar a que la gente crea que sí se trata de un problema serio lo que está ocurriendo, pero ante la mancha del comportamiento de funcionarios corruptos e impunes, la duda sigue creciendo como un virus.
De una cosa sí podemos estar totalmente seguros todos los mexicanos: si esto resulta ser una maniobra más de Calderón y sus cómplices para vulnerar las garantías individuales y manipular a la población para sostenerse en el poder, será contraproducente y no habrá poder humano que lo salve.
¿Cuánto tiempo puede sostenerse una mentira y a cuánta gente se puede engañar? Eso depende de los fines que persigue la mentira.
Por la terrible situación en la que se encuentra la mayoría de los mexicanos: desempleo, violación de los derechos humanos, abandono del campo, nulas posibilidades de superación y educación para sus hijos, exclusión de los programas de salvamento económico que ya se están repartiendo entre los empresarios poderosos, y muchas otras situaciones de injusticia, esto no puede durar más allá de lo soportable, con Influenza Porcina o sin ella.
Por
28 de Abril, 2009 - 00:00
Es normal que mucha gente dude de la veracidad de la información que nos proporcionan los medios con tanta “responsabilidad” cuando se han comportado al revés, con absoluta irresponsabilidad ante problemas muy serios.
La frase de Esopo sobre las mentiras es innegable: “Los mentirosos sólo ganan una cosa, no tener credibilidad aun cuando digan la verdad”.
Si analizamos todas las mentiras en las que se sostiene este gobierno usurpador, no podemos más que dudar de todo lo que dice y de todo lo que mal hace. De igual manera dudamos de los medios coludidos con él para imponer un régimen que el pueblo rechazó en las pasadas elecciones presidenciales.
Los poderosos cerraron filas para mantener sus privilegios y seguir saqueando al país, y aunque muchos de ellos sabían de las mentiras propagadas en la sucia campaña de Calderón, cerraron la boca y hasta cooperaron para que un sector de la población, suficiente para hacer un fraude, creyera en un peligro inexistente.
Todo el dinero atesorado no pudo salvar la vida de un hijo secuestrado y asesinado, ni puede ahora evitar que vivamos en un estado de incertidumbre y zozobra.
El apoyo y la difusión de organismos internacionales puede ayudar a que la gente crea que sí se trata de un problema serio lo que está ocurriendo, pero ante la mancha del comportamiento de funcionarios corruptos e impunes, la duda sigue creciendo como un virus.
De una cosa sí podemos estar totalmente seguros todos los mexicanos: si esto resulta ser una maniobra más de Calderón y sus cómplices para vulnerar las garantías individuales y manipular a la población para sostenerse en el poder, será contraproducente y no habrá poder humano que lo salve.
¿Cuánto tiempo puede sostenerse una mentira y a cuánta gente se puede engañar? Eso depende de los fines que persigue la mentira.
Por la terrible situación en la que se encuentra la mayoría de los mexicanos: desempleo, violación de los derechos humanos, abandono del campo, nulas posibilidades de superación y educación para sus hijos, exclusión de los programas de salvamento económico que ya se están repartiendo entre los empresarios poderosos, y muchas otras situaciones de injusticia, esto no puede durar más allá de lo soportable, con Influenza Porcina o sin ella.
martes, 28 de abril de 2009
CADENA DE MENTIRAS, ERRORES, INEPTITUDES, SAQUEOS, CRIMENES CONTRA CIUDADANOS MEXICANOS. HASTA CUANDO LOS BURLADORES TENDRAN IMPUNIDAD?? HASTA CUANDO?
Epidemia de ineptitudes
ÁLVARO DELGADO
MEXICO, D.F., 27 de abril (apro).-
El lunes 13 de abril, tres días antes de la visita a México de Barak Obama, presidente de Estados Unidos, el gobierno de Felipe Calderón tuvo conocimiento del primer caso de influenza en el país y justo cuando el estadunidense desahogaba aquí una breve agenda, incluida una cena en la que saludó de mano a centenares de invitados, las autoridades de salud decretaron la alerta epidemiológica.
Así, pese a todo el poderoso aparato de seguridad de Estados Unidos y del país anfitrión --que incluyó tropas provistas de armas letales, vehículos de guerra, helicópteros y aviones--, la vida de Obama estuvo en riego ante el virus de influenza porcina.
"El equipo de la Unidad Médica de la Casa Blanca en el terreno preguntó a funcionarios mexicanos de salud y al equipo médico de la embajada de Estados Unidos sobre cualquier preocupación sobre enfermedades infecciosas, y fuimos informados que no había ninguna", declaró hoy Robert Gibbs, portavoz presidencial de ese país, luego de ser cuestionado en su rueda de prensa habitual.
