Lo dije en Twitter el lunes: la violencia que se desató en la manifestación del SME no es justificable. Ni debe la izquierda aplaudirle. En un movimiento pacífico, como lo es el lopezobradorismo, ese tipo de actos no tienen cabida.
El SME culpó a infiltrados por la violencia, que incluyó 4 autos quemados. Pero el SME tiene año y medio manifestándose en la calle. Era como para que ya hubieran aprendido a detectar a infiltrados, neutralizarlos y entregarlos a las autoridades.
Se lo digo a Martín Esparza: diseñen una estratega de neutralización de infiltrados y déjense de payasadas. De lo contrario dan parque para que los ataquen. Tengan más inteligencia y organización para manifestarse, carajo.
Las autoridades del DF detuvieron a 12 por los hechos de violencia, de los cuales 4 fueron confirmados como integrantes del SME. Al día siguiente, Martín Esparza declaró que el SME se hará responsable por los actos de sus agremiados, aunque culpó a la Policía Federal de iniciar la violencia.
Pero hay un detalle...
La Procuraduría General de Justicia del DF declaró que no se sabe el origen de los autos quemados y que ninguno de sus dueños ha reclamado.
¿De dónde salieron esos autos? Por cierto que por lo menos dos de ellos eran modelos muy antiguos que parecían mas para deshuesadero que para uso diario.
Huele fuerte a montaje entonces. Lo que falta saber es si los autos fueron llevados por el SME para quemarlos, o si fueron llevados por PAN o el PRI para atacar mediaticamente al SME.
En ambos casos no se justifican los hechos, pero igual resulta increible que nadie reclame por esos autos.
De todo esto se debe decir que hizo bien el SME en responzabilizarse por los actos de sus agremiados y que hizo bien el gobierno de izquierda del DF por detener a quienes violen la ley. Como dice AMLO citando a Benito Juárez: “¿y qué esperan para juzgarlos?”
Qué diferencia de la manera en la que Enrique Peña Nieto solapó la corrupción de la policía del Edomex diciendo que “se da en todo el país”, pero sin remover del cargo al policía que admitió permitirle operar a una banda de ladrones de transporte público por 20 mil pesos.
Esa es la diferencia entre el PRIAN y la izquierda: La izquierda castiga a los que cometen actos indebidos. La derecha los solapa.
Por eso mejor Encinas 2011 y AMLO 2012.
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PD: A ver cómo le hace ahora el ex-candidato presidencial panista, Felipe Calderón, para salir de esta. Justo el día que pidió que ya no le estén dirigiendo a él los “ya basta” por su inútil guerra contra el narco, nos enteramos de que al embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhán, se le ocurrió escribirle al diario The Dallas Morning News para pedirle que no le llamen terroristas a los narcos mexicanos porque en realidad, dijo, los narcos mexicanos son como grandes empresarios de alguna empresa internacional. ¿Qué pensarán de eso Carlos Slim, Emilio Azcárraga, Lorenzo Zambrano, Lorenzo Servitje, Roberto González, Roberto Hernández, Ricardo Salinas Pliego, Claudio X González, Gastón Azcárraga, José Luis Barraza, Roberto Bailleres, etc? ¿Tenía entonces razón el Peje al comparar a los grandes empresarios con una mafia?
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