Después de una reunión de 30 minutos sostenida a puerta cerrada, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Marcelo Ebrard, pidió la renuncia a Martí Batres, quien fungía como secretario de Desarrollo Social capitalino
Por la mañana de hoy, Ebrard declaró que si Batres no estaba “a gusto” por “congruencia” debía renuciar a su cargo, esto luego de que el segundo hizo público su desacuerdo por la asistencia del mandatario del DF al Museo de Antropología e Historia con motivo del Informe de gobierno del presidente Felipe Calderón, en el cual ambos gobernantes se estrecharon por primera vez la mano durante la presente administración.
La siguiente es una entrevista que etcétera sotuvo con Martí Batres, la cual resulta pertinente publicarla a raíz de los acontecimientos que desembocaron en la salida del hasta hoy titular de Desarrollo Social del GDF.
Lenia, Valentina y Martí... ¿tu familia es revolucionaria de cepa pura?
Mis padres participaron en el movimiento magisterial de 1956-59 cuando eran muy jóvenes; comenzaban a dar clases en primaria. A partir de ahí se hicieron de una formación política democrática de izquierda y nosotros crecimos con esos valores. Además, tengo otras dos hermanas, Viétnika y Olinamil, que no militan políticamente pero que coinciden en ideales, valores y concepciones.
Los maestros espirituales dicen que la única revolución posible y real es la personal ¿cuál de tus patologías o demonios has logrado revolucionar realmente?
La revolución personal es fundamental, pero también la revolución colectiva. Se necesita ver al ser humano en sus dos dimensiones, la individual y la colectiva. Por lo demás, no tengo ninguna patología ni nada de eso.
¿No tienes demonios?
Ni patologías ni demonios.
¿Cómo iniciaste tu carrera política?
Un 10 de junio de 1981, cuando iba a la secundaria junto con mi hermana Viétnika. Le pedimos permiso a mi papá para asistir a la marcha de los diez años del 10 de junio de 1971; él nos autorizó y fuimos. Yo quedé muy impresionado, estaba reciente el registro del Partido Comunista Mexicano y también la Revolución sandinista en Nicaragua. Había toda una efervescencia en el país, con cambios nacionales e internacionales y, a finales de ese mismo año, se creó el Partido Socialista Unificado de México (PSUM), del que soy fundador. También en 1981 comencé a participar en la actividad política y nunca dejé de hacerlo, hasta ahora continúo.
¿Por qué decidiste ser político?
Yo no decidí ser político: decidí participar en la lucha política, que es una cosa diferente. Aun ahora, independientemente de las responsabilidades que tenga, me considero un luchador social.
¿El PRD es partido de izquierda o sólo de oposición?
La oposición la representa fundamentalmente el movimiento que encabeza Andrés Manuel López Obrador. Por otro lado, creo que la izquierda es más que un partido; es una concepción de la sociedad que busca la equidad, la igualdad, la transformación de la sociedad. La izquierda atraviesa los partidos y donde la izquierda tiene más presencia es en el PRD, pero no nada más en el PRD. Digamos que hay mucha izquierda fuera de los partidos; la hay en la cultura, en la sociedad y en las organizaciones de la sociedad civil.
¿Marcelo Ebrard o López Obrador?
Pues ellos lo van a decidir, ya se pusieron de acuerdo, tienen un camino trazado. Finalmente, ellos han platicado sobre cómo resolverlo. Sin embargo, para mí lo fundamental es la transformación del país, por eso considero un aporte muy importante que exista ya una propuesta de transformación que presentó el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Ante todo, esto no es una cuestión de personalidades sino de programas; fundamentalmente es una cuestión de transformación; lo más importante es para qué se quiere el gobierno, qué quieres hacer desde el gobierno
¿El príncipe o Dios mío por favor hazme viuda?
Bueno, yo creo que, este… obedecen a dimensiones muy distintas estas dos obras, ¿no?, estos dos textos. El príncipe es una obra clásica de la ciencia política universal.