Sin embargo, ante las especulaciones de que los estadunidenses –incluido Obama-- están furiosos porque el gobierno de Calderón ocultó información sensible de seguridad nacional de Estados Unidos, el vocero optó por la diplomacia: "No nos notificaron, pero no tenemos razón para creer que ocultaran información que tenían hasta ese momento."
Pero el dato es relevante no porque la vida de Obama sea más importante que la de cualquier mexicano –bajo ninguna circunstancia debe serlo--, sino porque revela que en esos días se sabía, al más alto nivel, que se cernía una amenaza sobre México y se escamoteó para, luego --ante la gravedad de hechos inocultables--, dar paso a una estrategia que tiene a la mayoría de la población en un estado de zozobra y terror.
No fue sólo la repentina decisión de la noche del jueves, cuando el gobierno de Calderón anunció una serie de medidas para afrontar la epidemia –entre ellas la suspensión de clases en el Distrito Federal y el estado de México, de la que millares de padres de familia se enteraron al llegar a los planteles--, sino los anuncios que le siguieron, entre ellos el cierre de centros de entretenimiento, que prácticamente paralizaron las actividades productivas de ambas entidades, particularmente en el Valle de México.
Pero más aún: La suspensión de clases hasta el 6 de mayo, primero en los estados mencionados y en San Luis Potosí, y luego en todo el territorio nacional, ha generado una sicosis que revela no una estrategia para capitalizar política y electoralmente el terror de la sociedad --a lo que son tan proclives las derechas, como Calderón, y que tampoco habría que descartar--, sino la ineptitud y la insensibilidad que demuestran los erráticos pasos que ha dado el gobierno.
La epidemia de la influenza porcina es un problema gravísimo, de tal magnitud que más vale que Calderón –y por supuesto las autoridades de todos los niveles involucrados en el cuidado de la población-- actúe y hable con la verdad, incluyendo las consecuencias de carácter económico que padecerá México, en lo inmediato por la inactividad en las diversas ramas productivas, entre ellas el desplome del turismo, y luego las exportaciones.
Salvo la muy superficial declaración de Agustín Carstens, secretario de Hacienda, de que habrá una afectación por la epidemia, Calderón no ha informado sobre la magnitud del impacto.
El gobierno capitalino que encabeza Marcelo Ebrard, y que tampoco es la representación de la eficacia, dio a conocer que las pérdidas son superiores a los 700 millones de pesos diarios por la contracción del 60% de la actividad productiva.
Y, sobre todo, es preciso que las autoridades atiendan el ánimo de la sociedad, expuesta a una avalancha de información que aturde y confunde. Que paraliza.
La crisis generada por la epidemia ha puesto de manifiesto, también, la enorme debilidad tecnológica de México en el ámbito de la ciencia y la tecnología y la dependencia de equipos para no depender de laboratorios de países extranjeros para identificar la cepa del virus y que, en este caso, se dejó en manos de Estados Unidos y Canadá.
El gobierno federal alega que no se dio información a Barak Obama de que ya se conocía al menos un caso del virus de influenza porcina, el que se detectó tres días antes de la visita, debido a que sólo se confirmó la tarde del miércoles 22, fecha que dio Calderón mismo, pero con ello exhibió justamente el desdén por la investigación científica, incluida por supuesto la clínica, que implica inclusive el desabasto de medicamentos y vacunas contra enfermedades como la que se abate en México.
Pero todavía peor: Tal como documenta el semanario Proceso en la edición de esta semana, se sabía que en México se tenía prevista una pandemia de la influenza desde 2001, y aun se creó, en 2006, un Plan Nacional de Preparación y Respuesta a una Pandemia de Influenza.
"El reloj de la pandemia está corriendo, sólo que no sabemos qué hora marca", sentencia un documento al respecto publicado en el reportaje principal de la revista, que además consigna la elaboración de un Manual para la Vigilancia Epidemiológica de Influenza.
Sí, pero sobrevino la tragedia.
ÁLVARO DELGADO
MEXICO, D.F., 27 de abril (apro).-
El lunes 13 de abril, tres días antes de la visita a México de Barak Obama, presidente de Estados Unidos, el gobierno de Felipe Calderón tuvo conocimiento del primer caso de influenza en el país y justo cuando el estadunidense desahogaba aquí una breve agenda, incluida una cena en la que saludó de mano a centenares de invitados, las autoridades de salud decretaron la alerta epidemiológica.
Así, pese a todo el poderoso aparato de seguridad de Estados Unidos y del país anfitrión --que incluyó tropas provistas de armas letales, vehículos de guerra, helicópteros y aviones--, la vida de Obama estuvo en riego ante el virus de influenza porcina.
"El equipo de la Unidad Médica de la Casa Blanca en el terreno preguntó a funcionarios mexicanos de salud y al equipo médico de la embajada de Estados Unidos sobre cualquier preocupación sobre enfermedades infecciosas, y fuimos informados que no había ninguna", declaró hoy Robert Gibbs, portavoz presidencial de ese país, luego de ser cuestionado en su rueda de prensa habitual.
Sin embargo, ante las especulaciones de que los estadunidenses –incluido Obama-- están furiosos porque el gobierno de Calderón ocultó información sensible de seguridad nacional de Estados Unidos, el vocero optó por la diplomacia: "No nos notificaron, pero no tenemos razón para creer que ocultaran información que tenían hasta ese momento."
Pero el dato es relevante no porque la vida de Obama sea más importante que la de cualquier mexicano –bajo ninguna circunstancia debe serlo--, sino porque revela que en esos días se sabía, al más alto nivel, que se cernía una amenaza sobre México y se escamoteó para, luego --ante la gravedad de hechos inocultables--, dar paso a una estrategia que tiene a la mayoría de la población en un estado de zozobra y terror.
No fue sólo la repentina decisión de la noche del jueves, cuando el gobierno de Calderón anunció una serie de medidas para afrontar la epidemia –entre ellas la suspensión de clases en el Distrito Federal y el estado de México, de la que millares de padres de familia se enteraron al llegar a los planteles--, sino los anuncios que le siguieron, entre ellos el cierre de centros de entretenimiento, que prácticamente paralizaron las actividades productivas de ambas entidades, particularmente en el Valle de México.
Pero más aún: La suspensión de clases hasta el 6 de mayo, primero en los estados mencionados y en San Luis Potosí, y luego en todo el territorio nacional, ha generado una sicosis que revela no una estrategia para capitalizar política y electoralmente el terror de la sociedad --a lo que son tan proclives las derechas, como Calderón, y que tampoco habría que descartar--, sino la ineptitud y la insensibilidad que demuestran los erráticos pasos que ha dado el gobierno.
La epidemia de la influenza porcina es un problema gravísimo, de tal magnitud que más vale que Calderón –y por supuesto las autoridades de todos los niveles involucrados en el cuidado de la población-- actúe y hable con la verdad, incluyendo las consecuencias de carácter económico que padecerá México, en lo inmediato por la inactividad en las diversas ramas productivas, entre ellas el desplome del turismo, y luego las exportaciones.
Salvo la muy superficial declaración de Agustín Carstens, secretario de Hacienda, de que habrá una afectación por la epidemia, Calderón no ha informado sobre la magnitud del impacto.
El gobierno capitalino que encabeza Marcelo Ebrard, y que tampoco es la representación de la eficacia, dio a conocer que las pérdidas son superiores a los 700 millones de pesos diarios por la contracción del 60% de la actividad productiva.
Y, sobre todo, es preciso que las autoridades atiendan el ánimo de la sociedad, expuesta a una avalancha de información que aturde y confunde. Que paraliza.
La crisis generada por la epidemia ha puesto de manifiesto, también, la enorme debilidad tecnológica de México en el ámbito de la ciencia y la tecnología y la dependencia de equipos para no depender de laboratorios de países extranjeros para identificar la cepa del virus y que, en este caso, se dejó en manos de Estados Unidos y Canadá.
El gobierno federal alega que no se dio información a Barak Obama de que ya se conocía al menos un caso del virus de influenza porcina, el que se detectó tres días antes de la visita, debido a que sólo se confirmó la tarde del miércoles 22, fecha que dio Calderón mismo, pero con ello exhibió justamente el desdén por la investigación científica, incluida por supuesto la clínica, que implica inclusive el desabasto de medicamentos y vacunas contra enfermedades como la que se abate en México.
Pero todavía peor: Tal como documenta el semanario Proceso en la edición de esta semana, se sabía que en México se tenía prevista una pandemia de la influenza desde 2001, y aun se creó, en 2006, un Plan Nacional de Preparación y Respuesta a una Pandemia de Influenza.
"El reloj de la pandemia está corriendo, sólo que no sabemos qué hora marca", sentencia un documento al respecto publicado en el reportaje principal de la revista, que además consigna la elaboración de un Manual para la Vigilancia Epidemiológica de Influenza.
Sí, pero sobrevino la tragedia.
VENTANEADO EL GOBIERNO PANISTA POR LA O.M.S. CHEQUE UD.!!!
Por Víctor Hernández
28 de Abril, 2009 - 00:00
Ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS) soltó una auténtica bomba que dejó muy en evidencia al gobierno panista de Felipe Calderón.
No fue la alerta de nivel 4 sobre la influenza porcina. Esa alerta lo que significa es que la influenza porcina es muy contagiosa, pero no letal.
