Cruzada contra el hambre... de votos
Las Margaritas, Chiapas, uno de los poblados más desolados y hambrientos del país fue escenario de la gran burla que el gobierno de Peña Nieto restriega hoy en las primeras planas.
Sí, también conozco Las Margaritas, como conozco la mayoría de los municipios más pobres del país. Chiapas tiene carreteras que comunican a todos sus municipios (gracias al estallido del 94) y es objeto de programas "antiprobreza" nacionales e internacionales y aunque les llegan "kilos de ayuda" y "redondeos" el hambre sólo se ha profundizado.
Chiapas me vio crecer, bajo su cielo ardiente y su extensa tierra rodeada de agua mis pies corrieron siguiendo los pasos de niños chiapanecos que, como yo, aprendimos que la naturaleza tiene reglas sagradas. El respeto a la vida de animales y plantas es fundamental para la subsistencia del hombre, de ahí mi incapacidad para sumarme a proyectos depredadores que sólo buscan ganancias materiales y no la preservación de la riqueza natural, que en esa tierra es sagrada y por eso la defienden con su propia vida.
Es una burla para los indígenas regalarles cobijas a cambio de su voluntad, quienes eso pretenden ignoran que ellos elaboran sus propias cobijas de lana y no sólo eso sino que las adornan con paisajes de su hermosa tierra, también es una burla querer canjear comida enlatada cuando ellos cosechan calabazas, frijol, maíz, chiles, duraznos, manzanas y el mejor café del mundo cuando su tierra no es amenazada ni son lanzados a vivir a la intemperie cuando los gobiernos nefastos que han padecido les arrebatan sus tierras.
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