Pero el otro libro no lo has leído, ¿o sí?
Como la vida te alcanza para leer un determinado número de libros, debes escoger muy buenas obras para leer, y creo que El príncipe es una muy buena lectura.
¿Mariana Gómez del Campo o Gabriela Cuevas?
No sé, yo creo que corresponde a los jóvenes del PAN decidir cuál es su liderazgo juvenil.
¿Tortas o garnachas?
Si nos ubicamos en la vitamina T, tenemos tortillas, tacos, tlacoyos, un poco más cargados hacia la tradición nacional.
¿Jennifer Aniston o Angelina Jolie?
…Eeemmmm, Jennifer López.
¿Whisky o tepache?
Tepache
¿Cómo llegaste a ser columnista?
Tenía 18 años de edad y escribí un artículo sobre el PSUM en 1985; lo llevé al periódico unomásuno, toqué la puerta de Huberto Bátiz, que era el coordinador editorial del periódico en aquél entonces (el director era Manuel Becerra Acosta), y publicó mi artículo porque le gustó. Para mí era muy difícil que sucediera eso; realmente tenía pocas expectativas, pero me pidió más y a partir de entonces comencé a llevar mis artículos. Escribí ahí de 1985 hasta 1992, luego colaboré esporádicamente en otros medios; en Milenio Diario de 2000 a 2002; luego en La Jornada de 2002 a 2007; de entonces a la fecha en El Universal; he escrito en revistas académicas y políticas desde 1985. Soy autor de más de mil artículos periodísticos, políticos y académicos.
Además de tus libros y columnas, ¿escribes poesía o narrativa?
No, fundamentalmente artículos periodísticos, de análisis político, algunos sobre temas académicos, sobre temas jurídicos, también he escrito numerosas iniciativas legislativas, narraciones y crónicas, poesía no, al menos hasta la fecha.
¿Libros electrónicos o impresos?
Prefiero libros impresos.
¿Pan o circo?
Tortilla, maíz; digamos, maíz y cultura.
¿Ves televisión?
Veo muy poca; llego ya muy tarde a mi casa, me queda poco tiempo, a veces veo una película.
¿Eres lector de periódicos?
Sí, de periódicos, de revistas.
¿Qué te molesta de un político?
Yo creo que la idea de hacer política y de decidir al margen de la gente es lo más criticable en la política; considero que la política se debe hacer con la gente, de acuerdo con los intereses de la gente.
¿A qué político admiras?
El político que más admiro es el general Lázaro Cárdenas del Río, él ha demostrado lo que se puede hacer desde el Estado; en seis años transformó a México, y el desarrollo que tuvimos en los 40 años posteriores al fin de su sexenio se debió a las bases que él sentó. En un lapso muy breve expropió el petróleo, construyó una industria nacional, grandes instituciones educativas, masificó la educación, entregó la tierra a los campesinos, generó una economía social.
¿Un político tiene amigos?
Sí, pues con los que convive los domingos, los domingos después de las 3 de la tarde.
Tus autores de cabecera...
Octavio Paz, como ensayista, sobre todo; como poeta también, pero es un gran ensayista. Una buena parte de sus grandes ensayos –creo que yo que de los más brillantes— están reunidos en El ogro filantrópico. Otro de mis autores favoritos es Arnaldo Córdova, que para mí es el mejor politólogo de México, el mejor analista de lo que fue el sistema político mexicano, sobre todo en la época del partido de Estado.
Otro de los autores que para mí es fundamental es José Revueltas, gran ensayista, gran escritor y novelista. Otro de los autores que me ha impresionado es Milan Kundera, creo que es extraordinario. También, como científico de las ciencias sociales, Pablo González Casanova; como politólogo, Luis Javier Garrido; como intelectual cercano de las causas de la gente, Enrique Dussel, para poner algunos ejemplos; pero soy injusto, porque hay muchos más.
