El periodista Michael Lewis explica en su libro Boomerang el problema de fondo que llevó a Grecia a la crisis: una enorme corrupción y desfalco gubernamental que se come a las finanzas públicas (creada por la derecha, para variar) y una raquítica recaudación fiscal.
Sumado, además, a la aplicación de medidas fiscales recomendadas por las mismas firmas de Wall Street que llevaron al mundo a la crisis en 2008.
Esto se ha traducido en endeudamiento, en la imposibilidad de pagar las deudas de Grecia a otras naciones —particularmente Alemania— y en la aprobación de medidas de austeridad que incluyen reducción del 22% del salario mínimo, despidos masivos en el sector público, desempleo de 21% y, anoche, violencia en las calles por la indignación contra las medidas de austeridad.
¿Les suena familiar? Debería México tiene los mismos ingredientes para este desastre:
1. Un enorme despilfarro en el gobierno, sueldos y prestaciones onerosas para la alta burocracia del PAN y del PRI.
2. No se recauda lo suficiente debido a que las grandes empresas no pagan completo el ISR gracias a sus privilegios fiscales.
3. Pérdida del poder adquisitivo del 42% en apenas un sexenio. Esto equivale a una reducción salarial de casi el doble de la que se aplicó en Grecia.
4. Desempleo que crece y crece.
5. Violencia desatada por todo el país debido a la gente que, ante la falta de oportunidades legales de empleo y de educación, optan por entrar a las filas del crimen organizado.
¿Le asusta lo que está pasando en Grecia? Pues le tengo malas noticias. Es exactamente lo que ya está pasando en México debido a las pésimas administraciones del PAN y del PRI.
¿Quiere que México ya NO se parezca a Grecia? Hay una solución: AMLO 2012.
Porque el PAN y el PRI son lo mismo.
Por eso mejor AMLO 2012.
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