Israel Rodríguez J.
Luz y Fuerza del Centro (LFC) pretende cobrar a una jubilada que vive en un departamento medio de una zona no residencial de esta ciudad 67 mil 690 pesos por consumo de electricidad de un bimestre. Este es sólo un caso de una problemática que va creciendo y sufren miles de usuarios en el país.
A esta persona, afectada por una facturación excesiva, que apenas percibe una pensión de mil 800 pesos al mes, le tomaría poco más de tres años, destinando íntegro su ingreso, pagar su recibo, que ahora le llegó con un anexo urgente de cobro: “Aviso de corte del suministro de energía eléctrica. Su pago de luz no ha sido registrado. Le rogamos acudir de inmediato a la sucursal o agencia donde lo atendemos regularmente, a fin de evitarle mayores gastos y molestias si cortamos su servicio”, se lee en la notificación que recibió Nicolasa Cazales, cuya copia está en poder de este diario.
Los casos de cobros que superan la capacidad de pago de los usuarios se multiplican. “Lo que se debe hacer es derogar la tarifa doméstica de alto consumo (DAC) y dejar de subsidiar las tarifas industriales”, señaló Jorge Maya Gómez, representante de más de 3 mil condóminos de la Unidad Habitacional John. F. Kennedy.
Informó que, pese a que ha enviado misivas al presidente Felipe Calderón y al Congreso de la Unión, no ha recibido respuesta satisfactoria a su demanda. Solamente le dicen que la propuesta se analizará y se expondrá a las autoridades correspondientes.
El representante de los colonos de la delegación Venustiano Carranza señala también que están totalmente indefensos, porque la Procuraduría Federal del Consumidor tampoco resuelve la problemática de cobros excesivos, por lo que no queda otra opción que pagar o prescindir del servicio.
Ante la indefensión en que se encuentran más de 29 millones de usuarios de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y 5 millones más de LFC, quienes cada bimestre tienen que enfrentarse a la disyuntiva de comer o pagar su recibo de luz, el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) convocó al primer Encuentro Nacional por una Tarifa Social y Contra los Cobros Excesivos de Luz, a realizarse en el auditorio del SME, ubicado en avenida Insurgentes centro número 98, casi esquina con Antonio Caso, los días 29 y 30 de agosto.
De acuerdo con informes de trabajadores del sector eléctrico nacional, este grave problema social se inició con la reforma del ex presidente Carlos Salinas de Gortari a la Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica de diciembre de 1992, que abrió las puertas al capital privado para invertir en la generación de energía eléctrica, contraviniendo el párrafo sexto del artículo 27 constitucional, el cual establece la exclusividad de la nación en la prestación del servicio público de energía eléctrica.
Lo anterior se recrudeció en el sexenio de Vicente Fox, cuando en febrero de 2002 redujo drásticamente el subsidio a la tarifa doméstica y creó la tarifa doméstica de alto consumo, lo cual provocó un incremento inmediato, por arriba de 230 por ciento, y trajo como resultado que de diciembre de 2001 a julio de 2009 el precio de la tarifa doméstica, en sus siete rangos, se haya disparado más de 117 por ciento, mientras los salarios mínimos apenas aumentaron 35.8 por ciento en el mismo periodo.
Adicionalmente, como resultado de la llamada tarifa DAC, el precio de la energía eléctrica de diciembre de 2001 a julio de 2009 ha crecido más de 419 por ciento.
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