No; la verdadera bomba fueron las declaraciones del experto en seguridad sanitaria de la OMS, Keiji Fukuda, quien aseguró que el virus de la influenza porcina es "suave" y que las personas que murieron en México presuntamente por influenza porcina tenían "otras patologías", es decir, otras enfermedades.
Fukuda hizo estas declaraciones para explicar por qué no le parecía recomendable que se emitieran restricciones de viajes o de comercio. De acuerdo con Fukuda, la medida no será de mucha utilidad ya que "el virus ya está muy extendido geograficamente."
De hecho, la OMS de plano dijo que en vez de enfocarse en tratar de contener el virus, los paises deberían enfocarse en tratar a la influenza con antivirales.
Es decir, la OMS virtualmente estaba diciendo que el virus de la influenza porcina no sólo no es grave, sino que las personas que supuestamente murieron por este virus en realidad tenían otros padecimientos que, se infiere, se agravaron con la influenza.
O en otras palabras, la alarma por la influenza en México está a muy poca distancia de resultar ser una tomada de pelo.
Ahora bien; para que la OMS pudiera determinar que los muertos por influenza porcina en México tenían otras enfermedades, forzosamente tuvieron que haber visto la información de los cuadros médicos de esas personas que estaban en poder de las autoridades de salud.
¿Por qué la secretaría de salud a cargo de José Ángel Córdova Villalobos nunca reveló al público mexicano esta información? ¿Por qué se quedó callado? Si de verdad es un médico competente, Córdova Villalobos debió haber sabido lo que la OMS dio a conocer desde antes de que llegaran a esa conclusión. Pero no lo hizo ¿Por qué?
Tal vez porque si hubiera dicho que la influenza porcina no era causa de alarma, hubiera quedado en evidencia que el gobierno federal panista no provee de los suficientes servicios médicos a una población mayoritariamente pobre y vulnerable a enfermedades no-letales como la influenza. Y que no los provee porque PAN y el PRI no han querido que los haya.
Tal vez porque si más gente se hubiera enfermado hubiera sido también muy notorio que el Seguro Popular no cubre a millones de mexicanos ya que no tienen dinero para pagar la cuota que el gobierno panista les exige para que se los puedan dar.
Tal vez porque hubiera sido más notorio que ante un cuadro de enfermedades causadas por la desnutrición o la falta de atención médica, lo que le urge a México no son cubrebocas, sino un gobierno que de verdad saque a la gente de la pobreza y le de cobertura médica gratuita tal y como se hace en paises como Inglaterra.
Tal vez porque sin una alarma por la influenza, Felipe Calderón no hubiera podido emitir un decreto para permitir los allanamientos a casas habitación disque para combatir la influenza sin que nadie le reclamara.
Tal vez porque sin esa misma alarma, el gobernador panista de Jalisco, Emilio González Márquez no hubiera podido ordenar cerrar los antros de Puerto Vallarta sin cerrar las escuelas.
Tal vez porque sin esa alarma no hubiera sido amedrentar a la población a tal grado que los hizo esconderse en sus casas y obedecer lo que les dijeran sin chistar.
Tal vez porque hubiera quedado claro que en un estado fallido la gente se muere por enfermedades que en otros paises no matan a nadie.
Ahora tanto el gobierno panista como los medios pretenden lavarse la cara por la crisis de pánico que causaron sin motivo real dando las cifras de recuperación de los pacientes que debieron haber dado desde hace tres días.
Sí; tanto Córdova Villalobos como los medios ahora se están enfocado ahora en decir que ya está bajando el número de enfermos de influenza. Lástima que no dijeron eso ayer en la mañana cuando se les ocurrió alarmar a todo el país suspendiendo clases en toda la república.
José Ángel Córdova Villalobos debe renunciar a la Secretaría de Salud por inepto. Y Calderón debe reunciar a ser el titular del ejecutivo por haberse colgado del pretexto la influenza para violar la constitución mediante un decreto que autoriza los allanamientos de morada sin un motivo real.
Dudo que vayan a renunciar por esto--a pesar de que causaron una de las crisis de miedo más fuertes en tiempos recientes a nivel nacional e internacional--por lo cual solamente hay un camino para evitar que gente como ellos vuelvan a estar en el poder: no votando nunca más por los partidos que los llevaron al poder: el PAN y el PRI.
PD: el mensaje para celular de hoy:
La gente de lo que se muere es de pobreza, no de influenza. No votaré por el PAN ni por el PRI. Reenvía.
PD2: Pierde DF 728 millones de pesos a diario por el miedo que causó el gobierno por la influenza. Malo que fuera por un plantón en Reforma. Entonces sí se quejarían los panistas.