¿Cuáles son tus virtudes fuera de la política?
Bueno, no soy yo quién se tiene que analizar.
Pero uno se conoce, ¿no?
Me gusta mucho el cine, leer, escribir, la convivencia con mis familiares y seres queridos…, podrían considerarse virtudes.
Sí, pero algo así como meterse a la cocina, la carpintería, no sé.
Pues, la cocina los domingos. A veces cocino junto con mis hijas, a ellas les gusta sobre todo hacer espagueti, sopas, caldos de pollo. No lo hago tan frecuentemente porque no tengo tanto tiempo, pero los domingos a veces. También puedo decir, hablando de ciertas características, que no fumo, no bebo.
Si no te hubieras dedicado a la política, ¿a qué lo hubieras hecho?
¡Ah!, buena pregunta, porque hay un tema del que no he hablado: pintar. Me dedicaba a pintar al óleo, y todavía cuando empecé a hacer política, seguí pintando muchos años, pero pinto más o menos desde los nueve. Si no hubiera sido político me dedicaría a la pintura.
¿Qué te hace llorar?
Te voy a decir de una película que me hizo llorar, María de mi corazón; es verdaderamente estremecedora.
¿Eres usuario de las redes sociales?
Sí, creo que es una herramienta que ha revolucionado a la comunicación, es universalista y democratizadora. En las redes sociales eres tu propio medio de comunicación. Tiene sus limitaciones actualmente, porque mucha gente no tiene acceso a estas tecnologías, pero va a crecer y crecer y no dejará de hacerlo.
¿Te gustaría ser Trending Tropic?
Esa es una parte de la medición, pero no olvidemos que todavía la mayoría de la población no tiene instrumentos tecnológicos.
¿Qué te ha dado el DF y qué le has dado al DF?
Bueno, es una ciudad maravillosa, yo he vivido aquí toda mi vida. Aquí nací, aquí he crecido, aquí he vivido y aquí he luchado mucho. He tenido responsabilidades muy importantes y prácticamente he formado parte de los grandes movimientos del cambio, por lo menos del movimiento que dio origen a la unificación de la izquierda desde principios de los 80, del movimiento que hizo el rescate y reconstrucción posterior a los temblores de 1985, del movimiento que defendió la gratuidad de la educación pública superior, del movimiento con Cuauhtémoc Cárdenas en 1988, entre otros.
¿Con qué personaje de la política internacional te gustaría platicar?
Me voy a remontar al pasado. Algunos de esos grandes personajes es Francois Miterrand, fue el mejor político de los socialistas de Europa, el más definido, el más decidido de los socialistas de la Europa occidental. También con Mijail Gorvachov; creo que fue un gran democratizador de la Unión Soviética, independientemente del desenlace que se le fue de las manos, pero finalmente tiene un gran mérito.
Me gustaría platicar con Luis Ignacio Lula da Silva, es un líder muy importante, con un gran éxito en Brasil pero con una influencia muy importante en todo el mundo. Igualmente Evo Morales, lo considero un líder muy importante; Salvador Allende, tiene un gran mérito porque fue el pionero de la vía democrática por la izquierda, entre otros. Obama se me ha hecho muy interesante, el hecho de que un afroamericano haya llegado a la presidencia de Estados Unidos tiene un mérito histórico innegable; nos hubiera gustado que desarrollara más cosas…
¿A qué personaje de la política nacional le sacarías la vuelta?
La lista es muy larga, ¿no?
¿Por ejemplo?
Pues, para empezar al Innombrable. Ha hecho un daño terrible a México, creo que es el principal responsable de la crisis que vivimos, porque él generó esta brutal concentración de la riqueza y este modelo económico que tiene a México postrado prácticamente.
¿Quién es tu héroe nacional?
