Me cuentan que en alguna escuela de negocios de Estados Unidos recomiendan dos cosas para triunfar en la vida: (1) Imitar modelos exitosos y (2) tirar lastre.
Es obvio que si AMLO se acerca a Lula, de Brasil, o a Felipe González, de España, ganará con facilidad de las elecciones de 2012.
Si, en cambio, se identifica con el antidemocrático Hugo Chávez, de Venezuela, perderá las próximas presidenciales mexicanas.
Creo que AMLO, en todos sus discursos, se presenta a sí mismo como un izquierdista moderado mucho más parecido a Lula o a González que a Chávez.
De hecho, Andrés Manuel, un luchador social que siempre ha elegido la opción democrática, nada tiene que ver con Hugo Chávez, un militar con antecedentes golpistas que ha arruinado a la economía venezolana y que no respeta la libertad de expresión en su país.
Pues bien, empezar a tirar lastre es lo que ahora le hace falta a López Obrador; tirarlo, sí, para terminar de convencer al sector de la población de clase media que no lo conoce y que, más allá de eso, tiene una errónea imagen de él por culpa de la propaganda en su contra difundida por casi todos los medios de comunicación, unos al servicio del PRI y otros abiertamente pagados por el PAN.
El lastre del que AMLO debe deshacerse cuanto antes lo representan sus seguidores radicales, que son la minoría entre quienes simpatizan con el gobierno legítimo.
Son la minoría, en efecto, pero cuánto daño hacen.
¿Quiénes son los ultraizquierdistas que no deberían tener cabida en el movimiento de López Obrador?
1. Los que insultan a los ricos solo por el hecho de ser ricos.
2. Los que se burlan de las personas, sobre todo las jóvenes actrices y cantantes, que buscan una oportunidad de trabajo en Televisa o en TV Azteca.
3. Los que, ante los ofensas y calumnias de la derecha, responden con ofensas y calumnias.
4. Los que el domingo, en el Zócalo, vieron con desprecio a quienes practicaban yoga porque entre estos habían algunos "pirrurris".
5. Los que no entienden la importancia social de las empresas privadas.
Aunque son pocos, cuánto estorban esos radicales de izquierda. Son el lastre que ya le urge tirar a Andrés Manuel López Obrador. En cuanto lo haga se elevará tanto sobre el resto de los políticos mexicanos que se volverá, sin duda, inalcanzable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario