LA GUERRA DE CUARTA GENERACIÓN

En 1989, William Lind y cuatro oficiales del Ejército y del cuerpo de Infantería de Marina de Estados Unidos, formularon la teoría de la Guerra de la Cuarta Generación, y la expresaron en un documento intitulado “El rostro cambiante de la guerra: hacia la cuarta generación”. A partir de ahí este término es utilizado por los analistas y estrategas militares para describir la última fase de la guerra de la tecnología informática y de las comunicaciones globalizadas, posteriormente este concepto fue asociado a la Guerra Asimétrica y a la Guerra Contraterrorista.

Lind, siguiendo a otros teóricos, estructuró la guerra moderna en cuatro generaciones o fases:

Primera Generación: se inicia con las armas de fuego y alcanzan su cúspide con las Guerras Napoleónicas.

Segunda Generación: se inicia con la industrialización y la mecanización, su elemento fundamental es la capacidad de movilización de grandes ejércitos y el uso de maquinaria bélica. La Primera Guerra Mundial sería la cúspide de este tipo de guerra.

Tercera Generación: se inicia con la guerra relámpago o Blitzkrieg del ejército alemán, durante la Segunda Guerra Mundial. Se funda en la velocidad y sorpresa de un ataque, en la base de una superioridad tecnológica sobre el enemigo, impidiendo cualquier ejecución de defensa coordinada del atacado, el ataque se basa en la concentración de fuerzas aéreas y terrestres coordinadas, en la interrupción de comunicaciones del enemigo y en el aislamiento logístico de sus defensas, causando un intencional impacto sicológico aterrador. La Blitzkrieg fue usada por Estados Unidos en la Invasión de Irak en 2003, y por Israel en la Guerra del Líbano en 2006. Los resultados de dichos conflictos cuestionan la efectividad moderna de este tipo de guerra.

Cuarta Generación: es una denominación dentro de la doctrina militar estadounidense que comprende a la Guerra de Guerrillas, la Guerra Asimétrica, la Guerra de Baja Intensidad -la que estamos viviendo en México bajo el nombre de “guerra contra el narcotráfico”-, la Guerra Sucia –el mejor ejemplo es Acteal-, el Terrorismo de Estado u operaciones similares y encubiertas, la Guerra Popular, la Guerra Civil, el Terrorismo y el Contraterrorismo, en combinación con estrategias no convencionales de combate que incluyen la Cibernética, la Población Civil y la Política. En este tipo de guerras no hay enfrentamientos entre ejércitos regulares ni necesariamente entre Estados, sino entre un estado y grupos violentos o mayormente entre grupos violentos de naturaleza política, económica religiosa o étnica, y sin orden aparente de continuidad.

1.- “Contraterrorismo”:

Se produce, por primera vez, el uso sistematizado del “terrorismo” (realizado por grupos operativos infiltrados en la sociedad civil), complementado con Operaciones Psicológicas Mediáticas orientadas al aprovechamiento social, político y militar del hecho terrorista, los ataques terroristas del 11-S en Estados Unidos es un ejemplo de ésta.

La “guerra preventiva” contra el “terrorismo” produce un salto cualitativo en la metodología y en los recursos estratégicos de la Guerra de Cuarta Generación al servicio de los intereses imperiales de la potencia hegemónica del sistema capitalista: Estados Unidos, la invasión a Irak contiene todos estos elementos.

El desarrollo tecnológico e informático, la globalización del mensaje y las capacidades para influir en la opinión pública mundial, convertirán a esta guerra psicológica mediática en el arma estratégica dominante de la 4GW, en su variante “contraterrorista”, por ello el terror sustituye a las armas.

2.- “Guerra Psicológica o (Guerra sin Fusiles):

En su definición técnica esta guerra se funda en el empleo planificado de la propaganda y de la acción psicológica orientadas a direccionar conductas, en la búsqueda de objetivos de control social, político o militar, sin recurrir al uso de armas, y así aniquilar, controlar o asimilar al enemigo.

Los ejércitos militares son sustituidos por grupos operativos descentralizados especialistas en insurgencia y contrainsurgencia, y por expertos en comunicación psicológica de masas.

