Federico Arreola09 de Octubre, 2009 -
Impresionante la foto en www.sdpnoticias.com: un hombre colgado. Una persona no identificada, bajo un puente en la ciudad fronteriza de Tijuana. A ese señor Las autoridades lo encontraron golpeado, desnudo y castrado. Como en la guerra cristera, como en las películas más terribles.
Colgado, golpeado, desnudo y castrado. Así está México, el México del horror. Sí, el México de Calderón. El país del gobernante que no obtuvo legitimidad en las elecciones de 2006 y que, para conseguirla, decidió combatir con todo al narcotráfico. Hasta se vistió de soldado, para impresionar. Y para convencer y convencerse. Pero así como el traje de soldado le quedó grande, la guerra que emprendió era superior a su autoridad (sobre todo a su autoridad moral) y a su estrategia.
Calderón está perdiendo su guerra, no hay la menor duda. Pero, admitámoslo, como él tiene el poder, su derrota es la de todos.
¿Qué hacer? Simplemente esperar a que llegue el próximo proceso electoral presidencial. Ocurrirá en 2012. La resistencia civil tendrá entonces una nueva oportunidad. Con organización y trabajo será posible llegar a la Presidencia para, ahora sí, empezar a cambiar positivamente las cosas en México. Seamos optimistas y no dejemos de luchar.
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