España, a tres meses de la argentinización...

España, a tres meses de la argentinización

Federico Arreola
15 de Junio, 2010 - 01:09 | 21 comentarios Envía.La buena noticia, España puede ganar el Mundial. La mala, en las calles de sus principales ciudades celebrarán la victoria, en caso de que se concrete, miles y miles de desempleados o de personas quebradas que no pueden pagar sus deudas.



Si España no se gana la confianza de los inversionistas, se argentiniza. Y en 90 días. Eso dijo Xavier Sala i Martín, economista de la Universidad de Columbia hace una semana. Lo leí en el diario madrileño especializado en negocios, El Economista.



¿Cómo puede la nación gobernada por José Luis Rodríguez Zapatero conquistar esa confianza? Con lo de siempre: reformas estructurales, sobre todo a la legislación laboral. Esas durísimas reformas que invariablemente exigen los mercados y las instituciones como el FMI a las sociedades en crisis. Y la española, sin lugar a dudas, se encuentra en una muy severa.



Actualmente, la fuga de capitales está matando a España, que ya solo puede financiarse en el Banco Central Europeo.



Leo en El Economista que "España tiene ante sí un examen inmediato: devolver el dinero que le han prestado. Los números están encima de la mesa: nuestro país necesita este año 600 mil millones de euros para atender a sus obligaciones, de los que 400 mil millones corresponden a deuda privada (bancos, cajas, familias, empresas...) y 200 mil a deuda pública, gran parte por el abultado déficit. Si atendemos a la que corresponde a financiación para hacer frente a los vencimientos de deuda, sólo el 30 de julio, la suma a pagar supera los 16 mil millones de euros, que junto a los casi 7 mil 600 millones del día 23, sobrepasan los 23 mil millones".



¿Pagará España? Se supone que sí, aunque no se ve cómo.



Lo más probable es que, antes de que España suspendiera pagos, sería rescatada por el resto de Europa. En efecto, tal como ha ocurrido recientemente con Grecia. Si fuera el caso, el daño para la economía española en el largo plazo sería enorme, ya que le dejaría prácticamente sin credibilidad, es decir, sin proyectos de inversión.



A diferencia de la crisis griega, la mayor parte de la deuda española es privada, no pública, y se originó en el boom inmobiliario. Y esto complica las cosas. Sucede que cada día son más las familias españolas que no pueden pagar sus deudas a los bancos, lo que agrava la ya de por sí mala situación del sistema financiero.



Es una tristeza que no terminen los problemas económicos en Europa ni en ninguna parte. Algo va a pasar, y muy fuerte, ya que no pueden las cosas seguir así. Debemos prepararnos para cualquier cosa. Es que, ya se sabe, la historia no perdona. Vivimos en los últimos años un período demasiado prolongado de gran derroche. Llegó la hora de pagar las facturas, que en estos casos no se saldan con dinero, que no existe, sino con cambios profundos en la política y la economía. Ya se verá.