El objetivo estratégico ya no es el apoderamiento y control de áreas físicas (poblaciones, territorios, etc.), sino el apoderamiento y control de la conducta social masiva. Las balas militares son sustituidas por consignas mediáticas que no destruyen el cuerpo, ”simplemente” anulan la capacidad cerebral para decidir por si mismo.
Los guerreros psicológicos impiden que se analice la información, se bombardea con noticias, títulos, imágenes, que excitan los sentidos y la curiosidad, sin hacer conexión entre sí. De esta manera el cerebro está sometido a la lógica de Maquiavelo “divide y vencerás”. Por ejemplo, cuando se leen titulares con el nombre de “Bin Laden”, “Al Qaeda”, la mente los relaciona con consignas de miedo asociadas con “terrorismo”. Cuando se leen las noticias en la prensa sin analizar los qué y los para qué de cada noticia o información periodística, se está cayendo en el área de la Guerra de Cuarta Generación.

Esta estrategia estadunidense está basada en la teoría propagandística, terrible e implacable desarrollada por Goebbels durante la Segunda Guerra Mundial, consta de 11 PRINCIPIOS que se mencionan a continuación:

1. SIMPLIFICACIÓN Y DEL ENEMIGO ÚNICO: Adoptar una única idea, un único símbolo. Individualizar al adversario en un único enemigo.

2. MÉTODO DEL CONTAGIO: Reunir diversos adversarios en una sola categoría o individuo. Los adversarios han de constituirse en suma individualizada.

3. TRANSPOSICIÓN: Cargar sobre el adversario los propios errores o defectos.

4. EXAGERACIÓN Y DESFIGURACIÓN: Convertir cualquier anécdota, por pequeña que sea, en amenaza grave.

5. VULGARIZACIÓN: Toda propaganda debe ser popular, adaptando su nivel al menos inteligente de los individuos a los que va dirigida. Cuanto más grande sea la masa a convencer, más pequeño ha de ser el esfuerzo mental a realizar. La capacidad receptiva de las masas es limitada y su comprensión escasa; además, tienen gran facilidad para olvidar.

6. ORQUESTACIÓN: La propaganda debe limitarse a un número pequeño de ideas y repetirlas incansablemente, presentarlas una y otra vez desde diferentes perspectivas, pero siempre convergiendo sobre el mismo concepto. Sin fisuras ni dudas. De aquí viene también la famosa frase: “SI UNA MENTIRA SE REPITE SUFICIENTEMENTE, ACABA POR CONVERTIRSE EN VERDAD”.

7. RENOVACIÓN: Hay que emitir constantemente informaciones y argumentos nuevos a un ritmo tal que, cuando el adversario responda, el público esté ya interesado en otra cosa. Las respuestas del adversario nunca han de poder contrarrestar el nivel creciente de acusaciones.

8. VEROSIMILITUD: Construir argumentos a partir de fuentes diversas, a través de los llamados globos sondas o de informaciones fragmentarias.

9. SILENCIACIÓN: Acallar las cuestiones sobre las cuales no se tienen argumentos y disimular las noticias que favorecen al adversario, también contraprogramando con la ayuda de medios de comunicación afines.

10. TRANSFUSIÓN: Por regla general, la propaganda opera siempre a partir de un sustrato preexistente, ya sea una mitología nacional o un complejo de odios y prejuicios tradicionales. Se trata de difundir argumentos que puedan arraigar en actitudes primitivas.

11. UNANIMIDAD: Llegar a convencer a mucha gente de que piensa “Como todo el mundo”, creando una falsa impresión de unanimidad.

3. Los conflictos asimétricos

Esta teoría es subsidiaria de la guerra de cuarta generación, y profundiza en el estudio de las confrontaciones no regulares, no continuas, que no se realizan entre ejércitos convencionales. La confrontación es vista como difusa o contra occidental. El interés de este tipo de guerra escapa a la intención de controlar un territorio concreto. Para Paul F. Herman, la guerra asimétrica es un conjunto de prácticas operacionales que tienen por objeto negar las ventajas y explotar las debilidades de la parte más fuerte, antes que buscar enfrentamientos directos, un ejemplo de éstas sería la derrota del ejército de Maximiliano durante la intervención francesa, conocida como “guerra de guerrillas”, para lo que se requiere conocer muy bien la geografía del lugar, otro sería la derrota de los Estados Unidos y Rusia en las guerras de Vietnam y Afganistán.

Las características de este tipo de guerra son:
· Uso de técnicas “ajenas” a las usadas por la tradición occidental
· Se concentra en evitar la confrontación donde el adversario tiene fortalezas y explotar sus áreas vulnerables

· Obtener un efecto desproporcionado respecto a la inversión militar hecha

· Afectar la voluntad de lucha del más fuerte

· Suele utilizar la manipulación psicológica. La mente del enemigo es blanco de las escaramuzas y las tácticas de guerra

· Privilegia la simplicidad y no la complejidad

· La prioridad la constituye la labor de inteligencia y las tácticas de infiltración

RResumen: Luzma Acosta