Otra visión del Bicentenario-- Polimnia Romana

Otra visión del Bicentenario
Polimnia Romana
21 de Septiembre, 2010 - 00:00 | 1 comentarios


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Como para sacudirnos la mala experiencia de los frívolos festejos del Bicentenario que organizó el gobierno espurio, ayer se publicó en La Jornada una breve entrevista al maestro e historiador Miguel León Portilla. Con la sabiduría que lo caracteriza planteo una pregunta que todos deberíamos hacernos, ¿qué ha pasado con los indígenas en los dos siglos del México independiente?

La respuesta la tenemos a la vista, no sólo no avanzaron en la reivindicación de sus antiguos derechos, sobre todo territoriales, ni en lograr mayores espacios de igualdad, justicia y libertad, sino que experimentaron muchos retrocesos. León Portilla refiere que los indígenas participaron tanto en la lucha de Independencia como en la Revolución, y miles de ellos murieron sin que se reconociera nunca su participación. Los ideales de libertad y justicia de Hidalgo y de Morelos estaban inspirados precisamente en la forma inhumana en la que los indígenas fueron tratados por los conquistadores.

Por eso es importante resaltar en estas fechas no sólo la Independencia, que es importante, sino la situación de desigualdad, de miseria y de injusticia que sigue vigente para millones de mexicanos, entre ellos los indígenas. Hay que tomar conciencia del retroceso que han sufrido nuestros pueblos originarios, cuya cultura sigue viva a pesar del intento permanente de los poderosos por extinguirla. León Portilla anunció que la UNAM está por terminar la edición de su nuevo libro, titulado "Independencia, Reforma y Revolución.

¿Y los indios qué?"Es una buena noticia porque seguramente su contenido permitirá a los lectores, ojala que sean muchos, reflexionar sobre los motivos que nos deben mover para girar el rumbo y hacer de México un país más justo para todos. No es posible que la enajenación del pueblo, a través de los medios de comunicación, nos haga olvidar la razón por la que tantos hombres dieron su vida, y que la celebración de estas fiestas se reduzca a despilfarrar el dinero en desfiles sin significado.

Tampoco es posible que la iglesia, que excomulgó a Hidalgo y a Morelos, aproveche estas fechas para seguir descalificando en sus misas a los movimientos sociales que luchan, como entonces, por igualdad y justicia. No hay verdadera sabiduría en los que se dicen guías espirituales si en vez de contribuir a la reconciliación y a la paz utilizan la descalificación para confundir a los feligreses.

Esto último lo digo porque en el Distrito Federal existe una campaña de odio contra el gobierno capitalino por las leyes que se han aprobado, hay sacerdotes que no pierden la ocasión para infundir en la gente un sentimiento de discriminación hacia los que piensan y actúan diferente.

Si realmente fueran sabios, llevarían a cabo el cristianismo y propiciarían el amor y el respeto a los semejantes. Yo pienso que nuestros indígenas son los que poseen la verdadera sabiduría y, por supuesto, los hombres como el maestro Miguel León Portilla que ha dedicado su valioso tiempo en conocer y difundir nuestro pasado cultural.
21 de Septiembre, 2010 - 00:00 | 1 comentarios


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Como para sacudirnos la mala experiencia de los frívolos festejos del Bicentenario que organizó el gobierno espurio, ayer se publicó en La Jornada una breve entrevista al maestro e historiador Miguel León Portilla. Con la sabiduría que lo caracteriza planteo una pregunta que todos deberíamos hacernos, ¿qué ha pasado con los indígenas en los dos siglos del México independiente?

La respuesta la tenemos a la vista, no sólo no avanzaron en la reivindicación de sus antiguos derechos, sobre todo territoriales, ni en lograr mayores espacios de igualdad, justicia y libertad, sino que experimentaron muchos retrocesos. León Portilla refiere que los indígenas participaron tanto en la lucha de Independencia como en la Revolución, y miles de ellos murieron sin que se reconociera nunca su participación. Los ideales de libertad y justicia de Hidalgo y de Morelos estaban inspirados precisamente en la forma inhumana en la que los indígenas fueron tratados por los conquistadores.

Por eso es importante resaltar en estas fechas no sólo la Independencia, que es importante, sino la situación de desigualdad, de miseria y de injusticia que sigue vigente para millones de mexicanos, entre ellos los indígenas. Hay que tomar conciencia del retroceso que han sufrido nuestros pueblos originarios, cuya cultura sigue viva a pesar del intento permanente de los poderosos por extinguirla. León Portilla anunció que la UNAM está por terminar la edición de su nuevo libro, titulado "Independencia, Reforma y Revolución.

¿Y los indios qué?"Es una buena noticia porque seguramente su contenido permitirá a los lectores, ojala que sean muchos, reflexionar sobre los motivos que nos deben mover para girar el rumbo y hacer de México un país más justo para todos. No es posible que la enajenación del pueblo, a través de los medios de comunicación, nos haga olvidar la razón por la que tantos hombres dieron su vida, y que la celebración de estas fiestas se reduzca a despilfarrar el dinero en desfiles sin significado.

Tampoco es posible que la iglesia, que excomulgó a Hidalgo y a Morelos, aproveche estas fechas para seguir descalificando en sus misas a los movimientos sociales que luchan, como entonces, por igualdad y justicia. No hay verdadera sabiduría en los que se dicen guías espirituales si en vez de contribuir a la reconciliación y a la paz utilizan la descalificación para confundir a los feligreses.

Esto último lo digo porque en el Distrito Federal existe una campaña de odio contra el gobierno capitalino por las leyes que se han aprobado, hay sacerdotes que no pierden la ocasión para infundir en la gente un sentimiento de discriminación hacia los que piensan y actúan diferente.

Si realmente fueran sabios, llevarían a cabo el cristianismo y propiciarían el amor y el respeto a los semejantes. Yo pienso que nuestros indígenas son los que poseen la verdadera sabiduría y, por supuesto, los hombres como el maestro Miguel León Portilla que ha dedicado su valioso tiempo en conocer y difundir nuestro pasado cultural.