PD3: También es necesario regañar en esta columna a todos los izquierdistas que se dejaron engatuzar con teorías de conspiración sobre la influenza--que desde luego estuvieron diseminando a lo tarugo por internet. Fue tan ridículo lo que hicieron que el diario El Economista, de España, acabó publicando un artículo pitorreándose de todas estas teorías y advirtiendo lo siguiente: "Un pueblo asustado -y mejor si el enemigo es misterioso, no se lo conoce, ataca sorpresivamente, es enigmático y capaz de cualquier cosa- es un pueblo maleable. Del miedo como ordenación del mundo se han servido truhanes y reyes, dictadores y demócratas, banqueros e industria sanitaria...y más de un presidente de Estados Unidos, por ejemplo." El artículo completo lo pueden leer en este link: http://ecodiario.eleconomista.es/internet/noticias/1199424/04/09/La-conspiranoia-llega-a-la-gripe-porcina.html
28 de Abril, 2009 - 00:00
Ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS) soltó una auténtica bomba que dejó muy en evidencia al gobierno panista de Felipe Calderón.
No fue la alerta de nivel 4 sobre la influenza porcina. Esa alerta lo que significa es que la influenza porcina es muy contagiosa, pero no letal.
No; la verdadera bomba fueron las declaraciones del experto en seguridad sanitaria de la OMS, Keiji Fukuda, quien aseguró que el virus de la influenza porcina es "suave" y que las personas que murieron en México presuntamente por influenza porcina tenían "otras patologías", es decir, otras enfermedades.
Fukuda hizo estas declaraciones para explicar por qué no le parecía recomendable que se emitieran restricciones de viajes o de comercio. De acuerdo con Fukuda, la medida no será de mucha utilidad ya que "el virus ya está muy extendido geograficamente."
De hecho, la OMS de plano dijo que en vez de enfocarse en tratar de contener el virus, los paises deberían enfocarse en tratar a la influenza con antivirales.
Es decir, la OMS virtualmente estaba diciendo que el virus de la influenza porcina no sólo no es grave, sino que las personas que supuestamente murieron por este virus en realidad tenían otros padecimientos que, se infiere, se agravaron con la influenza.
O en otras palabras, la alarma por la influenza en México está a muy poca distancia de resultar ser una tomada de pelo.
Ahora bien; para que la OMS pudiera determinar que los muertos por influenza porcina en México tenían otras enfermedades, forzosamente tuvieron que haber visto la información de los cuadros médicos de esas personas que estaban en poder de las autoridades de salud.
¿Por qué la secretaría de salud a cargo de José Ángel Córdova Villalobos nunca reveló al público mexicano esta información? ¿Por qué se quedó callado? Si de verdad es un médico competente, Córdova Villalobos debió haber sabido lo que la OMS dio a conocer desde antes de que llegaran a esa conclusión. Pero no lo hizo ¿Por qué?
Tal vez porque si hubiera dicho que la influenza porcina no era causa de alarma, hubiera quedado en evidencia que el gobierno federal panista no provee de los suficientes servicios médicos a una población mayoritariamente pobre y vulnerable a enfermedades no-letales como la influenza. Y que no los provee porque PAN y el PRI no han querido que los haya.
Tal vez porque si más gente se hubiera enfermado hubiera sido también muy notorio que el Seguro Popular no cubre a millones de mexicanos ya que no tienen dinero para pagar la cuota que el gobierno panista les exige para que se los puedan dar.
Tal vez porque hubiera sido más notorio que ante un cuadro de enfermedades causadas por la desnutrición o la falta de atención médica, lo que le urge a México no son cubrebocas, sino un gobierno que de verdad saque a la gente de la pobreza y le de cobertura médica gratuita tal y como se hace en paises como Inglaterra.
Tal vez porque sin una alarma por la influenza, Felipe Calderón no hubiera podido emitir un decreto para permitir los allanamientos a casas habitación disque para combatir la influenza sin que nadie le reclamara.
Tal vez porque sin esa misma alarma, el gobernador panista de Jalisco, Emilio González Márquez no hubiera podido ordenar cerrar los antros de Puerto Vallarta sin cerrar las escuelas.
Tal vez porque sin esa alarma no hubiera sido amedrentar a la población a tal grado que los hizo esconderse en sus casas y obedecer lo que les dijeran sin chistar.
Tal vez porque hubiera quedado claro que en un estado fallido la gente se muere por enfermedades que en otros paises no matan a nadie.
Ahora tanto el gobierno panista como los medios pretenden lavarse la cara por la crisis de pánico que causaron sin motivo real dando las cifras de recuperación de los pacientes que debieron haber dado desde hace tres días.
