domingo, 13 de mayo de 2012

Madres sin hijos-- POLIMNIA ROMANA

Tal vez no existe pena mayor que la de perder a un hijo. Muchas de las madres que ayer no tuvieron motivos para festejar su día, se reunieron en el Ángel de la Independencia para demandar justicia, porque los oídos sordos de quienes tienen como tarea y responsabilidad el esclarecimiento de las desapariciones que ocurren en el país, no han hecho su trabajo, y, no sólo eso, sino que con una terrible falta de sensibilidad niegan información a las madres y padres desesperados que desconocen el destino de sus hijos.

Su estrategia es dejar pasar al tiempo para ver si se olvidan de sus hijos pero eso es imposible. La lucha que estas madres han emprendido no tendrá tregua porque su dolor es eterno.

El candidato de las fuerzas progresistas, desde su conferencia de prensa matutina envió a estas madres palabras de consuelo, con la promesa de que estará a su lado para ofrecerles la atención que merecen y cumplir su anhelo de justicia.

Qué bueno que para López Obrador no pasaron desapercibidas las demandas de estas madres, como tampoco el sufrimiento de las que perdieron bajo el fuego a sus pequeños en la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora. Esas madres y esos padres que fueron heridos en lo más hondo de su ser, por la irresponsabilidad y la impunidad de funcionarios ineptos y corruptos, no están solos. El pueblo de México no olvidará nunca ese agravio que sigue sin castigo.

Sinceramente pienso que sólo el aspirante de la izquierda, que no olvida a estas madres, hará hasta lo imposible por dignificar la vida de los hijos que perdieron o que permanecen desaparecidos, y ejercerá su autoridad moral para que se cumpla su anhelo de justicia.

Los demás seguirán en su bla, bla, bla, y a la primera oportunidad darán carpetazo al asunto.


Vamos por un camino del todo nuevo, dice Andrés Manuel López Obrador, en el que los valores humanos y las virtudes se antepongan al egoísmo y al deseo de poseer bienes materiales por encima de la dignidad de otros.

La solidaridad no es una palabra vacía cuando se está cerca de los que más nos necesitan.

No hay comentarios: