Tiene mucha razón Jaime Cárdenas, Diputado por el PT, en decir que la Cámara de Diputados está capturada por los poderes fácticos. Prueba de ello es que las iniciativas aprobadas por la mayoría prianista son contrarias a los ciudadanos: aumento de impuestos y tarifas de bienes y servicios que afectarán la economía familiar, evasión de impuestos de las grandes empresas como Televisa, T.V. Azteca, y Telmex, entre otras; distribución del Presupuesto entre los estados gobernados por prianistas, seguramente, para sus campañas electorales, no aceptación de la Ley de Austeridad Republicana con la que disminuirían los salarios de altos funcionarios y los gastos superfluos que realiza el gobierno, etc, etc, etc.
Tampoco los diputados prianistas apoyaron la controversia constitucional en contra del Decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro, haciéndose cómplices de Calderón en el despido inhumano, injustificado e inconstitucional de más de 44 mil trabajadores de esa empresa pública.
Hasta el momento, dice Jaime Cárdenas, la Cámara baja no cuenta con un procedimiento para aprobar o rechazar las cuentas públicas, lo que constituye una irresponsabilidad porque ese instrumento es uno de los principales para la fiscalización y el control del legislativo sobre el ejecutivo.No contentos con eso, los prianistas rechazaron la ratificación del Auditor General, Arturo González de Aragón quien, con justa razón, declaró que los partidos políticos se han convertido en mafias que utilizan al país como botín para repartirse el patrimonio público con total cinismo y desvergüenza.Para colmo de todas nuestras desgracias, los diputados prianistas ratificaron al doctor catarrito en el Banco de México para asegurar la salvación de los que no han corrido riesgo alguno.
En suma, dentro de la Cámara de Diputados no se dictaminan leyes o reformas a la Constitución que promuevan la democracia, los derechos humanos, el federalismo o la autonomía municipal. Las comisiones, que son los principales espacios del trabajo legislativo, no laboran y no dinamizan las funciones parlamentarias. ¿Quién mejor que un Diputado para conocer los enjuagues dentro del recinto legislativo?Un saludo afectuoso al Diputado Jaime Cárdenas.
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