Sí; tanto Córdova Villalobos como los medios ahora se están enfocado ahora en decir que ya está bajando el número de enfermos de influenza. Lástima que no dijeron eso ayer en la mañana cuando se les ocurrió alarmar a todo el país suspendiendo clases en toda la república.
José Ángel Córdova Villalobos debe renunciar a la Secretaría de Salud por inepto. Y Calderón debe reunciar a ser el titular del ejecutivo por haberse colgado del pretexto la influenza para violar la constitución mediante un decreto que autoriza los allanamientos de morada sin un motivo real.
Dudo que vayan a renunciar por esto--a pesar de que causaron una de las crisis de miedo más fuertes en tiempos recientes a nivel nacional e internacional--por lo cual solamente hay un camino para evitar que gente como ellos vuelvan a estar en el poder: no votando nunca más por los partidos que los llevaron al poder: el PAN y el PRI.
PD: el mensaje para celular de hoy:
La gente de lo que se muere es de pobreza, no de influenza. No votaré por el PAN ni por el PRI. Reenvía.
PD2: Pierde DF 728 millones de pesos a diario por el miedo que causó el gobierno por la influenza. Malo que fuera por un plantón en Reforma. Entonces sí se quejarían los panistas.
PD3: También es necesario regañar en esta columna a todos los izquierdistas que se dejaron engatuzar con teorías de conspiración sobre la influenza--que desde luego estuvieron diseminando a lo tarugo por internet. Fue tan ridículo lo que hicieron que el diario El Economista, de España, acabó publicando un artículo pitorreándose de todas estas teorías y advirtiendo lo siguiente: "Un pueblo asustado -y mejor si el enemigo es misterioso, no se lo conoce, ataca sorpresivamente, es enigmático y capaz de cualquier cosa- es un pueblo maleable. Del miedo como ordenación del mundo se han servido truhanes y reyes, dictadores y demócratas, banqueros e industria sanitaria...y más de un presidente de Estados Unidos, por ejemplo." El artículo completo lo pueden leer en este link: http://ecodiario.eleconomista.es/internet/noticias/1199424/04/09/La-conspiranoia-llega-a-la-gripe-porcina.html
ASTILLERO
Ocultamientos
Desde marzo
El reino de los ciegos
Julio Hernández López
El perredista Carlos Navarrete (centro), durante una conferencia de prensa. El sol azteca dio a conocer la cancelación del festejo por el vigésimo aniversario de la fundación de su partido, programada para el 5 de mayo. El resto de los institutos políticos informaron también sobre las medidas precautorias que tomarán para evitar contagios de influenzaFoto La Jornada
Un fantasma atosiga a la administración calderónica, el del ocultamiento de información. No sólo en relación con lo que sucede día a día a partir de que la crisis ha sido declarada, sino incluso en términos internacionales. Ayer, por ejemplo, el director de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil, Agenor Álvares da Silva, criticó a México por haberse tardado en alertar sobre el brote de influenza porcina pues, según él, los primeros signos aparecieron desde marzo. Las autoridades sanitarias, dijo, somos orientadas a no ocultar casos graves (...) es necesario tener responsabilidad con la salud del pueblo, en especial con aquellos que están en tránsito de un país a otro. La versión de la tardanza hizo que la Casa Blanca expresara su percepción de que no le fue ocultada información sobre la propagación desatada del virus cuando el presidente Obama visitaba México.
El tratamiento de los ciudadanos mexicanos como menores de edad a los que sólo se suministra información insuficiente, dosificada y previamente tratada ha generado la sensación de que además de la realidad epidémica en grado ascendente hay errores gubernamentales graves, relacionados con la desatención oportuna de los problemas ecológicos de todo el país (un ejemplo fuerte, el de las Granjas Carroll, en Veracruz) y con el abordamiento tardío, tal vez criminalmente tardío, del caso de la influenza porcina. A ello se añaden las fundadas dudas sobre los laboratorios, firmas y empresas beneficiarios de los gastos gubernamentales de urgencia y sobre la manera en que esta administración blindada habrá de usar los préstamos cuantiosos que para enfrentar las crisis concertó semanas atrás y los recientemente adquiridos.
Pero, a ojos de un buen número de mexicanos mediáticamente manipulables, todo parece haber cambiado: el Estado que ayer era considerado fallido ahora es eficiente y oportuno, los funcionarios estadunidenses que sobrevolaban rapazmente México ahora son compañeros de viaje médico, el ocupante de Los Pinos que estaba entrampado en una guerra perdida contra el narco ahora se dedica a la noble atención de problemas epidemiológicos, los funcionarios que ayer eran ejemplo de mediocridad e irresponsabilidad ahora pretenden mostrarse ejemplarmente activos, y los feos enredos de la prescindible política quedan apagados o marginados por la obligada consternación nacional cuyas aristas operativas y ejecutivas solamente los apátridas se atreverían a pasar por el cedazo de la crítica o el razonamiento. La política (y el negocio) del miedo pretende abatir la libertad de pensamiento y convertir a los ciudadanos en rebaño cuyo cencerro es electrónico. Los que ayer tan mal obraban hoy han de ser aceptados como próceres dignos de olivo; loor a los que han hundido al país (la larga historia oscura del priísmo, el engaño panista de cambio que ha acabado en peores páginas y las alternativas perredistas convertidas en burocracia igual de corrupta y oportunista) porque de ellos ha de ser el reino de los ciegos.
La patria asustada deja el terreno de lo público para refugiarse en lo privado. La verdadera contracción económica ha comenzado y la dimensión de la crisis global pasa ahora por el retraimiento social y el riesgo de la abstención cívica y política extremas. Cual si hubiese sido activado un mecanismo de desmemoria programada, todos los expedientes malditos del sistema pretenden haber sido borrados para dar paso al disquete de la unidad nacional por razones de epidemia mayor. El gobierno del contratismo ejemplificado por el difunto Mouriño (Cid Campeador en las batallas de la Lotería Nacional por transferir fondos públicos a campañas panistas en Campeche) no ha de estar bajo sospecha de ejercer similares criterios de comisionista. El personaje que ha aprovechado toda oportunidad para tratar de legitimarse no debe caer en la hipótesis de manipular electoralmente la realidad innegable de una crisis de salud, mucho menos de ocultar la información o de haber atendido tardíamente (como ha sucedido en muchos otros casos) un problema grave del cual se tenían indicios desde semanas atrás.
En el fondo de todo están la corrupción institucionalizada y las instituciones corroídas. Luego de la larga noche priísta de saqueo, los panistas han multiplicado los milagros de la conversión de lo público en privado (y, viendo las listas de los políticos destacados que podrían haber formado parte de una administración federal perredista, vale deducir que las historias de corrupción habrían continuado y crecido). En particular, el pensamiento neoliberal desatado a partir del delamadridismo (con la ejecución sublime de Salinas y Zedillo, cada cual con sus matices) y sostenido por el panismo con sus dos ocupantes de Los Pinos, ha disminuido intencionalmente la atención a aquellos individuos que no hubiesen tenido la capacidad para tener éxito conforme a las leyes del mercado. Las políticas sociales fueron aplicadas en función de estrategias electorales pero más allá de esos usos se fueron reduciendo la atención real a las personas y el funcionamiento de instituciones como el Seguro Social y el ISSSTE. El saqueo cínico realizado por el foxismo empobreció a la nación a pesar de los excedentes petroleros, y las obsesiones militares de Calderón han destinado sumas desproporcionadas a las movilizaciones militares por todo el país en lugar de utilizar esos recursos para declararle una guerra verdadera a la pobreza y la injusticia social.
Mas no todo ha de ser apagamiento. La Bolsa Mexicana de Valores ha demostrado solidaridad gremial y espíritu de cuerpo al rescatar a Luis Téllez y convertirlo en su nuevo directivo. Los líderes patronales del cetemismo anuncian que conforme a las disposiciones de salud cancelan la oportunidad de desahogo obrero encabritado que podría ser el desfile del próximo 1º. Pero, mientras tiembla en la ciudad de México, para completar cuadros de desasosiego social, ¡hasta mañana, en esta columna acostumbrada a remar contra corriente
Desde marzo
El reino de los ciegos
Julio Hernández López
El perredista Carlos Navarrete (centro), durante una conferencia de prensa. El sol azteca dio a conocer la cancelación del festejo por el vigésimo aniversario de la fundación de su partido, programada para el 5 de mayo. El resto de los institutos políticos informaron también sobre las medidas precautorias que tomarán para evitar contagios de influenzaFoto La Jornada
Un fantasma atosiga a la administración calderónica, el del ocultamiento de información. No sólo en relación con lo que sucede día a día a partir de que la crisis ha sido declarada, sino incluso en términos internacionales. Ayer, por ejemplo, el director de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil, Agenor Álvares da Silva, criticó a México por haberse tardado en alertar sobre el brote de influenza porcina pues, según él, los primeros signos aparecieron desde marzo. Las autoridades sanitarias, dijo, somos orientadas a no ocultar casos graves (...) es necesario tener responsabilidad con la salud del pueblo, en especial con aquellos que están en tránsito de un país a otro. La versión de la tardanza hizo que la Casa Blanca expresara su percepción de que no le fue ocultada información sobre la propagación desatada del virus cuando el presidente Obama visitaba México.
