Por Polimnia Romana
05 de Marzo, 2009 - 00:51
Los engorrosos trámites en el ISSSTE, no sólo para solicitar un préstamo sino para reclamar salarios atrasados, jubilaciones detenidas o aguinaldos que se traspapelan, son algo así como la antesala del infierno.
Esto lo ignora Calderón puesto que el préstamo que él se otorgó como funcionario se lo entregó él mismo en su escritorio a dos días de firmar la solicitud, préstamo inmerecido por cierto ya que no llevaba ni 4 meses en el cargo. De verdad que no tiene ni la más remota idea de lo que implica formarse en una cola del ISSSTE, y peor aún llegar a la ventanilla con un empleado mal informado que sólo contesta: pues venga otro día.
Por si no fuera insultante ya este tortuguismo burocrático, todavía encima quiere que los trabajadores del estado que ganan una miseria - no todos eh, hay otros que se despachan con la cuchara sopera de Carstens -, se endroguen para pagar la deuda que tienen con los banqueros amigos de Calderón. En pocas palabras, que no se perjudique a los bancos por la deuda de tarjetas de crédito de la gente que las ocupa para alimentar a sus hijos ante el catarrito que se volvió pulmonía fulminante. Imposible bajar intereses, eso no va con él.
Ya no sabe qué inventar para pagar las facturas pendientes por el apoyo al fraude electoral.
¡Si los banqueros ya fueron rescatados con el dinero de todos los mexicanos! Ya se le olvidó a Calderón que aseguró en público que no aprobaría el Fobaproa y luego salió con que dijo su mamá que siempre sí.
Está realmente loco si piensa que la gente jodida va a cooperar con el calvario que significa pasar por el ISSSTE sólo para que los saca dólares duerman tranquilos. Por cierto, queremos los nombres y el propósito del saqueo de más de 22 mil millones de dólares, que aportó el Banco de México de octubre a febrero, según ellos, para detener la devaluación del peso.
Esto no es más que otro saqueo y otro Fobaproa en lo oscurito. Cuánta razón y peso cobran hoy las palabras de Andrés Manuel López Obrador, Presidente Legítimo de México. Por eso la gente sigue apoyándolo para lograr el cambio urgente que necesita este México tan herido.
¡NI UN VOTO AL PRI NI AL PAN!
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