Considero la palabra romántico como la mejor forma para resumir nuestra parte utópica de la realidad adversa.
Siempre he sido un crítico de las posturas idealistas –aunque a veces peque de lo mismo-, porque considero que en la mayoría de las veces juegan un papel maquiavélico en nuestro inconsciente, tratando de apaciguar y ocultar una frívola realidad. En términos coloquiales, sería algo así como hacernos chaquetas mentales.
Debo de reconocer que cuando el hoy director de SDPnoticias.com hizo un formal acercamiento con el entonces creador del blog El Sendero del peje, me regocije, después de aquel ambiente de resistencia civil de plantones surgiera una oportunidad de negocio entre los llamados rijosos e inadaptados seguidores del líder tabasqueño. Y sí, mi beneplácito fue que a pesar de todo ese romanticismo que surgió en el plantón y en el movimiento de resistencia civil pacífica, surgiera a la par, una visión emprendedora entre dos personajes con su propia historia y trayectoria, quienes ahora por la frivolidad que suelen ser los negocios, dichos socios se han disuadido en su visión de negocio.
Me parece totalmente utópica la propuesta de don Federico Arreola respecto a la supuesta generosidad del aspirante presidencial priista y, no porque ésta sea una cuestión de humildad o bondad por parte de quien tiene posibilidades de arribar al poder, sino por cuestiones de integridad y congruencia. Si los personajes que menciona don Arreola en su texto aceptaran la invitación en el hipotético llamado, yo en lo personal no los consideraría traidores o vendidos –eso sería lo menos descriptivo de mi parte-, lo que pensaría en realidad, sería lo putrefacto del sistema político mexicano que no radica en la compra de voluntades o en la búsqueda de nuestras propias aspiraciones por encima del bienestar social, sino más bien, sería la absoluta ausencia de la congruencia, la integridad y ética humana para dirigirse en medio de lo podrido del sistema político y social actual.
Con la propuesta romántica del director de este diario digital, se me viene a la memoria una entrevista hecha al emblemático expresidente ejecutivo de GE Jack Welch donde se le pregunta sobre cuestiones de liderazgo y principios de conducta ligadas al desempeño laboral, en aquella entrevista, Welch describe que para que una persona destaque y nos ofrezca sus mejor desempeño de liderazgo, ésta debe compaginar con la ideología, principios y cultura que se viva en la organización, y nos dice –Jack Welch-, de no ser así, es mejor dejarlos ir o que la persona se vaya, ya que que al final lo que a las personas los moverán más allá del dinero y del éxito profesional, serán los valores y principios por los que se trabajarán día con día en la organización para alcanzar la excelencia operativa.
Por ello mi disentir con la postura del director Federico Arreola a su texto. La supuesta bondad de invitar a personajes de la izquierda en éste nuevo régimen sexenal, no estará en el rechazo colectivo de la traición por aceptar trabajar con el tricolor, sino más bien, será el reproche a su ignominiosa prostitución de supuestos ideales izquierdistas.
El Apunte
En la emblemática Toyota reza una frase como ésta: “nosotros no sólo fabricamos autos; nosotros fabricamos gente”
No hay comentarios:
Publicar un comentario