El PRI intentó adelantarse a la conferencia que daría ayer Andrés Manuel López Obrador sobre el origen del dinero ilegal en la campaña de Enrique Peña Nieto por medio de una entrevista que dio Jesús Murillo Karam a Reforma para admitir que el PRI sí usó tarjetas de débito para distribuir dinero a sus estructuras estatales, pero que no usan Monex, sino otra empresa -que Murillo Karam no quiso identificar- y que lo se deposita en esas tarjetas no es parte de su presupuesto de campaña, sino del gasto corriente del PRI.
Dan las 13:00 horas y López Obrador, junto con Jaime Cárdenas, muestran evidencias contundentes de que se trianguló dinero de varias empresas y una persona moral para las empresas Inizzio y Efra compraran las tarjetas de Monex que usaron operadores electorales del PRI. El uso de las tarjetas por operadores del PRI, por cierto, consta en el IFE.
Se trata, dijo Jaime Cárdenas, de las empresas Tiguán, Atama, Koleos, y de la persona moral Rodrigo Fernández Noriega.
Tiguán, reveló Cárdenas, fue proveedor de utilitarios electorales para la compaña de del Eruviel Ávila en el Estado de México.
Inizzio y Efra, además, fueron creadas el mismo día y por las mismas personas con domicilios falsos. Los que las registraron dijeron ser, uno, obrero, y otro empleado.
Y como ya hay constancia ante el IFE, por una acusación del PAN, que quienes usaron las tarjetas de Monex son operadores del PRI, no tiene el PRI para dónde hacerse.
Y de pilón, AMLO mostró 11 nuevas tarjetas de Monex que el PRI habría usado en Tabasco, ahora con el nombre
¿La respuesta del PRI? Lanzar un montón de insultos contra López Obrador, pero sin mostrar pruebas que contradigan a la evidencia presentada por AMLO.
Dijo el PRI que las acusaciones que hizo AMLO son falsas e irreacionales. No dijo por qué. Esto pese a que AMLO mostró las evidencias que respaldan sus acusaciones. Y repitió que lo que busca AMLO es mantenerse vigente ante la opinión pública. De nuevo, sin presentar evidencias. Sólo insultando.
Lo del PRI ya nisiquiera llega a la Defensa Chewbacca, en donde por lo menos se da algún tipo de explicacipon absurda que nada tiene que ver. Pero lo que está haciendo el PRI de plano se ha reducido a un mero berrinche con insultos y negativas, pero sin evidencias.
Ah, y por cierto: respecto a lo que dijo Karam de que el PRI sí usa tarjetas pero del gasto corriente del PRI, hay un detalle que no dijo: no les alcanzaría todo el dinero que recibió el PRI en 2012 del IFE para pagar lo que se gastaron.
De acuerdo con el IFE, en 2012 el PRI recibió poco más de mil 644 millones de pesos. Pero como demostramos ayer en blogdeizquierda.com, el PRI pagó 2 mil 500 pesos a cada uno de sus representantes de casilla. Con un promedio de 4 representantes en las 140 mil casillas del país, el PRI hubiera tenido que gastar mil 400 millones de pesos, quedándole 244 millones para hacer campaña y cero pesos para operar durante el año, cosa que, francamente, resulta inverosímil.
¿Quién está haciendo declaraciones falsas entonces?
PD: Según Murillo Karam, en el PRI usan tarjetas tipo Monex para no tener que trasnportar efectivo. ¿Y entonces por qué no compraron unas tarjetas para pagar los 25 millones de pesos que le decomisaron a Javier Duarte en Veracruz?
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