Como la acusación de narco en Estados Unidos contra el ex gobernador priista de Tamaulipas tiene al PRI contra la pared, ayer a los priistas del congreso de Baja California se les ocurrió pedir que se investigue por nexos con el narco a los ex gobernadores panistas de BC Ernesto Ruffo Appel y Eugenio Elorduy.
Las acusaciones contra Ruffo y Elorduy no son nuevas. De hecho, la acusación contra Ruffo, de haberle dado protección al cártel de los Arellano Félix, la hizo el mismísimo Chapo Guzmán cuando estuvo preso durante el sexenio de Ernesto Zedillo. La documentación de las acusaciones contra Ruffo las pueden encontrar en el libro de Anabel Hernández Los Señores del Narco. Además lo acusan de haber recibido dinero del narco para su campaña en 1989.
A Elorduy lo acusan de tener nexos con la construcción de una planta de gas presuntamente relacionada con los Arellano Félix.
¿Son ciertas las acusaciones? Pues que lo investiguen. Pero el detalle es que al acusar al PAN de que sus gobernadores tienen nexos con el narco, el PRI lo único que logró fue demostrar una vez más que PAN y PRI son lo mismo.
¿O se supone que la gente debe votar por el PRI, que tiene gobernadores acusados de narco, sólo porque el PAN también?
No señor. Ni PAN ni PRI. Ya basta de cinismos y de cochinadas de los dos partidos. PAN y PRI son LO MISMO. Josefina Vázquez Mota y Enrique Peña Nieto son LO MISMO.
Por eso mejor AMLO 2012.
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