El tratamiento de los ciudadanos mexicanos como menores de edad a los que sólo se suministra información insuficiente, dosificada y previamente tratada ha generado la sensación de que además de la realidad epidémica en grado ascendente hay errores gubernamentales graves, relacionados con la desatención oportuna de los problemas ecológicos de todo el país (un ejemplo fuerte, el de las Granjas Carroll, en Veracruz) y con el abordamiento tardío, tal vez criminalmente tardío, del caso de la influenza porcina. A ello se añaden las fundadas dudas sobre los laboratorios, firmas y empresas beneficiarios de los gastos gubernamentales de urgencia y sobre la manera en que esta administración blindada habrá de usar los préstamos cuantiosos que para enfrentar las crisis concertó semanas atrás y los recientemente adquiridos.
Pero, a ojos de un buen número de mexicanos mediáticamente manipulables, todo parece haber cambiado: el Estado que ayer era considerado fallido ahora es eficiente y oportuno, los funcionarios estadunidenses que sobrevolaban rapazmente México ahora son compañeros de viaje médico, el ocupante de Los Pinos que estaba entrampado en una guerra perdida contra el narco ahora se dedica a la noble atención de problemas epidemiológicos, los funcionarios que ayer eran ejemplo de mediocridad e irresponsabilidad ahora pretenden mostrarse ejemplarmente activos, y los feos enredos de la prescindible política quedan apagados o marginados por la obligada consternación nacional cuyas aristas operativas y ejecutivas solamente los apátridas se atreverían a pasar por el cedazo de la crítica o el razonamiento. La política (y el negocio) del miedo pretende abatir la libertad de pensamiento y convertir a los ciudadanos en rebaño cuyo cencerro es electrónico. Los que ayer tan mal obraban hoy han de ser aceptados como próceres dignos de olivo; loor a los que han hundido al país (la larga historia oscura del priísmo, el engaño panista de cambio que ha acabado en peores páginas y las alternativas perredistas convertidas en burocracia igual de corrupta y oportunista) porque de ellos ha de ser el reino de los ciegos.
La patria asustada deja el terreno de lo público para refugiarse en lo privado. La verdadera contracción económica ha comenzado y la dimensión de la crisis global pasa ahora por el retraimiento social y el riesgo de la abstención cívica y política extremas. Cual si hubiese sido activado un mecanismo de desmemoria programada, todos los expedientes malditos del sistema pretenden haber sido borrados para dar paso al disquete de la unidad nacional por razones de epidemia mayor. El gobierno del contratismo ejemplificado por el difunto Mouriño (Cid Campeador en las batallas de la Lotería Nacional por transferir fondos públicos a campañas panistas en Campeche) no ha de estar bajo sospecha de ejercer similares criterios de comisionista. El personaje que ha aprovechado toda oportunidad para tratar de legitimarse no debe caer en la hipótesis de manipular electoralmente la realidad innegable de una crisis de salud, mucho menos de ocultar la información o de haber atendido tardíamente (como ha sucedido en muchos otros casos) un problema grave del cual se tenían indicios desde semanas atrás.
En el fondo de todo están la corrupción institucionalizada y las instituciones corroídas. Luego de la larga noche priísta de saqueo, los panistas han multiplicado los milagros de la conversión de lo público en privado (y, viendo las listas de los políticos destacados que podrían haber formado parte de una administración federal perredista, vale deducir que las historias de corrupción habrían continuado y crecido). En particular, el pensamiento neoliberal desatado a partir del delamadridismo (con la ejecución sublime de Salinas y Zedillo, cada cual con sus matices) y sostenido por el panismo con sus dos ocupantes de Los Pinos, ha disminuido intencionalmente la atención a aquellos individuos que no hubiesen tenido la capacidad para tener éxito conforme a las leyes del mercado. Las políticas sociales fueron aplicadas en función de estrategias electorales pero más allá de esos usos se fueron reduciendo la atención real a las personas y el funcionamiento de instituciones como el Seguro Social y el ISSSTE. El saqueo cínico realizado por el foxismo empobreció a la nación a pesar de los excedentes petroleros, y las obsesiones militares de Calderón han destinado sumas desproporcionadas a las movilizaciones militares por todo el país en lugar de utilizar esos recursos para declararle una guerra verdadera a la pobreza y la injusticia social.
Mas no todo ha de ser apagamiento. La Bolsa Mexicana de Valores ha demostrado solidaridad gremial y espíritu de cuerpo al rescatar a Luis Téllez y convertirlo en su nuevo directivo. Los líderes patronales del cetemismo anuncian que conforme a las disposiciones de salud cancelan la oportunidad de desahogo obrero encabritado que podría ser el desfile del próximo 1º. Pero, mientras tiembla en la ciudad de México, para completar cuadros de desasosiego social, ¡hasta mañana, en esta columna acostumbrada a remar contra corriente
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