A POCO más de la mitad de la carrera por la Presidencia de la República, el candidato de las izquierdas busca un nicho electoral que desdeñó en la elección de 2006: las clases medias. Andrés Manuel López Obrador ha confiado a sus colaboradores más cercanos que el siguiente paso, antes del tramo final de la campaña, va por los ciudadanos con poder adquisitivo. ¿Por qué ahora?, se preguntará usted. El tabasqueño tiene la idea de que el empuje que están dando los universitarios, el #YoSoy132, le ha abierto las puertas para llegar a mexicanos que no le siguieron en la elección presidencial de hace seis años. La estrategia es abrir el abanico hacia ciudadanos que tienen mayores alcances en la economía, nos explican.
EN LA GUERRA de las estrategias, el candidato presidencial del PRI-PVEM, Enrique Peña Nieto, busca despejar cualquier nubarrón en este tramo de la campaña, principalmente por la aparición de jóvenes opositores en sus actos proselitistas. El equipo del mexiquense ha decidido fortalecer el mensaje hacia la juventud, para pedirle que escuche y analice las propuestas de gobierno. Paralelamente, apuntaló el objetivo con el adiós al pasado, romper con el pasado, con aquello de que en su proyecto no hay lugar para la corrupción, el encubrimiento y la impunidad.
FUERON algunos “encontronazos” entre el presidente Felipe Calderón y la cúpula del Consejo Coordinador Empresarial. Durante el sexenio se dieron algunos choques, dijo este viernes el mandatario en la asamblea del organismo privado. En 2009, el mandatario riñó con el poderoso CCE porque el grupo se opuso, al compás del PRI, a la reforma hacendaria. El jefe del Ejecutivo le reclamó en noviembre de ese año al consejo su postura y le echó en cara que algunos empresarios no pagaban impuestos. Pero todo quedó en el pasado. Los empresarios, que se la jugaron con él en 2006 y le dieron la espalda a Andrés Manuel López Obrador, prodigaron ayer a Calderón dos largos aplausos de pie, como hace una semana lo hicieron los banqueros en Acapulco.
LOS HOMBRES de negocios afiliados a la Canacintra se deshicieron en elogios para el aspirante presidencial de Nueva Alianza, Gabriel Quadri, único asistente en la convención nacional de los industriales de la transformación. Los otros candidatos le dieron un poco de vueltas a la reunión: el priísta Enrique Peña Nieto envió a su enlace con los empresarios, Ildefonso Guajardo, y la panista Josefina Vázquez Mota le pidió a su asesor Mario Laborín asistir en su representación. Andrés Manuel López Obrador no mandó a nadie, nos comentan.
LA SUSPENSIÓN de sus derechos como militante es cuestión de horas. El PRI tiene decidido cerrar el caso del ex gobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrintgon, acusado en Estados Unidos de recibir sobornos del crimen organizado. Cautos, los ex gobernadores priístas Enrique Martínez y Melquiades Morales dijeron este viernes que el partido no solapará a ningún militante que haya tenido una conducta indebida o fuera de la ley. Pero algo no les cuadra: el golpe vino a la mitad de la contienda electoral por Los Pinos.
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