Tengo varios; por ejemplo, Canek, el indígena maya que se rebeló mucho antes de la Independencia mexicana; luego están Hidalgo y Morelos, Emiliano Zapata y Francisco Villa; Lázaro Cárdenas, Benito Juárez, Ricardo Flores Magón y Leona Vicario, entre otros. Esta última es un personaje muy interesante: mujer, joven, es una heroína muy joven, creo que aquí deberíamos hacer más justicia.
Un héroe que representa muchas cosas para mí es José María Morelos y Pavón; la idea de la república, de la democracia representativa, de la soberanía popular, la independencia, el pluriculturalismo, la idea de moderar la opulencia y la indigencia, la idea de la igualdad, todas están en él.
¿Cuál es tu música preferida?
Varias. La afroantillana me gusta escucharla y bailarla; me gusta el son cubano, pero también la cumbia mexicana presente en los barrios populares de la Ciudad de México; otros ritmos internacionales como el reggae; el reggaeton, que es muy fuerte; me gusta el hip hop.
¿Te gusta bailar?
Sí, me gusta bailar mucho.
¿Qué haces en tus tiempos libres?
Bailo. A veces voy a bailar, a veces al cine; leo, escribo, estoy con mis seres queridos.
¿Qué es lo que más te gusta del DF?
En el DF hay todo; si quieres una buena película, la hay; si quieres un buen libro, lo encuentras aquí, si quieres ir a un buen parque, hay muchos; el DF tiene mucho para disfrutar, es un gran atractivo y la vida aquí es permanente, es decir, a todas horas hay algo que hacer.
Además, es un espacio de transformaciones; todo lo novedoso empieza en el DF, en todos los terrenos, en la cultura, la política. Mi experiencia en la lucha política de la ciudad es que lo que es novedoso empieza en el DF; aquí hacemos algo y comienza a replicarse, así como cuando avientas una piedrita en el agua las ondas se replican hacia el exterior.
Qué desgasta más ¿el poder o el no poder?
Cuando tienes ideales claros de lo que quieres y trabajas para ello, no vives un desgaste, vives resultados y vives frutos. Es el trabajo, es la acción lo que te va a dar frutos y resultados de un horizonte.
A un año del término de la administración de Marcelo Ebrard, ¿qué pendientes tiene la Sedesol?
Hay que desarrollar, no sólo como pendiente de la Sedesol sino del propio gobierno de la ciudad, otras alternativas sociales, otras líneas de acción, sobre todo dirigidas a la infancia y a la juventud. Es decir, nos falta ahondar en lo que son derechos sociales de los niños menores de cinco años, y nos falta ahondar mucho en las políticas sociales dirigidas a jóvenes que no encuentran escuela o que no encuentran trabajo. Nos falta vincular más política social con política económica, ambas tienen que crecer para generar la riqueza que, a su vez, sea la base del nuevo bienestar social. Nos falta trabajo, enfatizar el tema del trabajo.
¿Dónde te ves en diez años?
Luchando. Toda mi vida voy a luchar desde este lado. Toda mi vida voy a luchar desde la izquierda.
¿Cuál ha sido la aportación del PRD en los 14 años que ha gobernado el DF?
Son muchas, las podemos resumir en algunos fragmentos: con Cuauhtémoc Cárdenas se rescató al gobierno del saqueo de las mafias priístas, pues el gobierno estaba organizado para el saqueo de la propia administración.
Con Andrés Manuel López Obrador se dio un salto muy importante en la política social y se retomó la obra pública como palanca de desarrollo económico. En este período de Marcelo Ebrard se dieron libertades sociales inusitadas, especialmente las que tienen que ver con la diversidad sexual y la equidad de géneros. Son algunos ejemplos, pero hay muchos más.
¿Honestamente has soñado con hacer tu mudanza a la Jefatura de gobierno?
Por mi experiencia en estos años –desde la izquierda y como funcionario público— tengo plena claridad de lo que hay que hacer en la ciudad en los años venideros, en lo que hay que transformarla. Esperaré los tiempos legales para determinar qué vamos a hacer hacia adelante.
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