Mientras aumenta el número de muertes injustificadas por todo el país y avanza por el sureste una Caravana de ciudadanos que piden paz con justicia y dignidad, los diputados del PRI y del PAN, que se dicen representantes del pueblo, intentaron aprobar ayer, sin discutir, la reforma a la Ley Orgánica de la Armada de México, que permite a militares realizar operativos en tierra contra el crimen organizado.
El diputado del PT, Enrique Ibarra, explicó que la Constitución limita a la Marina en la operatividad de tareas de seguridad y que su participación en dichos operativos estará sujeta a lo que en su momento disponga la Ley de Seguridad Nacional, que aún está a debate en las dos Cámaras del Congreso.
Lo que yo entiendo es que los diputados del PRI y del PAN pretendían aprobar una reforma a la Ley Orgánica de la Armada de México sin que se haya debatido ni aceptado aún la Ley de Seguridad Nacional. ¿De qué se trata?
La discusión por los términos del dictamen entre diputados prianistas y diputados del PRD y del PT llevó a estos últimos a tomar la tribuna por unos minutos para exigir que se suprimiera el dictamen de la comisión de Marina referente a que los operativos se desarrollen “en el momento, circunstancia y lugar que el mando supremo lo ordene”.
El presidente de la Mesa Directiva decretó un receso ante la toma de la tribuna para que las partes negociaran los ajustes al dictamen original. Los diputados del PRD y del PT lograron que se determinara que los operativos a cargo de la Marina, además de estar sujetos a las disposiciones constitucionales, se coordinen con las autoridades de los tres órdenes de gobierno, y siempre con apego a la Constitución.
A lo que quiero llegar con esta información es a lo siguiente: si nuestros “representantes” no nos representan, ¿a quién representan?
Los legisladores son electos por los ciudadanos, con excepción de los plurinominales. Nosotros les permitimos llegar al Congreso pero no nos representan ni velan por los intereses del pueblo. La solución está en nuestras manos. Tenemos la obligación de reflexionar nuestro voto, de no entregarlo a los partidos que nos han y nos siguen traicionando.
Darle manga ancha a las fuerzas armadas para intervenir en operativos en los que han violado las garantías individuales y los derechos humanos, es una medida, además de inconstitucional, completamente contraria a la seguridad de la ciudadanía.
¿Para quién trabajan los legisladores del PRI y del PAN?
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