En su cuenta twitter @antoniosola_ , el español Antonio Solá se define: “#Estrategapolítico . Socio de @OstosSola y Vicepresidente de Certal. Creo en que es posible construir un mundo mejor a través de la política.”. En México -a partir de su colaboración con el PAN y Felipe Calderón durante el proceso electoral de 2006, el cual enlodaron criminalizando a un adversario político y burlando y dividiendo a la sociedad mexicana-, se le conoce ya, se le ha identificado, como una amenaza para la democracia y como el verdadero peligro para México.
¿Se puede “construir un mundo mejor” comiendo y tirando mierda sin escrúpulos tal cual hicieron Antonio Solá y su compañía Ostos & Sola durante el 2006 (u OstosSola, fundada en 2001 junto con Gloria Ostos como “una consultora especializada en la generación de estrategias políticas, sociales y empresariales”), al lanzar la campaña maldita “López Obrador, un peligro para México”, plagada de odio, mentiras e imágenes siniestras por televisión y que como resultado ha conducido al país a la derrota moral en que se encuentra? Pareciera que sí. Gloria y Antonio señalan que han estado al lado de “líderes con cuyos sueños hemos compartido la vida”, ejemplos: Álvaro Uribe, José María Aznar, Mariano Rajoy, Felipe Calderón, Otto Pérez Medina…
Violando el artículo 33 de la Constitución Política mexicana que con justicia prohíbe a los extranjeros hacer política en el país, el PAN no sólo invitó a José María Aznar a hacerlo, también incorporó a Solá a la campaña de Calderón quien en un acto flagrante de corrupción, vía rápida apenas tomó el poder, lo nacionalizó mexicano en 2009; para que nadie protestara por su ilegal intervención en la campaña de entonces.
Pero, ¿qué se conoce de semejante personaje?
Aparte de haber nacido en España, ser ahora “mejicano” por desgracia del PAN y Calderón y ser cofundador de Ostos & Sola, Solá Reche ha sido militante del derechista Partido Popular Español, se ha ligado a cuanto político ultraconservador ha podido en su país y Latinoamérica, pues comparten visión (como los arriba mencionados, no obstante, su habilidad le ha alcanzado para aliarse con cierta izquierda “moderna”). Ha acusado reiteradamente a los adversarios de sus asesorados de lo mismo: como peligro del país respectivo. No he hallado información sobre los estudios y la escolaridad del sujeto en cuestión, sin embargo, he encontrado la siguiente cita en diversas columnas del internet:
“El signo distintivo de Solá es su predilección por el uso de la llamada ‘propaganda negra’ y de las ‘campañas negativas’. La primera se sustenta en enlodar la imagen del adversario, en el esparcimiento de rumores, uso de pasquines y del Internet, para denostar la figura del contrincante político, las más de las veces con falsedades.
La segunda, se encamina a inhibir el voto a favor del adversario, más que a ganar adeptos por las propuestas propias”.
En un magnífico artículo de Proceso “Antonio Solá, el peligro para el 2012”, Álvaro Delgado es preciso:
“…tiene un buen bagaje técnico para lograr efectos deseados como el rumor, la contracampaña, la inducción del miedo, la provocación que convierte al adversario en un enemigo irreconciliable y en una amenaza.
“Son los principios que se profesan en las campañas electorales desde la derecha. Explotar la sensación de inseguridad, miedo y odios sociales en el electorado para optar por una mano firme y eficaz.
“La clave de Solá no está en las ideas sino en el dinero. Cobra mucho y necesita de una infraestructura de Estado para que sus planteamientos sean replicados a través de medios electrónicos, redes sociales, rumores y aparatos corporativos inventados desde el poder. Domina ahora instrumentos como los videos en Youtube o las cuentas falsas en Twitter, los famosos “boots” o los “trolles” que facilitan las contracampañas.”.
Ante la debacle de Vázquez Mota como candidata, se ha dicho que realizarán prontos cambios a su equipo y estrategia, entre ellos, la “novedad”, ironiza Federico Arreola, de la incorporación de Solá Reche, cuando parece que siempre ha estado allí. Tal vez sólo se trate de un ajuste en los arreglos del contrato de colaboración.
Josefina Vázquez Mota negó ante la periodista Carmen Aristegui que Antonio Solá fuera su asesor a pesar de las muchas evidencias, lo cual la ubica en el plano abierto de la mentira pública. Simplemente, en el video del décimo aniversario de la compañía, la candidata aparece una y otra vez elogiando al mercenario contemporáneo español y subrayando la cercanía de éste con Felipe Calderón en 2006. Señala con sonrisa a flor de labio: “No podría entender la campaña de… Calderón sin OstosSola. Solá y la empresa se convirtieron en personajes centrales y decisivos. Los recuerdo absolutamente comprometidos… audaces atrevidos, implacables si era necesario”.
En el mismo video, los socios del pillaje político, Gloria y Antonio, comparten su aspiración de que la compañía se convierta en líder mundial para contribuir a la construcción del mundo mejor que los hará felices por su responsabilidad social, política y humana (¡!). Pero, ¿se puede vivir en la impunidad de la mentira, en la ideología de la mierda sin que haya una reacción de la sociedad, sin que esta descubra el engaño reiterado que sólo surte efecto por la fuerza del aparato del estado y los medios multiplicadores detrás de ella como en la peor época del totalitarismo y el nazismo, sin que los farsantes paguen un precio por ello?
Quienes cierran el video celebratorio (realizado el año pasado) son el chistoso forzado presidente de Haití Michel Martelly -quien recién ha nombrado al mercenario como Embajador Itinerante de su pobre país a cambio de no sabemos cuántos miles de dólares tan urgentes para el desarrollo del mismo-, y precisamente Vázquez Mota, quien los califica como “constructores de libertad y de esperanza”.
Aquí el video en cuestión:
http://www.youtube.com/watch?v=j3xHnFADoyA&feature=player_embedded#
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