La mentira mil veces repetida de que Andrés Manuel López Obrador es un político violento e intolerante, se vendría abajo, para la gente que la ha creído, si los medios de comunicación realizaran su trabajo con honestidad y profesionalismo.
Empeñados en atacar la opción de un cambio real en la forma de hacer política, la mayoría de los medios de comunicación continúan atacando a López Obrador, al Movimiento que encabeza por todo el país, y distorsionando la realidad.
Lo cierto es que el tiempo y los acontecimientos le han venido dando la razón a López Obrador, y también, porque hay que decirlo, han puesto en evidencia para millones de mexicanos libres y conscientes que la única salida pacífica que tenemos para detener la catástrofe que se vive en México es, por el momento, apostarle al Nuevo Proyecto Alternativo de Nación que impulsa el Movimiento Regeneración Nacional, MORENA.
El mensaje semanal que transmitió vía Internet López Obrador esta semana, muestra la serenidad de Andrés Manuel, quien explica con palabras sencillas la manera en la que podemos salir adelante. Lo invito a escucharlo.
http://www.youtube.com/watch?v=2nfSVtEYSBU
Para recuperar la paz es necesario, indispensable, actuar sin violencia.
El hecho de que lo que él propone y denuncia no convenga a los grandes intereses de la oligarquía que nos domina, no significa que sea violento. Al contrario, engañar a la población, tomar medidas antipopulares, inconstitucionales, y hacer uso del poder para mantener los privilegios de algunos, la corrupción, la impunidad, la desigualdad y la injusticia son formas de una violencia lenta y perniciosa contra el pueblo y la nación.
Es como si los medios nos dijeran que no está lloviendo mientras muestran imágenes de personas resguardadas bajo una lona cuando la gente se empapa por la lluvia que, además, inunda sus viviendas, y alguien que grita por las plazas: ¡llueve, llueve!, es calificado de violento y alarmista.
¿Acaso la mayoría de la gente no padece las consecuencias de los malos gobiernos priistas y panistas, y por qué no decirlo también, algunos perredistas?
¿Por qué otro motivo que no sea conservar privilegios los medios se adhieren a la derecha para que nada cambie?
Qué conveniente sería para todos que se permitiera difundir el avance del Movimiento que encabeza López Obrador, que se mostraran imágenes de la cantidad de gente que sigue acudiendo a las plazas públicas para escuchar palabras de aliento y esperanza.
No me he cegado, como escriben algunos lectores de mi columna. Lo que sucede es que tengo la oportunidad de constatar con mis propios ojos y el resto de mis sentidos esa fe que millones de mexicanos tienen en la llegada de un cambio que nos beneficie a todos. No en el mesías tropical como calificaron a López Obrador, sino en la serenidad de las palabras de un hombre que ve hundirse la barca y tiene en sus manos las redes para ayudarnos a llegar con vida a un puerto seguro.
Las mentiras, por el contrario, no pueden transmitir jamás ese estado de paz interior. Siempre se envuelven y adornan para disfrazar la verdadera intención de los que las pronuncian.
A quienes piensan que López Obrador y su Proyecto de Nación no son la única salida pacífica en estos momentos para revertir los daños que nos han causado los malos gobiernos, los invito a escudriñar entre la trayectoria política y los discursos de quienes podrían abanderar esta causa. Los invito a encontrar en sus palabras la serenidad que necesitamos para recuperar la paz.
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