Algunos periodistas serios, hay que reconocer que nos quedan algunos, también están atizando el fuego del fraude al decir que en el Estado de México ya está definido el triunfo del PRI por la cantidad de recursos del erario que han despilfarrado en la compra de votos y voluntades; porque tienen a su servicio al Instituto Electoral del Estado de México, porque han recibido apoyo de los gobernadores a petición de un tal Peña Nieto y porque también trabajarán a su favor los sindicatos de delincuencia electoral, entre ellos el célebre SNTE de doña Agripina de la triste memoria.
Sí, claro, eso ya lo sabemos pero como dije ayer, falta la opinión del pueblo.
No es mentira que Alejandro Encinas cuenta con la simpatía de un sector muy grande de los mexiquenses y, además, otro sector está, como dijera el poeta, hasta la madre de PRI y PAN en la entidad.
Encuestas amañadas leemos, votos el 3 de julio no sabemos.
A poco nos vamos a cruzar de brazos por la serie de irregularidades, por la inequidad y la ilegalidad de la “campaña” priista. Pues no, la esperanza es lo último que muere.
¿Qué tal si la gente ya hizo caso a la recomendación de aceptar las dádivas sin comprometer su voto?
Puede suceder.
Yo conozco a una señora muy querida que va a todas las reuniones de todos los partidos y recibe lo que le
regalan pero a la hora de votar, vota por los que no traicionan al pueblo.
Vamos echándole ganas esta semana que nos queda para convencer a los indecisos y a los apáticos, que piensan que nada se puede lograr frente a la aplanadora del PRI.
Hasta el cielo se puso en contra del anunciado fraude. Ayer amanecieron inundadas algunas colonias de Nezahualcóyotl y Ecatepec, donde disque ha gobernado Eruviel Ávila, quien aseguró que jamás volverían a ser invadidos por las aguas negras.
Mientras las promesas incumplidas de los políticos corruptos no le afecten directamente a la gente, puede seguir creyendo las mentiras de la tele pero cuando pierde a sus seres queridos, sus pertenencias, su seguridad y la mínima posibilidad de vivir con dignidad, las cosas cambian.
El pueblo del Estado de México ya no está tan dormido como ellos quisieran. Ha aprendido por experiencia que los fantoches no trabajan por el bien común y que seguirlos apoyando va en perjuicio de las mayorías.
Además, han experimentado la alegría de una plaza llena, sin acarreos, donde los discursos están llenos de verdades. Así la cosa cambia.
Yo les recomiendo a los pocos periodistas honestos que nos quedan, que no se den por vencidos antes de la pelea. Qué bueno que nos informan de las cochinadas que hace el PRI para mantenerse en el poder, gracias, pero no nos ayuden con sus vaticinios amargos.
Sí se puede parar la maquinaria de la corrupción y de la impunidad con un pueblo informado y organizado que mantiene viva la llama de la esperanza.
La democracia no es sólo salir a votar, es vivir en armonía, igualdad de oportunidades y respeto a la ley.
Vamos a votar por Encinas el próximo domingo con la certeza de que es la mejor opción.
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